Theo y Liam se conocen en circunstancias extrañas, pero con el tiempo descubrirán que tienen mucho más en común de lo que creen.
- Esta historia contiene #mpreg (embarazo masculino), si no te gusta, ¡no la leas!
Majestuoso de principio a fin, no se...
El resto de la semana transcurrió sin incidentes. Liam había completado las 28 semanas de gestación. Aun le costaba creer que ya habian pasado 7 salvajes meses cargando un hermoso bebe, fue y es muy dificil, pero no cambiara nada de lo que a vivido en estos meses. A veces tenía cambios en la presión arterial, náuseas y mareos inoportunos, pero siempre estaba en contacto con su madre y su médico si era necesario. Además, todavía estaba Nolan, que siempre estaba cerca a la hora de la escuela.
Liam, 28 semanas de gestación (7 meses de embarazo)
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Theo, por otro lado, terminó quedándose en casa el resto de la semana, hizo una maleta y se las arregló para irse de la ciudad durante el fin de semana. Entre ellos no hubo más contacto, Theo prefirió darle a Liam un poco de distancia para que el chico pudiera organizar sus pensamientos y decidir qué le gustaría hacer, por muchos momentos pensó en enviar un mensaje, pero solo se pondría en contacto con Liam, cuando tuviera el resultado del examen, y luego podrían decidir qué hacer en función del resultado. Liam también mantuvo la distancia, dándole a Theo todo el tiempo que le hubiera gustado, aunque durante muchas noches tomó el teléfono y marcó el número del hombre mayor, pero no completó la llamada, recordando que había sido decisión de Theo que los dos se mantengan alejados un tiempo.
Además de toda la situación con Theo, Liam todavía se ocupaba de Garrett. Había pensado en lo que Theo había dicho sobre el interés del chico, y podía ver que estaba tratando de acercarse, pero aún necesitaban hablar por el trabajo y Liam no podía ver qué estaba mal en eso, era importante. El trabajo debía entregarse en dos semanas y por eso él y Garrett se mantenían en contacto con más frecuencia, pero una vez que terminaba, solo serían compañeros de clase.
A pesar de que no se veían ni se contactaban, Liam y Theo preguntaban a sus amigos cómo les estaba yendo. Liam sabía que Theo se iba, estaba triste por la noticia, pero sabía que a pesar de que ambos estaban en la misma ciudad, tal vez ni siquiera se verian. Y Theo sabía cómo estaba Liam, cómo estaba el bebé, preocupado a diario por las noticias de mareos y mareos que recibía, pero siempre hablaba con Jenna cuando sabía que Liam no estaba en casa para poder averiguarlo todo.
Y el sábado por la mañana Theo partió hacia la capital para pasar unos días con su hermana, necesitaba tiempo para pensar y también para olvidar. Se despertó temprano, apagó el gas y los enchufes eléctricos del apartamento y bajó al garaje. Se subió a su camioneta, encendió el estéreo y respiró hondo para iniciar un viaje de unas horas.
Al otro lado de la ciudad, Liam prefería dormir hasta tarde, la semana había estado llena de actividades y se había sentido bastante cansado el viernes por la noche cuando llegó a casa, por lo que usaría el sábado para dormir hasta tarde.
[...]
A media tarde Theo llegó a Sacramento, Tara ya lo estaba esperando cuando llamó al intercomunicador de su apartamento, y cuando se encontraron en la puerta, su hermana lo abrazó.
