𝑬𝑵𝑻𝑹𝑬 𝑪𝑨𝑴𝑨𝑺.|| 𝑺𝒉𝒊𝒏𝒊𝒄𝒉𝒊𝒓𝒐 & 𝑾𝒂𝒌𝒂𝒔𝒂.

Capitulo [ II ] La Cita.

La cita.

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La vida de ensueño que había soñado antes de casarme era tener un esposo atento maravilloso y comprometido a una sola mujer, yo ser su mujer de por vida darle niños y tener esa casa en dónde uno va a hacerse viejo. Era un sueño lindo.

Mi esposo es el hombre más aclamado de la cuidad, sobre todo su apellido daba tanto poder sobresaliente. El, un hombre encantador, maravilloso y misterioso así era el, al encontrarlo agradecí a la vida cuando lo había encontrado en una noche de lluvia quedando flechada con su mirada y su voz seductora, el tipo ideal de ensueño.

Nuestro romance fue fugas y pasional, ambos nos sentíamos dueños del uno del otro, más que físico fue emocional, el enamoramiento centrífugo nuestras vidas y en un cerrar de ojos la boda se realizó en un evento íntimo a tan solo siete meses de noviazgo.

Las cosas que empiezan fugaces así mismo se van, en un segundo se van cansando y lo que ha empezado magnífico se vuelve rutinario...
Estrés y trabajo al curso de todos los días.
El error fue casarse a temprana edad, sin haber tenido el tiempo suficiente para madurar y crecer.

En ese tiempo había dado rienda suelta a mis deseos a espaldas del hombre quien jure ante un juez amarlo hasta que la muerte nos separe. Pero, hubo alguien que lo cambio todo y esa rutina mañanera era la mas añorada al empezar el día.

El seguramente lo había notado la rareza de nuestros encuentros, ya no lo esperaba en la cama ni menos iba por el al trabajo, solo se dedicaba a dormir sin abrazarlo, el también quería salvar y revocar el fuego profundo de nuestros corazones, aúnque era tarde en este tiempo habían pasado tres años.

Presente.
Evy.

Una noche nos dimos una cita en un restaurante de lujo de la cuidad, arreglarme con el mejor vestido.

Al llegar había comensales velando la noche en citas románticas con sus novias y esposas. Dejando mi nombre en recepción y buscando con la mirada la mesa reservada, lo encontré estaba ahí el.