Enzo.

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Mientras que Julián llevaba una vida bajo las sombras de su amiga, Enzo era totalmente lo contrario, hacía pocos meses se había cambiado de escuela y empezó a concurrir a la secundaria de este pequeño pueblo. Anteriormente, el asistía a una secundaria de la ciudad, a media hora del pueblo. La razón de su cambio desorientante fue por la mala fama de quilombero que tenía, hasta llegaron a hacer una cuenta de instagram llamada "enzurri cagadas"donde subían todas las travesuras que el jóven Enzo realizaba en la semana, aunque a él le causaba gracia el fanatismo de los estudiantes por las cagadas que se mandaba, se dio cuenta que cada vez tenia menos privacidad. Los padres empezaron a hacer comentarios sobre el jóven y para su madre, ya había sido suficiente.

- Enzo no podes tener ese comportamiento de animal - Marina, su madre, lo conocía lo suficiente como para saber que Enzo no era así, algo estaba pasándole a su hijo 

- Deja de joder má, yo sé lo que hago, además me queda re poco para terminar la escuela - Enzo sabía que lo que hacía estaba mal, pero su orgullo le impedía admitirlo

- ¿Qué te pasa enzo?, vos no sos así - Enzo siempre trató con todo el amor del mundo a Marina, pero últimamente estaba teniendo actitudes fuera de lugar, él nunca había causado problemas. Pero ella sabía, como ese instinto de madre, desde que él se empezó a juntar con esa chica Valentina y su grupo de amigos, el había cambiado drásticamente. Ella siempre le dijo que ese grupo específicamente, no le daba buena espina, él claramente nunca le hizo caso.

- ¡Te dije que no me pasa nada dios, deja de ser tan hincha pelota má! - seguido a esto, el menor pegó un portazo y se encerró en su habitación.

Unos días después, Enzo terminó confesándole a su madre que el no hacía todas esas cosas por mérito propio, si no que sus "amigos" amenazaban con contar sus secretos que él inocentemente les había confiado si no hacía lo que ellos decían, disfrutaban ver a Enzo siendo amonestado por la preceptora incontables veces. Uno de los tantos secretos que él había confiado ciegamente era que sentía una leve atracción hacia su compañero, Martín. "Encima de quilombero, puto", le había dicho Valentina, su ex.

Marina le ofreció a Enzo cambiar de escuela, ella conocía una escuela en el pueblo, no sabía si el iba a querer asistir, ya que en aquel pueblo se encontrada el club de su equipo contrario, sabía que eran demasiado pasionales con su club y no dudaba de que apenas se enteren de que Enzo jugaba para su enemigo en la cancha, alguna pelea iba a surgir. Sorprendentemente Enzo aceptó, estaba desesperado por empezar en una secundaria en donde nadie lo conocía, sentía que iba a encontrar buenos amigos ahí, amigos de verdad.

Luego de unos meses de puras discusiones por qué equipo era mejor, burlas por las derrotas, gritos en los pasillos, burlas y más burlas, Enzo se había integrado bastante bien, todos habían comprendido que a pesar de ser de aquel equipo tan detestado en el pueblo, Enzo era un chico bastante copado, siempre que hablabas con él te hacía reir, era responsable y bastante payaso, como decía la de historia. Rápidamente se ganó el cariño de todos en la escuela, ademas de ser atractivo, era chistoso y jugaba al fútbol ¿Qué más podían pedir?, que sea de su club, claro. 


- Che Enzo - dijo su compañero cuti, aburrido en la hora libre, despertando a su amigo que estaba durmiendo arriba de todas las hojas sobre la mesa

- enzooo - volvió a repetir siendo que su amigo no se había ni mosqueado

 - ENZO - gritó, despertando a su amigo de la peor de las formas

- Que mierda querés enfermito dejá dormir - dijo moviendose en su lugar, acomodándose para seguir durmiendo 

- Mirá - dijo el cuti mostrándole la foto de una chica

- Que tiene? - preguntó enzo todavía dormido

- Qué te parece? - preguntó curioso, Enzo agarró su celular para seguir chusmeando más fotos sobre esta tal Delfina. Mientras veía las destacadas de la última nombrada, le llamó la atención una en especifico. Era una foto de ella con su amigo, un tal Julián Álvarez, entró a su perfil y se dió cuenta que tenía la cuenta privada, bufó y le devolvió el celular a su amigo.

- Nada, es linda - pero más lindo es el amigo pensó y rió internamente

- Seguila, dijo que estás re lindo - Enzo, con la peor de las ondas y con ganas de seguir durmiendo, desbloqueó su celular y empezó a seguir a Delfina, era linda eso sí, pero era consciente de que le atraían más los hombres, pero como no había experimentado nada con ninguno, quiso darle una oportunidad. Además, se había acordado de las palabras de su ex Valentina cuando le comentó sobre eso "Dejate de joder Enzo, seguro después se te pasa, además ser puto es de enfermo" Enzo decidió darle la razón, ignorando sus verdaderos pensamientos, si así lo había tratado Valentina, no se quería arriesgar a saber como lo tratarían sus nuevos amigos. Sabía que ellos no lo juzgarían pero igualmente no podía evitar tener miedo.

- Ya la seguí, dejame dormir ahora, pesado - cuti sonrió victorioso, al instante le mandó mensaje a su amiga para comentarle lo que había dicho Enzo sobre ella.




Había pasado semanas de que Enzo había empezado a hablar con Delfi, él sentía que se estaba enamorando, es más, no lo quería dudar, si dudaba se iba a empezar a enroscar en un mundo de posibilidades y pensamientos en los que después no tendría salida, ya se conocía. Aunque las advertencias de sus amigos sobre que Delfina era media gata y que boludeaba a todos retumbaban en su mente, decidía ignorarlas. 

Pero el nombre y la imagen de Julián Álvarez era algo que no paraba.




- ¡Pasála Enzo! - me gritó Dybala, a lo que al toque respondí y realice mi pase con éxito Qué animal pensé

Estábamos re motivados, el domingo teníamos partido contra nuestro clásico rival, el club de mi escuela básicamente. Estábamos imparables.

El silbato sonó y todos nos reunimos para estirar.

- Más te vale que el domingo ganemos porque si no en la escuela te van a torturar - me dijo el lauta

- Prefiero que me torturen antes de que me miren con cara de orto hasta el partido que viene - Lauta rió

Terminó el entrenamiento y me fui en dirección a mi moto, tenía que ir a comprar gaseosa y papitas para llevar a lo de Delfi, si, me invitó a cenar. Bajé en el chino y me saque el casco antes de entrar... Me dirigi a la parte de bebidas, estaba indignado mientras que veía que la china le subía el precio al viñas de balbo, Escoria humana pensé, estaba distraído en mis pensamientos hasta que sentí que algo chocó contra mi pecho, cuando miré para abajo, estaba ahí, el famoso Julián Álvarez.

- Ah sos vos Enzo - dijo, tranquilizandose un poco

Qué lindo que se veía sonrojado



Después de despedirme y dirigirme a mi moto, vi como Juli salía del chino, no había prestado atención a su conjunto deportivo Miralo dije 

- Me parece que me voy a encontrar con alguien el domingo - dije mientras se me escapaba una sonrisa


Vi la hora y me apuré, tenía que estar en lo de delfi a las 8pm y eran las 7:50. Lo bueno tarda en llegar.

Me bañé, me cambie, me vi en el espejo y fuimono' primo

Empatía [Julián Álvarez & Enzo Férnandez]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora