WINTERBERRY: I BLOOM IN HOPE ▬ vkook

O18

capítulo final! 

୨୧

—Heey, Jungkookie.

Jungkook levanta la vista desde donde está escurriendo su toalla mojada en el lavabo.—¡Oh! Hola, Hoseok-hyung. ¿Cómo estás?

—Bien, bien, gracias.—Hoseok hace un gesto hacia la silla al lado de la de Jungkook, la que pertenece extraoficialmente a Jimin con la frecuencia con la que viene.—¿Te importa si tomo asiento?

—Por favor.

Hoseok se sienta, con menos energía de lo habitual, haciendo una mueca cuando choca su brazo.—Entonces, ¿cómo está la bella durmiente?

—Um...—Jungkook mira hacia Taehyung, cuyo rostro todavía es de un color gris enfermo, sus labios también pálidos. Pero al menos sus heridas ya no brotan sangre, y cualquier infección a su alrededor se ha calmado después de un día de aplicar religiosamente lo que Moonbyul ha llegado a llamar "la pasta de Jungkook".—Cre-creo que está mejorando.—dice, doblando la toalla húmeda en un cuadrado y limpiando el sudor en la frente de Taehyung.

—Eso es bueno. No has estado en ninguna de las reuniones de la manada.

Jungkook frunce el ceño, sintiéndose mal por perdérselas.—L-lo siento, no quería dejarlo.

—No te disculpes, tonto.—ríe Hoseok.—Si yo fuera tú, haría lo mismo. Supongo que probablemente ya hayas escuchado todo de Jiminie, ¿no?

Asiente. Tan aislado como estaba Jungkook en el clan Jeon, incluso ha oído hablar de Lee Sooman antes, el alborotador que se convirtió en una amenaza real una vez que ganó seguidores, lo que hizo que lo expulsaran del clan Lee. Él y sus secuaces terminaron como uno de esos cultos, les lavaron el cerebro para pensar que el "sistema" estaba manipulado y destruyeron cualquier clan que se interpusiera en el camino de su dominación.

Pero al final, no pudieron defenderse de las armas. Y Hoseok y Yoongi, quienes supuestamente acabaron con la mitad de ellos solos.

Jungkook escuchó de Jimin, quien escuchó de Yoongi, que Taehyung tenía sus propios momentos difíciles. Como lobo de la línea de sangre real, por muy alejado que esté, todavía estaba recién apareado y prosperaba en un clan rico en tierras y, por lo tanto, representaba todo lo que odiaban. Fueron tras él con ganas de vengarse. Un momento de vulnerabilidad era todo lo que necesitaban, pero pudo ganar suficiente tiempo para que Yoongi rompiera sus defensas, y el resto fue esencialmente limpieza. Lee Sooman está muerto ahora, cortesía de su ego inflado. Y también todos los Min en la lista de asesinatos de Yoongi.

Es un bonito final feliz, un resultado mucho mejor de lo que Namjoon admitió que esperaba. Jungkook se siente aliviado de que sus seres queridos están a salvo.

Si tan solo Taehyung se despertara.

—Hey, escuché que la cena de esta noche será estofado y daifuku de fresa.—dice Hoseok, poniéndose de pie.—¿Quieres que te traiga un poco? No te vi en el almuerzo, no comiste, ¿verdad?

—No lo hice.—Jungkook baja la cabeza ante la mirada de Hoseok.—Está bien, iré a traerme más tarde. Tú-

—¡Nop!—Hoseok ríe.—Está bien, tengo brazos fuertes, amigo. O brazo, debería decir.—agita el sano hacia Jungkook, quien sonríe.—Le prometí a Taehyungie que cuidaría de ti si pasaba algo, así que voy a hacer precisamente eso. O se enojará conmigo cuando despierte.—con una palmada amistosa en el hombro de Jungkook, se aleja.

Jungkook gira hacia Taehyung nuevamente, tomando una de sus manos entre las suyas. Las mejillas del alfa están hundidas, las sombras bajo sus ojos son profundas. Su olor es tenue.