۵A name fit for a king.
Daemon Targaryen x fem!reader.
Autor: Ophelieverse
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La tierra despierta lentamente, todo a su alrededor está en silencio, el melodioso canto de los pájaros a través del cristal de la ventana y el dulce romper de las olas en la orilla eran la canción de cuna más hermosa.
El sol se elevaba sobre el horizonte, brillando con sus rayos dorados sobre Dragon Stone, que aún disfrutaba de su sueño pacífico. Sería un hermoso día, sin nubes a la vista, el cielo más azul que nunca y una calidez reconfortante tocando cada criatura viviente en la pequeña isla.
Un hermoso comienzo para un esperado largo verano, el que T/n deseaba. Después de varios meses de invierno, llegó el momento de que el clima frío y oscuro se retirara y dejara su lugar a la estación del eterno sol y desarrollo.
Una delicada luz dorada brillaba sobre su piel, inmaculada y suave, donde él estaba trazando líneas con sus dedos, casi demasiado puras para corromperse. T/n todavía estaba dormida, su mejilla presionada contra la almohada blanca y una expresión pacífica en su hermoso rostro. .
Su marido se acostó a su lado como todas las mañanas, los dioses se apiadaran de cualquiera que intente ocupar su lugar y robarle aquello por lo que suplicó de rodillas. Daemon recordó el día en que él y T/n volvieron a estar juntos, mano en la mano, después de ganar la guerra en los Peldaños de Piedra, y cómo después, la misma noche, fue a las cámaras de su hermano.
"Dijiste que podía tener todo lo que quisiera cuando te di mi corona." Le dijo al Rey. "Quiero a T/n, casarla conmigo." Entonces sus rodillas tocaron el frío suelo de piedra, una mirada pura de amor y la devoción en sus ojos era lo suficientemente poderosa como para que su deseo se hiciera realidad.
Los orbes púrpuras examinaron su rostro angelical, memorizando y mapeando cada centímetro de su piel como siempre lo hacían. Por la forma en que sus suaves labios rosados estaban ligeramente separados, su sedoso cabello plateado, los hilos de luz de la luna se extendían sobre su almohada y sus párpados cerrados.
Una vista tan hermosa y fascinante debería estar prohibida para un hombre como él, pero aquí estaba ella, acostada de lado tratando de recuperar algo de energía. Ella necesitaba eso, más que nadie en este momento. La suave textura de su piel, y aterrizando en el creciente vientre escondido debajo de su camisón.
Afortunadamente este embarazo había sido mucho más fácil que el anterior, el que les dio dos hermosas hijas, gemelas, Aemma, llamada así por la madre de T/n, y Alyssa, llamada así por la de Daemon. Esta vez, T/n tuvo suficiente fuerza para ser capaz de montar su dragón y no pasar todo su tiempo acostada en la cama.
Suavemente, el rostro de Daemon desapareció en el cálido cuello de su esposa, los labios besaron fantasmalmente la tierna piel en un intento de despertarla. Un gemido silencioso, similar a un ligero suspiro, dejó el fondo de su garganta, una pequeña sonrisa ahora estaba presente en su rostro mientras ella inclinó su cabeza para darle más acceso para continuar.
"Buenos días, mi pequeña tormenta."la saludó, los labios aún sobre la carne sensible de su cuello, sus brazos envueltos alrededor de su cintura acercándola a él mientras sus manos se dirigían a su estómago de nuevo.
"Buenos días, mi amor". La voz de T/n todavía estaba soñolienta, sus ojos se estaban adaptando a la luz de la habitación, tratando de asimilar tanto como pudiera de los hermosos rasgos de su esposo.
El cabello rubio pálido de Daemon le hizo cosquillas en la mejilla y su cálido aliento sobre su piel le puso la piel de gallina. El apodo, "Pequeña tormenta", la forma en que solía llamarla cuando era pequeña debido a su comportamiento impetuoso, la hizo reír mientras comenzaba. para jugar con su pelo.