032| Un día.

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Su mente vagaba por tantos escenarios hasta pensamientos de saber que debería hacer desde ahora que había visto a su hermano en ese hospital, solo sabía que por ahora debía ser un espectador más en todo, este enredó y comenzar a solucionar todo desde el inicio, lo principal era llegar a enfrentar a Omar quien ha Sido uno de sus amigos desde años.

El llegar hasta la casa en la cual llegaron a pasar tantas cosas eran como remolinos de sentimientos, solo aguanto las ganas de que los recuerdos no llegarán a atacarlo, se sorprendió de ver a su amigo sentado en una de las sillas como un fiel espectador de saber en algún punto llegaría.

__¿Mucho tiempo ha pasado no? Desde la última vez en llegarnos a ver nano, ¿uno o dos años? Desde todo lo pasado en las encinas con respecto a marina.__ Expresaba viéndolo directamente a los ojos.

Termino de entrar hasta la casa, cerrando la puerta en el proceso para irse sentado en una de las sillas, escuchando la pregunta formulada por su amigo.

Volver a escuchar ese nombre fue como volver a reabrir las heridas e echarle litros de sal a esas que aún no estaban cicatrizadas del todo con quién se había enamorado perdidamente.

Ambos estaban en ese coche en total silencio, solo se dedicaba a mirarse y jugar con sus manos antes de la chica llegar a soltar, eso que lo dejo completamente en silencio sin saber qué llegar a responder exactamente.

__ Haber nano, ¡quizás es una locura esto! Pensarlo cuando ni siquiera es tiempo, pero porque a nuestro hijo ponerle el nombre Patrick.__ soltó abruptamente esperando una respuesta de su novio.

__ ¡Tú estás segura! De eso marina, ¡yo no quiero obligarte a hacer algo! Que tú estás sin querer.__ preguntaba con dudas de lo que estaba proponiendo su novia.

__ ¡Porque no hacerlo! Más bien nano ese nombre me ha gustado, además eso significa mucho para ti tanto como nuestro hijo y si es niña buena pensaremos en algún nombre tenemos mucho tiempo para pensarlo.__ expresaba haciendo que llegara a ponerle una de sus manos en el vientre plano de la chica.

__ Sabes que te amo marina, eres simplemente alguien increíble, nunca lo olvides.__ lo decía bastante fuerte para ser escuchado.

Una lágrima silenciosa baja lentamente, aunque fue lo suficiente rápido para su amigo no llegarla a notar, era así cada vez que recordaba algo de la chica, más específicamente ese recuerdo en especial le había comentado todo lo pasado con su hermano y ella simplemente estuvo ahí para apoyarlo era especial y única en todo el sentido de la palabra, chicas cómo ella no se conseguían fácilmente son almas libres atrapadas en un cuerpo que no les corresponde aun así la amaba.

__ Más tiempo del que creía Omar, lo único que pasaba en ese tiempo por mi cabeza era saber ¿quién? La ¡había asesinado! Y por sobre todo probar que yo no la mate más bien la amaba, íbamos a ser padres, tú lo sabías más que nadie.__ llegó a decirlo luego de haber estado perdido en sus recuerdos.

__ A mí no debes darme explicaciones, quizás me dolió en el pasado de tu irte sin decirme nada cuando éramos amigos aunque ahora sin rencores ¿Dónde has estado todo este tiempo?.__ soltó esa pregunta a la espera de respuestas concisas quizás un tono más sombrío.

__ Pase meses viajando por varias partes del mundo hasta mi madre llegarme a encontrar en uno de los tantos lugares, de ahí nos instalamos en Londres hasta ahora de llegarme a enterar de lo pasado con Samuel vine tan rápido como pude.

__ Yo debo pedirte disculpas por no haber ido a verlo, eran demasiado para llegar a procesar, actúe esa noche viniendo hasta aquí y aún estoy sin tener el puto valor de llegarlo a verlo, es como llegar a aceptarlo que no estuve para quien se supone es mi amigo cuando más lo necesitaba todo me confundía más de lo esperado.__ decía más tranquilo a cómo comenzó la plática entre ambos.

¿ Se puede llamar amor? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora