La seduccion de la serpiente

los niños que sobrevivieron

En una noche menos oscura que las anteriores, en el mundo mágico y no mágico se sentía un cambio ahora que Voldemort había desaparecido. En la casa de los Dursley, un elegante gato atigrado vigilaba desde la esquina, sin moverse hasta medianoche. Llegó Albus Dumbledore, un anciano alto y delgado con una nariz torcida y ojos brillantes detrás de gafas. Buscaba algo en su capa, pero notó que el gato lo observaba fijamente. Ver al gato lo alegró misteriosamente.

se río y murmuró: —Debería haberlo sabido.

Dumbledore encontró un encendedor de plata en su bolsillo y lo usó para apagar las luces de la calle, una por una, hasta que solo quedaron dos encendidas. Luego, se dirigió a la casa de los Dursley y se sentó junto a un gato, al que le habló después de un momento, revelando que sabía que el gato era algo más que un animal común.

—Me alegro de verla, profesora McGonagall.

Se volvió para sonreír al gato, pero ya no estaba. En su lugar, le dirigió la sonrisa a una mujer llevaba gafas de montura cuadrada, que recordaban las líneas que habían alrededor de los ojos del gato. La mujer llevaba una capa, de color esmeralda. Su cabello negro estaba recogido en un moño. Parecía Claramente disgustada.

¿Cómo sabía que era yo? —Preguntó.

—Mi querida profesora, nunca había visto a un gato tan tieso.

—Usted también estaría así si llevara todo el día sentado encima de una pared de ladrillo —respondió la profesora.

 McGonagall 

resopló enfadada. —*. Yo creí que serian más prudentes, pero no ... ¡Hasta los muggles se han dado cuenta de que algo sucede!

—Las lechuzas no son nada comparadas con los rumores que corren por ahí. ¿Sabe lo que todos dicen sobre la forma en que desapareció? ¿Sobre lo que finalmente lo detuvo?

—Lo que están diciendo —insistió— es que en la noche Voldemort apareció en el valle de Godric. Iba a buscar a los Potter. El rumor es que Lily y James Potter están muertos. La profesora McGonagall se quedó boquiabierta.

—Lily y James ... no puedo creerlo ... No quiero creerlo ... Oh, Albus ... —Lo sé ... lo sé ... dice con melancolía.

—Eso no es todo. Dicen que quiso matar al hijo de los Potter, a Harry y a su hermana . Pero no pudo. No pudo matar a esos niños. Nadie sabe por qué, ni cómo, pero dicen que como no pudo matarlo, el poder de Voldemort se rompió ... y que ésa es la razón por la que se ha ido. Dumbledore asintió con la cabeza.

— ¿es verdad? —Tartamudeó la profesora McGonagall.

—Después de todo lo que hizo ... de toda la gente que mató ... ¿no pudo matar a unos simples niños? Es asombroso ... entre todas las cosas que podrían detenerlo ... Pero ¿sobrevivió Harry y su hermana en nombre del cielo?

- Tal vez nunca lo sepamos — dijo Dumbledore

— Imagino que fue  hagrid él que le dijo que yo estaría aquí, ¿no?

—Sí-dijo la profesora.

— Y yo me imagino que usted no me va a decir por qué, entre tantos lugares, tenía que venir precisamente aquí.

—He venido a entregar a Harry y a dahiana a su tía y su tío. Son la única familia que le queda ahora.

—¿Quiere decir ...? ¡No puede referirse a la gente que vive aquí! no puede. Los he estado observando todo el día. No podría encontrar a gente más distinta de nosotros. Y ese hijo que tienen, Lo vi pegandole  a su madre mientras subían por la escalera, pidiendo caramelos a gritos. ¡Harry Potter no puede vivir ahí! su hermana si ella no creo que sea bruja