Capítulo 6

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Jungkook corrió al restaurante con su ropa limpia y un mandil impecable.

Jk: Hola buenas noches, tomare los pedidos de la mesa 4 y 7, permiso.

El joven chico estuvo tarareando una canción mientras tomaba y llevaba pedidos, finalizó su turno.

XX: Jungkook... El jefe... quiere hablar contigo.

Jk: Gracias ya voy - espero me diga de un aumento, penso- Buenas noches señor, ¿quería verme?

XX: Si... ¡Toma! - le extendió un sobre

Jk: ¿ Que es señor?

XX: la gente esta incomoda con tus golpes en el rostro, temen a que los asaltes o les propines un golpe, ve como vienes hoy... asustas a la gente...

Jk: Pero tuve un accidente en la escuela, no puede despedirme señor, es mi último año de carrera y no en cualquier lugar me dan trabajo...

XX: ¿Porque no te lo dan, lo sabes?

Jk: Por falta de... experiencia

XX: ¿Y?...

Jk: Mi... aspecto- susurro -

XX: lo lamento Jungkook eras muy bueno pero... estoy perdiendo gente por el miedo que te tienen...

Jk: Lo siento señor... pero usted sabe que no soy malo...

XX: Yo lo se, pero la gente no, y no voy a decirles tu historia a cada comensal... Retirate y... buena suerte muchacho....

Jungkook hizo una reverencia y se fue a casa, comenzaba a hacer algo de frío, paso a la tienda compro ramen para cenar.

Al llegar intento encender la luz pero no había servicio en el edificio, su habitación era el último piso en la azotea, era mucho más pequeño que los otros, al mirar su refrigerador casi vacío miró su leche de platano a medias, se había echado a perder, los pepinos se aguadaron por el deshielo del refri.

Hoy no habría leche de platano, tampoco agua caliente para un baño, encendió su tetera para el agua, ceno su ramen y durmió la noche que faltaba para un nuevo amanecer.

Sonó su alarma se puso de pie, busco otra ropa igual de desgastada pero al menos estaba limpia. Miro que llego la luz, conecto su refrigerador pero ya no encendió, el impacto de la luz terminó por descomponerlo.

Jk: Hoy... debe ser un día mejor que ayer.

Lavo su cara y retiro el curita de gato, lo miró y sonrio de que aquel bravucón le gustará algo tan tierno.

Camino a la escuela con el frío congelante, los primeros minutos eran crudos pero al paso entró en calor hasta llegar a la escuela, entró a su salón y se acomodo en su lugar.

Tras el Jimin tomo su lugar.

JK:¡ Buenos días!

Jimin lo miro.

JM: ¿Trabajaras para mi?

Jk: ... tengo que aceptar... - dijo cabizbajo

JM: ¿Mm? .. ¿Hoy no me darás un sermón de la vida?

Jk: ¿Que debo hacer?

JM: Ve a mi casa esta tarde, llenaras un contrato... todo quiero que sea legal.

Jk: Solo seré tu guardaespaldas... ¿Que quieres saber de mi?

JM: No quiero que abuses

Jk: El que abusa eres tu... pero tienes razón hagamos ese contrato, no quiero malos entendidos y quiero que quede claro que solo seré tu guardaespaldas escolar, lo que te hagan fuera es tu problema... ah también quiero que se estipule que si tu buscas a esos bravucones no me meteré.

El Yin y el YanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora