S.O.S-PondPhuwin (Pausada)

SOS 9

Phuwin la estaba pasando muy raro en ese lugar. Quería irse de una buena vez, pero su amada cuidadora estaba tan ebria que ni siquiera lo reconocía y pensaba que era un niño pidiendo limosna. Tuvo que volver a su asiento, tratando de terminar el tercer plato de comida que la anfitriona le había dado. 

Al cobo de un rato, se dio cuenta de que Pond le estaba mirando fijamente, con tanta atención que Phuwin pensó si se habría manchado los labios con la mayonesa sin darse cuenta. Simplemente se limitó a ignorarlo, en algún momento se aburriría y se alejaría solo. Tan pronto, como todos terminaron de comer, Phuwin se levantó y al instante se relajó, ya que el diablillo había desaparecido de su vista. 

Su amada cuidadora había sido enviada a casa a descansar, mientras que, a él, se le invito a pasar la noche en la mansión de la familia y poder tomar una taza de té. Phuwin sintió que no podía ser peor su situación y entonces, apareció Louis.  

"Phuwin, Phuwin, No me dijiste que ibas a venir" Al ser llamado de una manera tan tierna, Phuwin no pudo enojarse con su mejor amigo. El chico albino, parecía un conejito asustado, cualquiera se aprovecharía de él. Su voz sin darse cuenta se había vuelto suave y tierna como la de Louis. 

"Oii, ¿Como llegaste aquí, pequeño diablito?"

"Papa, me dijo que viniera en su lugar, pero tengo miedo"

"¿Miedo? Vamos, no es tan malo. El ambiente es algo tenso, pero nada que no puedas manejar. Además, pronto tomaras el cargo de líder de los columnistas, debes aprender a socializar con esta gente" Louis negó con la cabeza como un niño, sacando la lengua con disgusto. "¡Párate derecho y mantén la frente en alto!"

Phuwin casi se mata a si mismo cuando recordó que a Louis no se le debía gritar de esta manera o de lo contrario...

Esos ojos redondos parecían con ganas de llorar y los labios se formaron en un pequeño puchero. Sabía que era lo que iba a pasar después si no detenía a su pequeño amigo. "P-Phuwin, me...gritaste...¡Waaa!"

Phuwin trato de ver a lo lejos un héroe y vaya que lo encontró. Neo estaba charlando con unos amigos animadamente, casi riendo de las cosas descabelladas que decían sus acompañantes. Literalmente, Phuwin agarro a Louis del brazo y lo lanzo hacia Neo, este aterrizo encima de él, por el impacto tan fuerte. 

"Louis ¿Qué demonios crees que haces?" pregunto Neo, aun tirado en el suelo, con la pequeña molestia encima suyo. 

"Y-Yo... Phuwin me... tiro" Pero el mencionado se había escapado hace mucho. 

"Levántate, estoy herido" Louis de un salto se levantó, tratando de secar sus lágrimas. 

"¿De nuevo llorando? ¿Crees que te la vas a pasar llorando todo el día? Se un hombre de una vez deja de comportarte como un niño" Louis se mordió el labio, tratando de calmarse. Su corazon punzaba bastante fuerte. 

"Yo... Yo"

"¿Tu? Deja de tartamudear, ¿okey? No eres un bebe de cinco años, madura" Louis se cubrió las orejas y salió corriendo fuera de la vista de los demás. Neo quiso seguir conversando con sus amigos de forma tranquila, pero malditamente Louis se había ido en ese estado y no sabía lo que podría pasarle. 

"¡Maldita molestia! ¿Por qué siempre soy yo el que va por ti?"

{...}

Pond hecho un vistazo por todo el lugar, buscando a cierta persona que no había logrado notar en un tiempo. Se fijo entonces en el chico que estaba hablando con su madre, lo detallo tan delicadamente que por dentro sintió calambres al pensar hasta qué punto tan bajo había caído. Ese cabello negro sedoso y brillante, las joyas que tenía eran tan acertadas y elegantes, la luz de las velas alumbraba tiernamente sus mejillas. Phuwin era una obra maestra en los ojos de Pond.

¡Maldita sea! Ya estaba pensando nuevamente en el con esos deseos tan impuros. ¡Era una tentación muy peligrosa! Advertido estaba ese hombre que había sido capaz de meterse en su cabeza. ¿No era todo esto un asunto muy peligroso en realidad? Carecía de sentido, pero...

Había iniciado la advertencia de amor.