Capítulo 41: Pensé... que... moriría...

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(Nota: Este capítulo contiene algo de LayXiu pero principalmente SuKai y ChenHun)
Noviembre 28. Cerca de media noche.

"Súbele hyung"

Chen aumentó en un nivel más la velocidad del cobrizo vibrador del menor. - "¿Así? si sientes que ya es demasiado estímulo le bajamos" - Chen quería activarle la próstata para que estuviera un poco más sensible al momento de la penetración, pero no quería llegar a sobreestimularlo y generarle dolor o roce, porque hasta ahí les llegaría la diversión...

"Si, mmmh, así..."

Chen retomó el abrazo acostándose a su costado, lo besó dulcemente mientras acariciaba la espalda del mayor y le 'echaba' la pierna sobre la cadera, para acercar ambas pelvis y poder realizar movimientos suaves que estimularan ambas pollas. Era un movimiento suave pero muy satisfactorio, que los iba preparando poco a poco: Chen necesitaba calmarse y a la vez necesitaba encender de nuevo los motores del menor. (1)

Varios minutos después SeHun se sentía tan agusto en los brazos de Chen y estaba disfrutando tanto de las caricias que le daba por toda la espalda, que decidió enredar su pierna en la cadera de Chen para acercarlos aún más y luego estirar mejor el cuello para que se lo continuará lamiendo y besando a gusto. SeHun le acariciaba el cuello a JongDae mientras las vibraciones en su trasero sumadas a las caricias del mayor, comenzaban a calentarlo y estimularlo lo suficiente para que su polla tomara volumen de nuevo. (2)

"Eres tan sensible de la espalda, te derrites con cada caricia"

SeHun llevó una mano al trasero de Chen, recibiendo el correspondiente jadeo sobre la piel de su cuello. - "No soy la única persona con una debilidad tan marcada..."

"Jejejeje es verdad hermoso, ¿Estás listo?" - Chen no quería presionarlo pero... a la vez si quería presionarlo... dentro de él.

"Eres tan amable, me siento como si fuera una porcelana contigo"

"Es lo menos que puedo hacer cuando me vas a permitir disfrutar en un lugar tan importante"

SeHun sonrió y sus ojitos se pusieron en forma de medias lunas, curiosamente no había vergüenza en su sonrisa, Chen siempre era directo pero gentil cuando hablaba. Como la penetración anal era un poco incómoda y dificil en esa posición de costado y cara a cara, SeHun se acomodó boca arriba, levantó una pierna y dejó que su hyung, aún a su costado, enredara su muslo debajo de esa pierna para penetrarlo de lado. La posición era igualmente dulce y muy íntima, SeHun podía continuar acariciando el cuello cabelludo de JongDae mientras este lo penetraba lentamente, le seguía besando el cuello, y le acariciaba el pectoral y los muslos. Se sentía delicioso... Y como ninguno tenía afán, estaban armando poco a poco un ritmo apasionado que al final sería tan potente, como para dejarlos fuera de juego por un buen rato. (3)

"Tienes un trasero exquisito Hunnie..." - A pesar de llevar las cosas con calma, la polla de Chen le estaba exigiendo más velocidad y más profundidad, por lo que sin darse cuenta ya estaban ambos agitados y gruñendo, SeHun bajito aunque él no tanto.

"El tuyo... es otra... exquisitez... mmm sí... en ese... punto... mmmh"

Sus piernas ya estaban enredadas como en formas de tijeras mientras sus miradas estaban conectadas por un embrujo, no podían dejar de verse, ni podían dejar de tocarse y de mecer sus caderas para aumentar la fuerza de cada choque. Todo lo que veían era tan hermoso que disfrutaron de ese momento por un par de minutos más antes de dejarse llevar al borde. (4)

Cuando JongDae se sintió cerca giró a Sehun dejándolo debajo de él para tomarlo en posición de perrito. Controlando la velocidad en que lo penetraba y apuntando en cada estocada a ese punto que le había indicado Hunnie, le agarró la polla y se la pajeó hasta que lo sintió temblar y venirse en su mano, para luego verlo desplomar su rostro sobre la cama. Sosteniéndole la cadera firmemente en alto, solo entonces, se abandonó a sí mismo y a su cadera a ese ritmo rápido y de estocadas cortas que lo llevó rápidamente a perder el aliento y llegar explosivamente al orgasmo. (5)

NO ES POR CASUALIDAD - 2015 - EXODonde viven las historias. Descúbrelo ahora