Especial año nuevo

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Antes que nada me gustaría agradecer todos los comentarios, la mayoría son bastante graciosos, y cualquier duda que tengan la responderé con gusto.

Y comenzando con el especial, les deseo un buen inicio de año 💕
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12 besos, 12 deseos

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Neteyam caminaba al hogar de sus padres y hermana menor, que es el mismo desde que llegaron al arrecife de los metkayina hace aproximadamente nueve años. Y no es que viva lejos de su familia, pero desde que se comprometió con el primogénito de la señora Ronal y señor Tonowari, vivía con él en una "casa" más privada para ambos.

Y eso sucedió sólo hasta que su padre Jake y su hermano Lo'ak aceptaron por completo a Aonung como su pareja, pues realmente no les parecía alguien indicado para su hermano mayor. Aunque en parte, Lo'ak lo aceptaba ya que empezaba a tener una relación con su hermana, aún recuerda como cuando Aonung se entero salió en busca de Lo'ak con el pretexto de que era su momento de devolverle el trato.

— Hijo, que bueno que vienes, estaba por ir por ti ¿vienes con Aonung?

— No, Aonung aún se encuentra haciendo sus tareas, ya sabes... cosas de su cargo, vendrá en un rato

Neteyam se limito a sonreír después de eso, Aonung había renunciado a su puesto como sucesor de su padre y se lo serio a Lo'ak un poco antes de casarse con su hermana Tsireya. Aquello fue aceptado con el tiempo, Neteyam pensaba al comienzo que no debía, pero Aonung le dio sus razones y le quedó apoyarlo.

— Hermanito~ ¿cómo van?

— Bien, Tuk ¿quieres ir a dar la vuelta? Así ponen a Lo'ak y Kiri a poner la comida al centro

Dijo en un susurro, su hermana simplemente río y asintió, ambos saliendo de la tienda y lleno a las orillas del mar, donde Tuk brindaba alegremente, importando poco lo lento que iba su hermano a tan solo unos pasos detrás de ella.

— ¡Neteyam!

El nombrado giró levemente su cabeza y sonrió ampliamente al ver al dueño de la voz, saludo con una mano y la otra la poso sobre su abdomen mientras se paraba un poco de puntas, pues Aonung venía sobre el mar montando su iluk. Una vez este llegó más a la orilla, desconecto su trenza y camino hasta su ahora esposo, quien casi brinco sobre él para abrazarlo.

— Neteyam... ya hablamos de que debes ser cuidadoso, no quiero que les pase algo

Murmuró mientras posaba sus manos sobre el abdomen ligeramente abultado de Neteyam, después beso por unos segundos los labios del contrario.

— Ustedes son tan lindos, no como Tsireya y Lo'ak, son lindos también, pero Tsireya parece que líder con un niño, ya saben como es Lo'ak

Soltó con burla, todos sabían que era llanera en que Lo'ak le gustaba sacar de sus casillas a su bella esposa, saben que nada es tan extremo como se escucha. Aunque la pareja se miró cómplice, pues entre ellos sabían que Aonung era el que más se metía en líos, siendo Neteyam quien lo salvaba, pero no le decía mucho y se limitaba a dejar un beso en su mejilla.

Quizás Aonung finge estar en "problemas" para que sea Neteyam quien lo libre y finalmente obtenga un dulce y amoroso beso de su esposo.

— ¡Niños! ¡Está la cena!

Cuando escucharon aquel llamado, Tuk salió corriendo a la casa, Aonung se poso detrás de Neteyam para abrazarlo por la cadera y mientras este posaba sus manos sobre las de Aonung, empezaron su recorrido a la casa de los Sully, donde se reunían ya las dos familias.

— Oh, señores Ronal, Tonowari... es bueno verlos aquí

Soltó Neteyam con una sonrisa en su rostro, viendo ya a todos reunidos en la cena en la tienda de sus padres. Y un pequeño de 9 años junto a los dos mencionados, pues era su hijo.

— Neteyam, me recuerdas a mí hace mucho tiempo

Soltó la mujer al ver a Neteyam siendo sostenido por su esposo para sentarse en el suelo. El joven Sully pensaba que su esposo era un exagerado con los cuidados, pero no decía nada, le encantaba ser el consentido de Aonung.

La cena pasó, y en un momento todos se abrazaban, volviéndose un momento de convivencia tranquila y una vez Aonung considero que habían cumplido con estar se levantó y llevo consigo a Neteyam afuera.

— ¿Iremos a casa? No quiero dormir, podemos quedarnos

Comento Neteyam, pensando quizás que Aonung sólo volvía a ser estricto sobre su descanso y cuidado del embarazo. Pero Aonung se limito a negar y decir que sólo quería estar a solas con su chico.

Llegando ambos a unas rocas grandes y altas, fácil de subir para Neteyam, aún así el chico metkayina lo ayudaba mientras sostenía su mano, por cualquier cosa.

— Aquí es muy lindo, nunca me habías traído aquí

El joven nacido en el bosque miraba todo con admiración, pues a pesar de ya haber visto muchas cosas no se comparaba nada a esto, pues era como ver el mar un poco desde lo alto y ver varias criaturas marinas brillar y resplandecer, como si fueran las únicas protagonistas del mar, lo cual era así. Además la noche bastante estrellada se reflejaba en el agua, algo sumamente lindo.

— Las piedras eran bastante grandes... estuve meses tayandolas yo solo para poder traerte aquí, al menos quería que fuera más seguro para ustedes

Neteyam, enternecido por el gesto de su amado, se limito a abrazarlo, pues había comenzado a llorar, cada detalle que Aonung hacia por él le parecía bastante lindo y adorable.

— Quien diría que mi chico grupos seria todo un romántico

— No soy gruñón

— Claro que sí, apenas y logre convencerte de volver a reunirte con mi familia para seguir una costumbre

Y es que para Aonung le parecía algo tonto eso del año nuevo y la navidad, recuerda que hace no más de una semana su esposo lo llamó Grinch, pues decía que su papá les relataba aquel cuento de los hombres del cielo y decía que él era su representación en Pandora.

— Para que no veas que soy así... pidamos nuestros doce deseos, pero en vez de frutas, quiero que sean 12 besos

Neteyam negó con la cabeza ante la idea de su marido, no porque no quisiera, si no porque le parecía gracioso.

— De acuerdo, 12 deseos y 12 besos

— Deseo, poder seguir teniendo tus caricias en el rostro por las mañanas para despertar

Entonces Aonung tomo las manos de Neteyam y mientras las acusaba entre sus manos propias, dejo un casto beso sobre el dorso de una de las de Neteyam.

— Deseo, que sean tus ojos los que me miren a mí siempre

— Ya lo hacen, Neteyam

Neteyam acercó su rostro y beso la frente de Aonung, el cual cerró sus ojos mientras disfrutaba de la acción de su esposo. Y así comenzaron a pedir sus deseos el uno al otro, en la mayoría los besos eran en los labios o mejilla, en una ocasión Aonung se atrevió a besar el cuello de su amado.

— Mi último deseo es que estemos juntos toda la vida

Y Aonung, quien ya había pedido su último deseo, internamente pidió un deseo más, pero quizás lo mantenga en su mente siempre. Aún así beso a su chico, este siendo un beso más duradero y llevando sus manos a la cadera de Neteyam.

— Feliz año, Aonung

— Feliz año, amor

Neteyam oculto su rostro en el cuello de Aonung, mientras esté pasaba sus manos por su trenza y quizás alguna otra zona del cuerpo contrario, quizás.

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Iba a hacer los dos deseos, pero no se me ocurrió mucho y no estaba segura de los que tenía, pero hice lo mejor que pude.

Ya que pueda estaré corrigiendo las partes en las que me haya equivocado, por ahora espero sea lo suficientemente claro para entender ^^

Los veo** 👀

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