Capítulo 15

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Puedo aspirar el fresco aroma de las flores, estoy tirada en medio del campo repleto de flores silvestres de todos los colores. Tengo los ojos cerrados y puedo sentir que los mismos pétalos de las flores me hacen cosquillas en la punta de la nariz.
Se siente tanta calma y paz, este sitio seria perfecto para vivir, en especial si quieres alejarte de toda la civilización, aunque para ser sincera no tengo la menor idea de donde estoy, pero no me importa.

- Rey... - la voz de una mujer me llama, aunque es mas como un susurro.
Lo ignoro

- Rey... - esa misma voz llamándome, solo que esta vez fue un poco mas fuerte. Levanto la cabeza entre tantas flores, volteo para todos los lados pero no logro distinguir nada - Rey... - el susurro comienza a hacerse aun mas fuerte, me levanto y a lo lejos se puede disimular la silueta de una mujer vestida de blanco.
Camino hacia ella, aunque no se quien es.

-Rey...

Estos a escasos metros de ella, mi corazón comienza a latir muy fuerte. Una tristeza combinada con una felicidad infinita, llena mis ojos de lágrimas y antes de darme cuenta, las lágrimas comienzan a resbalar por mis mejillas.

- M-mama? - preguntó incrédula y aun llorando, ella me sonríe con esa sonrisa que recuerdo.
Sin pensarlo dos veces, corro hacia ella, entre las flores silvestres.
No me detengo, y por primera vez siento que mi cuerpo rechaza el cansancio. Pero algo comienza a salir mal, mientras mas corro, y mas convencida estoy de que voy a llegar hacia ella, parece que ella se aleja de mi cada vez mas, y mas. Ella también se da cuenta, y su rostro cambia repentinamente.

- Mama!! - comienzo a gritar - Mama!!- extiendo la mano, y ella también extiende la suya pero por mas que quiera llegar hacia ella, mas me quedo atrás.
Su silueta comienza a desaparecer poco a poco, hasta que solo puedo ver a alguien vestido de blanco.

- No! - caigo entre las flores y solo la veo alejarse cada vez mas y mas
- Noo!!
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Siento que alguien me toma por lo hambros y me mueve hacia los lados.

- Rey! Rey! Rey!! - la voz chillona de Maya hace que abra los ojos de golpe - Despiertaaa!!

- Aggg Maya - le digo algo molesta quintandome sus mandos de mis hombros - Ya desperté.

- Bien - se levanta de la cama y camina hacia el espejo, se aplica brillo en los labios, y puedo notar que ya esta vestida, chaqueta color caqui, una blusa negra, pantalones azul marino muy ajustados y unas botas negras de tacón - Vistete Rey, ya vamos tarde - me dice poniéndose rímel.

- Mmm, Que? - yo aun sigo un poco dormida.

- Que ya vamos tarde para ir a la escuela.

- Escuela? - le digo frotándome los ojos

- Si, la escuela, el reclusorio al que van todos los niños, adolescentes e incluso los adultos, ha morir lenta y dolorosamente, durante siete horas diarias.

- Oh si...la escuela - aun intento despertarme, pero parece una tarea bastante difícil - Maya, no creo que pueda ir, aun me duele todo mi cuerpo - le miento, poniendo cara de dolor.

- Que graciosa.... Levantate

- Maya, encerio no creo poder ir a la escuela hoy - subo el cobertor rosa hasta taparme la cabeza.

- Eso seria una muy buena idea Rey, pero ya faltaste ayer a clases, no puedes faltar otro día... Esto no es la secundaria, en donde puedes faltar y no ocurrirá nada.

- Si tienes razón, pero deberán entender que estoy incapacitada ya que mi padre me hagarro a golpes.

- Rey! - tira de un jalón el cobertor, y solo me quedo shorts - Ya basta, estoy segura de que ya estas mejor, y si no es así entonces has un intento.

- Lo intento, aunque hacerlo es algo... dificil.

- Rey, deja de ser una mártir, ayer estuviste casi todo el día en cama y parte del día, metida en la bañera.

- No soy una mártir Maya... Solo dame una media hora mas, por favor - le digo mientras jalo el cobertor para poder cobijarme.

- No - ella vuelve a tirar del cobertor.

- Maya - vuelvo a tomar del cobertor y jalo de nuevo hasta quedar cobijada.

- Rey - ella vuelve a tirar del cobertor y yo suelto un grito de rabia.

- Haaa!! Maya! Dejame en paz - jalo una ultima vez, hasta quedar cobijada solo de la cintura para abajo. Ella se queda parada cruzada de brazos mientras se me queda viendo, por un momento pienso que ya seguirá insistiendo, se da la media vuelta y va directo al armario, solo escuchó que abre cajones y quita ganchos del tuvo del armario, mientras que yo aun sigo con los ojos cerrados.

- Vistete - me quita ( de nuevo) el cobertor de un jalón y me habienta una blusa y un pantalón, que se estrellan contra mi cara.

Suspiro cansada y furiosamente.

- Carajo!!! - grito muy molesta.

- Gracias yo también te quiero - escuchó a Maya desde la cocina - A por cierto, no seria mala idea que le llamaras a Erick, te ha estado mandando mensajes y llamándote toda la noche, solo que no te diste cuenta ya que dormiste en todo el día y la noche.

Decido aceptar la oferta de Maya y decido llamar a Erick, tal vez si actúe como una idiota con el anoche, no era para tanto y además él no tuvo la culpa de nada. Tomo mi teléfono y marcó el numero de Erick, pero inmediatamente suena el buzón de voz, tal vez aun siga dormido, o este enojado con migo por aver haber sido tan grosera con el, así que decido mandarle un mensaje de texto.

* Hola Erick amm... Bueno, quería saber si podríamos vernos para poder hablar de lo que ocurrió anoche.
Llamame

Me quedo sentada en la orilla de la cama, sosteniendo aun mi teléfono en la mano e inmediatamente recibo un mensaje de texto.... Ohh espero que sea Erick.
Abro el mensaje de texto y como esperaba era de Erick.

* Te veo en el parque Wycare.

Salto de la cama y corro al baño para darme un baño.

- Si mejor date un baño, hueles asqueroso - escuchó la voz de Maya por detrás de la puerta del baño.

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⏰ Última actualización: Dec 20, 2015 ⏰

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