Capítulo 1. Infancia

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En medio de una noche de lluvia, un hombre se acercaba a Godric's Hollow, la capucha de su túnica envolvía su rostro dejando solo el brillo de sus ojos rojos, las barreras de la casa se desvanecieron cuando agito su varita formando un arco, la puerta principal se abrió dando paso a un hombre bajo de aspecto triste.

-Mi Señor- dijo Peter su cuerpo tembo ante la presencia de lord Voldemort.

-Hazte a un lado cola gusano no tenemos tiempo, el viejo ya debe de estar en camino.-dijo Voldemort- ¿Dónde están los niños?

-En la segunda planta, mi señor-dijo Peter.

Al ingresar en la habitación de los chicos, los dos estaban llorando claramente ante el aura de Voldemort y la abuela de los niños tirada en el suelo con los ojos abierto reflejando la muerte, colagusano le ahorro las molestias.

-Avada Kedavra- el hechizo esmeralda impacto en uno de los niños pero reboto. Voldemort grito mientras su cuerpo se volvía polvo de manera lenta , sus gritos resonaron en la casa dejando solo cenizas envueltas en su túnica y su barita, el resultado genero una explosión que fue vista por James Potter al llegar tras una aparición.

-PETER- la voz de James , resonó en toda la casa, el pánico inundo cada fibra de Peter, su cuerpo cambio al de una rata. Tomo la varita de Voldemort y desapareció por un holló en la pared.

James ingreso en la habitación, encontrado a su madre muerta y a sus hijos en sus cunas cubiertas por escombros, aparto los escombros con un movimiento de su varita. No era el momento para llorar.

-¿Que rayos paso aqui?-Dijo Sirius al llegar junto a Lily y Remus.

-Creo que yo puedo contestar eso, Sirus- Dumbledore llego por medio de una aparición de su fénix- James, mis más humildes condolencias.

Suspiro, miro con pesar la escena, se acercó a paso lento a James y a Lily.

-¿puedo ver a los niños?

Albus examino primero a harry, sentía que su magia estaba muy débil, temía lo peor ,pero no era momento ni el lugar. En cambio con Jim, sintió su magia fuerte y reluciente y noto de primera mano la profunda cicatriz en su frente.

Dejo a Jim en los brazos de su madre.

- vamos a San Mungo, ahora-dijo Albus mientras los Potter se ponían alrededor suyo.

-los veremos ahí, esperemos al DMLE y a los demás aurores- dijo Remus.

James asintió y Fawkes los transporto en una llamarada fugas.

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Habían pasado 10 años desde ese día y Harry estaba examinado un contenedor en unos callejones del Londres de 1991.

Hace tiempo que habia abandonado a los dursley, se sentia afortunado ahora tenia una casa propia, asi harry llamaba a la fabrica abandonada en una de las calles poco transitadas de la metropolis de Londres . Al entrar en su cuarto noto los múltiples instrumentos que tenia a su disposicion, fabricados tan solo con chatarra a los ojos de unos, pero a los ojos de Harry eran su tesoro.

Recordó que a la edad de tres años, cuando  tiro la sartén al suelo con los huevos y el tocino por accidente, lo encerraron todo el día debajo de las escaleras, desde ese día tuvo que ser meticuloso y estar alerta en todo momento.

Al llegar a los cinco años sufriendo un trato que no era muy favorable, solo podía escapar en los libros de la biblioteca cuando sus parientes se iban de vacaciones y lo dejaban con la señora Figg. Harry no se consideraba un genio, sino muy curioso, siempre estaría agradecido con la señora Figg por enseñarle a leer y escribir. Cada día se quedaba maravillado ante los logros de la ciencia y como podía ya crear máquinas que llevaron al hombre a la luna,  tras mucha práctica podia retener cada gota de información.

Fue en sus cumpleaños número 5 cuando ya no aguanto más. Tomo todas sus cosas que tenía y las cuando en una de las viejas mochilas de Dudley. Escribió una carta la guardo en su bolsillo, salió por la puerta del patio trasero con precaución. Fue a la casa de la señora Figg, saco, paso por debajo de la puerta y Harry desapareció en la oscuridad de la noche.

Harry se pasó la mano por la cicatriz que tenía en su frente era recta y llegaba hasta su ceja. Siempre lo hacía cada vez que recordaba.

- crees que este es el lugar- dijo una voz, Harry se sobresalto y corrió directo a la ventana que daba al interior de la fábrica.

-si, está es la dirección, como pudo Harry acabar aquí-dijo un hombre con anteojos y pelo alborotado a una mujer de cabello rojizo.

-fue una mala idea dejar a Harry con mi hermana- dijo la mujer. Harry se puso pálido, era su madre, pero no podría ser lógico, sus tío le dijeron que murieron en un accidente automovilístico, osea que también era mentira.

Pero pronto por la mente de Harry paso una pregunta más grande, porque lo dejaron con los dursley?

Tenía que irse ya, guando sus instrumentos más difíciles de conseguir y su diario de planos en su mochila, la tienda de campaña y una cuantas prendas. Pero ante al prisa el descuido aparece y uno de los libros se cayó al suelo tras jalar la cobija de la cama.

-lily en la segunda planta- dijo el hombre, Harry abrió su conducto de ventilación de emergencia y salto, tras de el escucho un chasquido.

Aterrizó en los colchones viejos, no terminar estrellado contra el pavimento, justo cuando volteaba la calle aparecieron frente a el la mujer peliroja y el hombre de anteojos, después de un pequeño crujido.

Harry aterrizó sobre su trasero tras el tremendo susto de la repentina aparicion.

-calmate Harry, somos tus padres-dijo el hombre. Mientras se acercaba a Harry para ponerlo de pie.

-pero que c.... -dijo Harry sin deja su cara de sorpresa.

El Forjador MagicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora