Yo se que puedo

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Te levantaste con pesadez, por la ventana viste que Tobio salía a correr, te pusiste zapatos cómodos y caminaste hacia el salón del piano, tomaste asiento y te preparaste para tocar

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Te levantaste con pesadez, por la ventana viste que Tobio salía a correr, te pusiste zapatos cómodos y caminaste hacia el salón del piano, tomaste asiento y te preparaste para tocar.

Después de una hora y media de práctica eran las siete de la mañana, te diste un baño y te preparaste para la escuela, el uniforme con medias al muslo negras y un pequeño moño celeste de decoración, una diadema del mismo color y cepillaste tu cabello, saliste de tu habitación para tomar una manzana y comenzar a comer mientras te ponías tus zapatos, a los minutos aparecieron tu hermano y ambos caminaron a la escuela.

Al llegar cada uno fue a su salón, por tu parte te dedicaste a leer un libro de historia hasta que una chica rubia se acercó.

—K-kageyama...¿t-te parece si hacemos en trabajo de ciencias j-juntas? —la pequeña Yachi te pregunto mientras los nervios subían por todo su cuerpo, casi no habían hablado la primera semana de clases y se había quedado sin pareja, su última opción era la fémina frente a ella, era como una deidad para muchos, linda e inteligente, pero silenciosa intentando pasar desapercibida, era conocida en la prefectura por ir a las competencias de piano más importantes e incluso ir un par de veces a tocar al extranjero.

—¿mhj? Claro ―la rubia se relajo al escuchar la pacífica voz de la joven —llámame por mi nombre, porfavor.

—c-claro―asintio la más baja —¿lo trabajamos en la tarde en la biblioteca?

—¿el miércoles? —preguntaste mientras la veias, era el día libre del entrenamiento de loc chicos y podrías ocuparlo en eso.

....

El entrenamiento fue tranquilo, los chicos perfeccionaban algunas cosas mientras con Shimizu preparaban el agua.

—mañana descansas...yo me encargare de ello y el jueves descansaré yo, sabes como hacer las cosas, ¿verdad? —pregunto la de cabello oscuro.

—si, lo tengo todo —respondiste mientras terminabas con un envase y pasabas al otro —el enfrentamiento con el Aoba Josai es cada día más cercano...

—si, los veo muy motivados —mencionó la chica mientras los chicos terminaban con algunas planchas —vamos.

Ambas les comenzaron a entregar las toallas y botellas de agua a los chicos, Yamaguchi te la resivio con una sonrisa y agradeciendote, por otra parte al entregársela a Tsukishima el simplemente las tomó, por eso al entregarle el agua precionaste levemente la botella para que mojara parte de si camisa.

—ups... —y sin más caminaste hacía Shoyo y Tobio para entregarles a ellos también.

—pero si seras... —el chico soltó el aire de sus pulmones y se giro para ver a Yamaguchi reír suavemente.

—e visto que bajan más la cadera y el movimiento del pie —le mencionaste al chico de pecas, te pregunto si sabías algo de voleibol y en ese momento le estabas comentando lo que te explico tu abuelo sobre las recepciones, el chico hizo el movimiento y la pelota se elevo un poco más de lo común —¡muy bien Yamaguchi!

—¡gracias! —el chico te agradeció mientras le entregabas una toalla.

—ahora me dirás que sabes jugar —la voz del rubio hizo que voltearas, el chico estaba vendado sus dedos mientras se acercaba con pazos perezosos.

—mmm...no se jugar —afirmaste con seguridad —pero toda mi vida estuve rodeada de personas que lo hacen, así que se algunas cosas y la técnica.

—asombroso —hablo Yamaguchi para intentar aligerar el ambiente.

—gracias, me tengo que ir con Shimizu, los veo luego —sin más caminaste hacía la pequeña bodega.

....

—nos vemos luego Yachi —te despediste de la rubia mientras ambas se dirijan a distintas direcciones, por tu parte caminaste a la tienda, donde Ukai solo te vio entrar y como tomabas algunas cosas, mientras tomabas algunas cajas de leche para Tobio, la campana de la entrada sonó, por ahí entro el chico rubio, mientras el tomaba una botella de agua caminaste a la caja —buenas tarde.

―ten ________—te entrego una bolsa con tu compra y luego paso el rubio —eh~ Tsukishima, esta oscureciendo, acompañala a casa.

—¿q-que? —pregunto más para el que para Ukai —¿y tu hermano?

—Kageyama salió corriendo junto a Hinata —mencionó el mayor —vamos niño, se un caballero y acompañala.

—tsk...vamos —quito la bolsa de tu mano y comenzó a caminar a la salida, en ningún momento dijiste algo, te tomo por sorpresa lo mencionado por lo mayor, por otra parte de de sudadera naranja sonrió por lo bajo.

—no hace falta que lo hagas —hablaste cuando salieron de la tienda.

—mejor camina rápido, ¿si?—siguio caminado mientras, dabas un pequeño trote para poder alcanzarlo, la caminata inicial fue un poco incomoda hasta que doblaron en una calle que comenzaba a guiarlos hasta tu calle —Kageyama.

—_____, porfavor... —hablaste mientras lo volteabas a ver.

―esta bien...—murmuro mientras se acomodaba los lentes —¿porque te esfuerzas tanto?

—mmm...una promesa a alguien que amo —hablaste con tranquila —se que con mi esfuerzo puedo conseguir muchas cosas.

—¿que ganas con tanto esfuerzo? —pregunto con una ligera mueca de disgusto.

—un futuro...el bien de mi familia, ¿porque no esforzarse? —preguntaste ahora hacia el.

—ponen demasiado esfuerzo en algo tan trivial...

—yo creía lo mismo, no tengo condicion fisica y aunque mi abuelo fuera entrenador nunca supe jugar...pero luego conocí el piano y cuando gane mi primer certamen...no pude ser más feliz al ver a mis padres contentos por mi...

—¿entonces lo hacer por ellos o por ti? —te quedaste en silencio mientras arrugabas levemente tu ceño.

—yo...creo que llegamos —cortaste la charla rápidamente mientras te detenias frente a tu hogar —gracias por acompañarme...

El chico te entrego la bolsa que te ayudo a cargar y la tomaste con cuidado.

—no eres tan odioso como pensé —dijiste mientras le entendías la mano —se que Tobio te irrita, pero...¿amigos?

—mmm...tampoco eres tan irritante y molesta como creí...esta bien —tomó tu mano y la estrecho —solo procura que el engendro que tienes por hermano no sea tan fastidioso.

—ugh...llevo quince años intentándolo —bromeaste levemente.

Sin más se volteo con una sonrisa burlona y comenzó a caminar, entraste a tu hogar y ahí se encontraba el azabache.

—¿y ese?

—me acompaño ya que alguien me dejo por una carrera...

—¡le tenía que ganar a Hinata!

—¿mínimo le ganaste?

—mmm... —murmuro algo por lo bajo molesto y reíste por eso subiendo a tu habitación.

 —murmuro algo por lo bajo molesto y reíste por eso subiendo a tu habitación

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ⓢⓗⓐⓡⓔⓓ ⓟⓐⓘⓝ ( Kai Tsukishima y Tu )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora