El frío que hace es inexplicable, me arrepentí de haber salido a cenar. Pero, llegando al restaurant el ambiente cambio por completo
- Rebecca Armstrong - le dije a la chica y nos llevó a nuestro mesa
Freen y yo íbamos tomadas de las manos, algunas personas observaban a Freen, incluso una chica se acercó a pedirle una foto. Luego de aquel momento, pedimos que por favor no nos molestarán está noche.
- Me encanta este lugar - dijo Freen tomando una gran respiración
- Lo sé, por eso te traje aquí está noche - digo tomándole la mano por encima de la mesa
- ¿Sabes?, Mis padres me escribieron antes de salir de casa, dicen que quieren que volvamos a visitarlos - dijo Freen sonriendo
- Me parece perfecto, ¿Cuándo?
- No lo sé, cuando tengamos tiempo ambas - dijo y si, tiene la razón. Los padres de Freen viven en otro lugar y nos toca viajar como la primera vez
Cuando viaje por primera vez, estaba muy nerviosa. Freen trató de calmarme durante todo el camino, cuando llegamos al lugar Freen tomo mi mano para entrar a casa. Fui bien recibida, me abrasaron y saludaron primero, fueron las personas más encantadoras del mundo. No hubo preguntas incómodas, siempre fueron respetuosos y amables. Amo la familia de Freen.
- ¿Que tanto piensas?
- En tú padres - digo mientras tomo de mi copa - Ya quiero verlos
- Claro, cómo toda la atención te la llevas tú - dijo celosa y reí
- Me da mucha risa recordarlo, es que, por Dios, tú eres su hija y eres una actriz reconocida internacionalmente y ellos estaban emocionados por mí y por mi exposición - dije riendo un poco
- Son tus fans - dijo uniéndose a mi
Estuvimos bebiendo mucho, creo que ya estábamos ebrias, muy ebrias
- ¿Vamos a casa? - le pregunto a mi hermosa novia
- No, no vamos a manejar así - tiene razón - Llamaré a Mark para que nos venga a recoger
- Pero vamos a esperarlo en el auto - dije ya queriendo salir del restaurant
Salimos ambas, yo en lo personal me tambaleaba un poco y Freen se reía de eso, perdón, pero no estoy acostumbrada a beber. Entramos al auto y encendí la calefacción
- Mark dice que en 30 minutos está aquí - dijo Freen mientras se quitaba el blazer
- ¿30 minutos? ¿Qué haremos en 30 minutos? - pregunté desesperada
- No lo sé, ¿Alguna vez lo hemos hecho en el auto? - pregunto pícara y reí
- No creo que sea buena idea - dije riendo
- ¿Porque no? - pregunto desanimada
- Estamos ebrias, Mark nos llevará a casa ¿Recuerdas?, No podemos dejar el auto oliendo a sexo - dije sería
- Aburrida - dijo sería.
Estuvimos allí, solo besándonos, ella de vez en cuando metía su mano por debajo de mi vestido, sé que estaba caliente pero no tendríamos sexo en el auto
- Amor, ya - dije alejándome un poco
- Solo estoy tocando lo que es mío - dijo acercándose para volverme a besar
Y sentí otra vez su mano
- Estás mojada - dijo mordiendo mis labios
- Lo que provocas - digo jadeante
No, no puede aguantar más, me subí en sus piernas y empecé a devorarla a besos
- ¿No era que no tendríamos sexo en el auto?
- Cállate
Sentí la mano de Freen haciendo presión en mi vagina
- ¡Ah!
- Muevéte para mí - dijo con su voz algo ronca
Empecé a hacer pequeños movimientos en círculos, sentía como sus dedos rozaban mi entrepierna y cada vez que eso pasaba, gemía fuerte
- Entra en mi - digo muy excitada
Freen obedeció, sentía sus dedos entrar y salir de mi
- ¡Ah! ¡Ah! Más rápido
Freen aumentaba sus movimientos cada vez más, las ventanas del auto estaban totalmente empañadas.
Tres toques en la ventana nos interrumpen. Mierda.
Me baje rápido de las piernas de Freen y me pase al asiento trasero. El auto olía complemento a sexo, que vergüenza.
- Mark - dijo Freen abriendo la puerta del auto
Mark entro sin decir alguna palabra, esto era muy incómodo.
El auto iba completamente en silencio, yo no sabía a dónde mirar y Freen decía que me calmara
- No pasa nada - dice ella
- Lo dice como si ya hubiese sucedido esto antes - dije sin pensar y ella se quedó en silencio
- ¡Vaya! señorita Sarocha - dije riendo
- Cállate
Luego de aquella pequeña confesión no me sentí tan avergonzada, me recosté al cuerpo de Freen, sentía que el sueño se apoderaba de mí, ella también acariciaba mi cabello lo cual hizo que perdiera por completo la batalla contra el sueño.
- Duerme preciosa - dijo dándome un beso en la frente
Y fue todo para caer en un sueño profundo.
