WINTERBERRY: I BLOOM IN HOPE ▬ vkook

O13

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Sus dedos y pies se vuelven conscientes primero, seguidos por su sentido del olfato. El aroma de su alfa impregna toda la habitación y profundamente dentro de las mantas y almohadas que lo rodean, manteniéndolo a flote.

Luego sus brazos, que palmea alrededor del colchón, y cuando se da cuenta de que Taehyung no está allí, su estado de ánimo se desploma tan violentamente que trata de volverse a dormir. Excepto que escucha pasos familiares en otras partes de la cabaña, y eso lo hace parpadear y abrir los ojos nublados.

Las cabañas de calor están casi vacías, consisten en un gran espacio abierto que tiene una cama, un sofá, un juego de mesa de comedor, una pequeña cocina en una esquina y una puerta a un pequeño baño en otra. Taehyung está de pie junto a la encimera de la cocina mirando a través de los gabinetes. Hay un par de bandejas de comida frente a él, aunque Jungkook no puede ver qué es desde su ángulo.

Mientras Taehyung continúa dando vueltas, ubicando con calma los platos y los cubiertos, Jungkook se pregunta si así sería estar emparejados. Despertar el uno con el otro -sin embargo, hubiera sido mejor que Taehyung despertara a su lado- y desayunar juntos todos los días, con Jungkook cocinando ya que Taehyung no puede, pero conociéndolo, probablemente insistiría en lavar los platos a cambio.

La enorme cantidad de esperanza y amor que se hincha en su pecho son demasiado para que Jungkook las contenga, y pronto gruñe:—Hyungie.—Taehyung gira de donde estaba poniendo los platos en la mesa, las comisuras de su boca se curvan hacia arriba.

—Jungkook-ah. Estaba a punto de despertarte.—su voz matutina es incluso más profunda que la normal, menos suave, más ronca. Jungkook esconde su rostro detrás de su manta, solo dejando que sus ojos se asomen. Observa a Taehyung buscar una taza de agua antes de cruzar la habitación y dejarse caer en el suelo junto a la cama.

Coloca una cálida palma en la frente de Jungkook, tarareando.—Creo que tu fiebre se ha ido. Toma, bebe esto.—un brazo alrededor de la espalda de Jungkook lo ayuda a sentarse y traga la mayor parte del agua de una vez.

—Gracias, hyungie.—dice, secándose la boca.

Taehyung acaricia su mejilla.—¿Quieres desayunar? Jin-hyung trajo algo de comida antes. Y cuatro huevos crudos, no sé por qué. Intenté freírlos pero están un poco quemados.

—¿Cocinaste para mí?—Jungkook jadea, pero Taehyung arruga la nariz.

—Realmente no lo llamaría cocinar...no te hagas ilusiones.

—¡Está bien!—Jungkook chilla, saltando de su nido.—¡Me gustan mis huevos un poco quemados de todos modos!

Es empujado a una de las sillas mientras Taehyung se sienta frente a él, y Jungkook inmediatamente sujeta una de las piernas de Taehyung entre sus pantorrillas, sonriéndole. El mayor le lanza una mirada irónica e indulgente y le dice que coma.

Jin les trajo bandejas llenas para ambos, una tostada junto con salchichas, papas, una taza de leche y un tazón de fruta para cada uno. Los huevos están en platos separados. Jungkook se da cuenta de que el aspecto del de Taehyung es considerablemente más carbonizado, mientras que el de Jungkook tiene parches de color marrón dorado en algunas partes, pero los bordes negros fueron cortados limpiamente. Su tostada tiene mantequilla de maní untada en una mitad y mermelada de fresa en la otra, tal como a él le gusta. Es una capa más gruesa de lo que suele hacer, un poco desordenada también, con algunas esquinas del pan notoriamente vacías, pero a Jungkook no le importa. No le importa en absoluto. Está tan conmovido, pero no puede permitirse llorar por una tostada.

—Taehyungie.—lloriquea. Taehyung se ve un poco alarmado mientras se levanta y rodea la mesa, aunque lo atrapa instintivamente cuando Jungkook cae en sus brazos.—E-eres tan bueno conmigo.