Reencarnación

1.4K 110 33
                                    

Advertencias/Etiquetas: Somnofilia no consensual, masturbación, comportamiento obsesivo, TOP Aemond, bottom Lucerys, sexo implícito/referenciado, consentimiento dudoso, secuestro, síndrome de Estocolmo, Lucerys no recuerda al principio, Aemond recuerda primero, matrimonio forzado.

Si no te interesa e incomoda leer este tipo de cosas aún estás a tiempo de regresar, en caso contrario, ¡Nos vemos en las notas finales!

Cuando se reencuentran: Aemond - 25 años y Lucerys - 18 años.

Cuando se reencuentran: Aemond - 25 años y Lucerys - 18 años

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Lucerys, Lucerys, Lucerys...

Si le preguntas a cualquiera sobre qué ronda en la mente de Aemond nunca sabrán qué decirte, ¿Su trabajo? ¿Familia? ¿O acaso alguna chica? Nadie lo conoce lo suficiente como para adentrarse en adivinar la respuesta. Todas son meras suposiciones, la vida de su jefe es un misterio.

Aemond es el director del corporativo más destacado del país, algunos cuentan que lo ha logrado gracias a su apellido, otros dicen que es debido a su astucia y otros tantos susurran que es a causa de la sangre derramada.

¿La verdad? Solo él la sabe, no hay mucha información de su vida, los antecedentes de su familia son vagos, la privacidad es su máxima prioridad, no existen escándalos ni notas de revista más que las columnas cuestionando el porqué tanta seguridad con los datos que puedan filtrarse al ojo público.

Son escasas las veces en las cuales pueden verlo a la cara, dejándose aparecer durante las reuniones comerciales, cenas laborales y discursos meticulosos expresados como un mantra.

Aemond, Aemond, Aemond... ¿Qué es lo que ronda su mente?

-

El recién universitario Lucerys no sabe quién es es en la vida, no se conoce, no sabe qué quiere, no sabe cuál es su futuro.

¿Acaso alguien que solo trata de sobrellevar su primer año? ¿Un prometedor gran empresario? ¿Quién puede decirle? Aún está descubriéndose, a veces sueña con dragones, otras veces con un niño al que no conoce, sueña con el mar, barcos, una mujer de cabello plateado a quién no logra ubicar mientras grita que regrese; pero sobre todo con un hombre, un hombre que lleva un parche en el ojo izquierdo y cuyo único ojo penetra hasta el fin de su alma, provocando su despertar.

Con la mirada al frente pero sin ver realmente, permite que sus pensamientos lo alcancen y pronto dobla en la esquina que da a su vecindario. Son las diez de la noche y escucha los grillos cantar, el viejo poste de alumbrado continúa parpadeando cuando unos brazos lo toman desprevenido en medio de la oscuridad.

Intenta gritar, nadie está fuera, nadie lo escucha, nadie ve cómo un hombre encapuchado lo arrastra hacia un auto mientras pierde la consciencia.

¿Quién es?

-

Han pasado quince años desde que empezó la búsqueda de Aemond, al principio no tenía un nombre, ni siquiera un rostro, solo el sentimiento de anhelo, algo faltaba, una presencia, un compañero, un joven de cabellos rizados y piel de porcelana.

Indescifrable. | LucemondDonde viven las historias. Descúbrelo ahora