FNAF: Universo 63

Capítulo 1:Un feliz inicio

Era el año 1980, en una casa de clase media alta en los Estados Unidos. Aquí se encontraba Elías Afton jugando con un robot de juguete en el suelo. Él era un niño de 9 años, pelirrojo como su padre y con los ojos verdes como su madre. Estaba en el living de su casa cuando escuchó que alguien golpeaba la puerta. Fue corriendo hacia ésta y miró a través del hueco por donde se meten las cartas.

Elías: ¡Mamá! ¡Ya llegaron! 

Seguido de eso abrió la puerta. Allí había una hermosa mujer de unos 30 años, con pelo castaño y ondulado. Al lado de ella había un niño de la misma edad de Eliaz, el cual se parecía bastante a la mujer. Pues ellos eran Henrietta y su hijo Charlie, el cual no le caía muy bien a Eliaz y lo demostró lanzándole una mirada de fastidio. Igualmente los hizo pasar y se fue corriendo al comedor. Allí estaban sus dos hermanas. Michaella, una jovencita de 13 años. La cual tenía su cabello despeinado y se notaba que se puso lo primero que encontró. Totalmente contrario a su hermana menor Eva, la cual como tenía 5 años aún era vestida por su madre, así que lucía más ordenada y elegante. Ellas junto a su padre Billy, estaban ordenando la mesa .El hombre le pasaba los platos ya servidos a la hija mayor, que de mala gana los iba poniendo en la mesa. En cambio la pequeña Eva con alegría se dirigió a los invitados.

Eva: Hola Charlie (Abraza a su amigo )

Charlie: Hola ( La aparta mientras se ríe)

Eva: ¿Quieres ver mis nuevos juguetes?

Charlie: ¡Si! De hecho te traje algo

Charlie se saca la mochila y de ahí extrae un auto de juguete morado. Se lo entrega a Eva

Charlie: La última vez que nos vimos se te había perdido uno, así que te traje otro para que no estuvieras triste

La niña se queda mirando con alegría el regalo

Eva: ¡Está genial! ¡Gracias! Vamos a probarlo (Toma del brazo a Charlie)

Henrietta: Ahora no niños. Primero vamos a cenar

Michaella: Siéntese aquí (Dice  de mala gana al lado de la mesa indicando unos asientos)

Henrietta la mira directo a los ojos con cierto rechazo

Henritta: Vamos (Toma a los pequeños de las manos)

Todos están sentados en una elegante mesa. Tienen unos ricos platos de tallarines. Sin embargo queda un puesto libre en la cabecera.

???: Perdón la tardanza. Me estaba peleando con el cepillo

La mujer se dirige a sentarse en la silla vacía. Ella era Miriam. Tenía 36 años y era la madre de aquellos 3 niños. Su pelo era rizado y oscuro. Con unos hermosos ojos verdes que resaltaban.

Miriam: Me alegro hayas podido venir (Le dice a Henrietta con una sonrisa)

Ambas familias comienzan a comer. Los adultos hablan de trivialidades, cosas casuales como las notas de sus hijos o sobre la nueva calle que van a pavimentar. Los 3 más pequeños se divierten jugando con la comida. Michaella es la única que está callada mirando fijamente su plato. Toma de manera monótona una cucharada tras otra. Pasado un rato, Henrietta mira a Miram y le dice: