Txe'lan ♡ Neteyam Sully

Mune

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— ¡Te tengo! — grito Lo'ak en mi dirección

— ¡Ahhhhh! — grite en pánico lista para correr, viendo mis manos torpemente ocupadas —¡Esperen! —

— ¡No te escaparas! ¡Rodéala! — grito Neteyam parando mis planes y tirándome al suelo, sin siquiera dejar que pusiera a salvo las piedras que recolecte con tranquilidad. Lo'ak y Kiri se unieron con unas gigantes sonrisas para machacarme, sin embargo, ocasiono que soltáramos unas grandes risotadas que hasta pudieron escucharse en el Clan.

— ¡Pesan demasiado! — grite inútilmente tratando de sacármelos de encima, sacando mis colmillos en advertencia, que fue respondido por Neteyam de igual forma (era en forma de juego). Le di las gracias a Eywa cuando mi sufrimiento acabo, se enderezaron con risas y me ayudaron a pararme, me sacudí la tierra pensando que no duraba presentable ni dos horas completas. Me incline para recoger mis cosas, ellos me ayudaron sin callarse la boca, chiste tras chiste, sacándome risas de forma inconsciente — ¿Qué sucede? — les pregunte una vez acabamos

—Fuimos a buscarte y tu mamá nos mencionó que estabas aquí— dijo Kiri observando cuidadosamente

— ¿Para qué quieres esto? — cuestiono Lo'ak ubicando una piedra frente a su cara

—Para darte en esa cabezota— dije arrugando mi nariz

—Ey— dijo Neteyam en nuestra dirección, advirtiéndonos; a Lo'ak le encantaba sacarme de quicio con preguntas estúpidas «¿Cómo que para que las quería? Era obvio que eran para hacerles regalos» o si realmente preguntaba por qué, me dejaba muy en claro que no tenía muchas sinapsis cerebrales. Me las entregaron para depositarlas en una bolsa tejida, el cordón cruzando mi estómago.

—Pero pudiste hacerlo más tarde— dijo Lo'ak

— ¡Se nos hace tarde! — grito Kiri

— ¡Vamos! — grito Neteyam

Era el momento de cada joven para empezar a tomar el camino que deseaban tomar en la aldea, podías ser grande como guerrera / cazadora, o un rango menor como recolectora en aire o tierra; para algunos de mis amigos ya tenían definido su papel en nuestro clan, en primer lugar teníamos a la futura Tsahik que se trataba de Kiri, aunque su abuela Mo'at fuera su puesto en el presente debía aprender a serlo para un futuro.

Y por otro lado estaba Neteyam, primogénito, siendo desde su nacimiento el heredero del título a futuro Olo'eyktan, una carga demasiado pesada para sus hombros a tan corta edad.

Yo no tenía que preocuparme por esas cosas, mi persona era normal y común a pesar de juntarme con la realeza, y esa era una de las tantas razones porque mi madre me exigía casi con amenazas a comportarme bien, siempre recordándome mi lugar inferior. Si por ella fuera nunca estaría jugando cómodamente entre ellos, la primera vez fue cuando éramos muy chicos, hablando con ese entonces los mayores que eran Neteyam y Kiri; ahí mi madre casi le da un ataque al corazón, trato de separarme de ellos a cualquier costa (aunque simplemente tuviera 6 años y no entendiera de él porqué de su drama) Jake y Neytiri la tranquilizaron, permitiéndome divertirme con ellos, después le dimos la bienvenida al pequeño Lo'ak y con eso fue suficiente para pasarlo al lado de las travesuras.

— ¿Y Tuk? — cuestione curiosa en su dirección, era más pequeña que nosotros, apenas aprendiendo a caminar; pero me gustaba saber de su estado.

—Con mamá— respondió Lo'ak, me recargue en su costado, pasando mi brazo por sus hombros para darle una sonrisa socarrona

—Owww, el pobrecito Lo'ak— dije, este trato de callarme con su mano sabiendo mis intenciones — Ya no es el mimado y pequeño del hogar— escuchando de fondo las risas de los demás

—Cállate— dijo con una expresión de molestia, empujándome para que lo soltara —Molesta— dijo soltando sin querer una risa, nos callamos cuando llegamos al lugar, cada uno en su pensamiento.

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