¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
30 de Septiembre año 2022, Seúl, Corea de Sur (Actualidad)
BANGCHAN
Aceleraba el motor lo mas profundo que el auto pudiese dar, sabia que haber mentido en aquella apuesta iba a traernos problemas, pero realmente no estaba dispuesto a perder mi fabuloso auto y mucho menos le iba a dar en el gusto a ese imbécil, aunque claro que no todo iba salir bien teníamos a una banda entera a nuestras espaldas
- ¿¡Tenias que engañarlos!? - grito frenético mi compañero mientras bajaba rápidamente el vidrio del lado copiloto para sacar medio cuerpo dispuesto a disparar, teníamos que deshacernos de algunos - Era mas fácil robarnos el auto y nos ahorrábamos todo esta parafernalia
- Solo guarda silencio y dispara - gruñí mientras aceleraba - Hemos estado en situaciones peores
- Y que lo digas - rio mientras recarga su arma para volver a disparar - Solo que estábamos mejor armados en ese entonces
- Eres soldado, se supone que sabes defenderte hasta con lo más mínimo - doble bruscamente entre las calles tratando de perderlos, pero no era de mucha ayuda nos disparaban por todos lados - ¿Alguna idea?
- Estos malditos - gruño mientras estiraba las manos para empujar a uno de los motocicletas que nos seguían de muy cerca - Hemos tomado malas decisiones pero esta es la peor
- ¿Estas seguro? - cuestione mirando a mi compañero, quien al notar mi rostro frunció el ceño
- ¿De que demonios hablas? - frunció el ceño - Dime que no vamos a cometer otra estupidez
- Yo no le diría así - desfunde mi pistola para sacar mi mano por la ventana disparándole a uno de los motociclistas que se nos acercaba - Es un excelente plan de hecho
- Espera un segundo - me miro confundido - ¿De que estamos hablando?
- lo mire por un segundo antes de volver a disparar, logrando entrar en el estacionamiento de un viejo edificio y mi punto de encuentro - Pues...
- pareció entender a que me refería porque empezó a negar con la cabeza - Tienes que estar demente - soltó antes de bajarse del auto, desfundando su pistola, listo para disparar a cualquiera que se nos acercara - ¿La bóveda de oro? Dime que no es lo que creo es
- Así es mi amigo - sonreí, apuntando directo hacia el auto que se nos acercaba, cuatro hombres bastante robustos se bajaron más que dispuestos a pelear - Veamos de que están hechos señoritas
Corrieron directo hacia nosotros, nos miramos mientras nos acomodábamos espalda con espalda, nos rodearon antes de atacarnos primero se abalanzaron hacia Minho quien hábilmente empezó a pelear, esquivando y pegando puñetazos limpios a cualquiera que se le acercara, sentí como me tomaban por la espalda asestándome un puñetazo directo en la mandíbula, me moví rápido librándome de los brazos de mi opresor para golpearlo directo en el estomago lo tome por la espalda pegándole un rodillazo directo en la cara, logrando noquearlo, levante la mirada dispuesto a seguir peleando pero no quedaba ninguno, estaban todos en el piso
