Cuando empezó todo

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17 de Marzo de 2022

Hola cocinerucho,

¿Cómo estás?

Espero que bien, por aquí ando como siempre por si te interesa.

Aunque tal vez no quieras saber nada de mi.

Es comprensible a fin de cuentas no cumplí con mi promesa, lo siento. No sé cuántas veces te lo habré dicho ya.

Quiero avisarte de ante mano, está será la primera carta de muchas. He leído por ahí que es una buena manera de desahogarse.

Aún no sé dónde acabará esta carta, si quemada o cogeré el valor para enviártela. Aún no lo sé.

He estado soñando últimamente contigo, sobre todo del día que nos conocimos. Incluso en mis sueños soy capaz de sentir el olor de carne a la brasa.

Y que todo empezó porque mi estúpido amigo de la infancia estaba loco por ir al famoso restaurante que hacía las mejores carnes.

Y yo que solo había ido por hacerle un favor a él y a mis oídos para que dejase de molestarme acabe volviéndome loco también, pero con la diferencia que no era el olor del lugar, ni el sabor de la carne, ni siquiera del delicioso vino que nos trajiste para acompañar la comida.

Fuiste tú.

Con tu tintineo al acercarte, con esos ojos azules clavados en mi aunque intentabas, disimular, ni siquieras eras el camarero y aún así nos trajiste el vino.

¿Por qué lo hiciste?

¿También llamé tu atención como tú la mía? Nunca hablemos de ello, no nos dio tiempo. Me gustaría saberlo, me gustaría saber todo lo que pasó por tu maravillosa mente para decidir que querías mi atención.

Con ansias de saberlo,

La cabeza de musgo que te observaba desde la mesa once.

La cabeza de musgo que te observaba desde la mesa once

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Cartas para Sanji 💚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora