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Un poco antes de la guerra

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Lo'ak se encontraba cumpliendo con el castigo, están tareas extra y había despertado incluso más temprano que sus padres para cumplir con cada una de las tareas, justo después de reunirse con quien los iba a supervisar.

Se sorprendió un poco al ver a Tsireya y el líder, ambos lo hicieron formar y sin más empezó a dictar las actividades y decir que Tsireya sería quien los cuidaría. Estaba un poco aliviado de que fuera ella quien estuviera supervisando, quizás no sería tan malo.

Pero se dio cuenta que no era así, Tsireya se estaba tomando esto en serio, no con él, pero con los demás. Uno d ellos amigos de Aonung empezó a flojear al tallar la madera y Tsireya se acercó y lo golpeó con la vara que tenía, diciendo que lo hacía mal. Lo'ak veía como cada uno no se salvaba de eso y eso lo aterraba de alguna manera, porque prácticamente era el único que faltaba.

— Tsireya, vengo a traerles comida

Lo'ak levantó la mirada y vio a su hermano, sonrió ampliamente, porque no desayuno y honestamente su estómago estaba más vacío que el la cabeza de Aonung. Pero no se levantó hasta que Tsireya les dijera, no quería ser reprendido.

— Bien, todos, vayan a comer a sus casas, no tienen mucho tiempo

Los amigos de Aonung se apresuraron a desaparecer e ir a sus casas, Lo'ak se acercó a su hermano dejando a Tsireya no muy atrás, mientras tanto Aonung se decidió por seguir con su tarea. Neteyam había decidido olvidar sus sentimientos por Aonung, pero lo veía un poco mal por el castigo, así que lo único que pudo hacer fue tomar una ración de alimento y acercarse a él.

— Ten, es mejor que comas algo

— No tengo hambre

Aonung dio una mirada rápida a la ración de comida y se giro a otro lado, dándole la espalda a Neteyam mientras continuaba con su actividad.

— ¿Por qué eres así? Debe haber una razón por la que no te agrade, no te he hecho algo de lo que realmente te haga odiarme

Aonung estaba confundido, lo que él decía era verdad, pero todos lo comparaban constantemente con Neteyam y eso le molestaba. Además el regaño que había recibido por todos sus actos hacia los Sully, Tsireya le recomendó que debía pedir disculpas y hacerse su amigo con el tiempo y lo único que puso hacer fue eso, se giro a verlo y simplemente dejó que su boca hablara.

— Lo siento... lamento todo lo que les hice, lo que te hice -Corrigió- no sé por qué lo hacía ¿bien? Desde que llegaste simplemente fue mucha carga para mí, antes podía hacer lo que quisiera y de repente llegas y mamá empezaba a sumar responsabilidades de líder y compararme para que mejorará, eres el perfectito y todos los metkayina suelen comentar eso, y sólo te odio por no poder ser como tú, quizás si fuese así, los demás estarían orgullosos de mí

Cuando Aonung comenzó a hablar  Neteyam se sorprendió un poco, no esperaba que le dijera realmente que le pasaba, pero lo dejo continuar hasta que termino.

— Yo... creo que deberías ser más tú mismo... a mí me gusta cuando eres tú, más determinado y autoritario, aunque no cuando eres grosero, pero no creo que ese sea tu "verdadero yo"

Aonung sintió algo en su interior que no podía explicar, observo las orejas de Neteyam bajar un poco y sus ojos veían a todos lados menos a él. Quizás no debía odiar a alguien que pensaba de esa manera de alguien como él.

— Yo... ayude a preparar la comida, espero que te guste

Neteyam dejó la comida a un lado de Aonung y se marchó, despidiéndose de su hermano y Tsireya, los cuales charlaban tranquilamente. Preguntaron si no iba a comer, pero dijo que ya lo había hecho antes y tenía tareas que terminar, aunque Lo'ak sabía que no era así.

Sin embargo, no era así pues Neteyam se dio cuenta que se le complicaría ignorar sus sentimientos por Aonung y olvidarse de ellos. Aprovechando que tenía un poco de tiempo, fue a caminar un poco, recordando a su vez como fue que se enamoró de ese chico.

Cuando recién llegaron el trato por parte de Aonung era casi igual, renuente a tratar con los na'vi del bosque, con forme pasaban los días Aonung se volvía cada vez más intenso con el trato. Pero durante el tiempo que se han quedado, Neteyam sentía que Aonung debía ser comprendido, veía como de alguna manera hacia lo que sus amigos querían y el finalmente accedía a todo.

Se daba cuenta que era eso, pues cuando no estaba con ellos, normalmente hacían sus tareas y se esforzaba en eso. Incluso lo hacía parecer fácil cuando el estaba aprendiendo a hacer diferentes cosas, aún se le complican algunas, pero no lo hace tan mal ¿o sí?

Había escuchado algunos comentarios de que sería un buen líder, se siente bien, pues prácticamente se había criado para eso desde pequeño, pues su padre era el líder. No pensó que eso fuera a perjudicar a Aonung y quizás llevarlo a pensar que quería su puesto, quizás por eso lo odiaba.

Al inicio se sentía avergonzado de sentirse atraído por Aonung, es decir, era bastante atractivo. También le gustaba observarlo discretamente cuando portaba su Iluk, o cuando pescaba, en cada cosa que hacia se veía determinado a hacer las cosas. También con autoridad, pues si alguien quería interferir o ayudarlo, el simplemente le pedía que se retirará.

Además lo orgulloso que era cada que hacía algo, como si supiera que no había alguien que lo superará o lo hiciera como él, es entendible que tuviera tantas y tanto admiradores, Lo'ak llegó a llamar a ese grupo como "los ciegos" pues no entendía que le veían de bueno a Aonung, pero cuando se entero de que a su hermano le gustaba ese mismo, le empezó a llamar "la competencia de Yamyam" en un modo bromista.

— ¡Neteyam! Es hora de hacer collares, hagamos unos juntos ¿sí?

— De acuerdo Tuk, vamos

Neteyam había vuelto a su entorno cuando sintió a Tuk colgarse de su cuello, además sabe que su pequeña hermana ha querido hacer collares. Mamá les había dicho que el primer collar tendría un gran valor y Tuk estaba más que emocionada.

— Mira, Aonung ¿no debería estar siendo supervisado?

Neteyam alzó la mirada y vio a Aonung, Tuk lo jaló hasta llegar con el hijo del líder, que a pesar de tener marcas de golpes de ayer por la tarde noche, mostraba un golpe recién hecho, pues tenía un pequeño hilo de sangre fresco.

— ¿Aonung? No me digas que mi hermano te ha golpeado de nuevo

Neteyam un poco preocupado se sentó a un lado, levantando el rostro de Aonung por el mentón. Aonung sintió que debía decirle, pero Lo'ak le dijo que él buscará la manera de decirlo.

— Ey, a un lado

Neteyam se hizo a un lado, pues era Lo'ak quien llegó y quito su mano del rostro del futuro líder, ante la reacción de su hermano se sintió algo avergonzado. Por otro lado, Tuk se fue, diciendo que iría con Tsireya.

— ¿Qué les pasó? Ambos están golpeados, si se pelearon de nuevo-

— Para nada, no peleamos, más bien peleamos contra los amigos de este tarado

— Vaya, que manera de decirle las cosas

— Tú cállate, nos enviaron a hacer otra actividad separados de los otros... y no preguntes porque

— ¿Por qué?

Lo'ak lo miro serio, no le diría nada. Aonung soltó una ligera risa por eso y se limitó a observar a Tuk y Tsireya a lo lejos, parecían hablar de algo realmente emocionante. Neteyam sólo río un poco, aunque tenía un poco de curiosidad, ya le preguntará a alguien más o él mismo lo descubrirá.

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Me disculpo por los errores que pueda haber, prometo que la próxima semana los edito JAJAJAJ

Chao 🏃

¿matrimonio arreglado? Aonunete Donde viven las historias. Descúbrelo ahora