Tsubasa: 18 años.
Wakabayashi: 24 años.— Me quiere, no me quiere, me quiere, no me quiere, me quie-
— Tsubasa. Bebé ¿otra vez contando los pétalos? Mi amor ¿cuántas veces debo decirte que te amo con toda mi alma? Hasta de boda hemos hablado.
— Es que, es que, es que.
— Dime, bebé, puedes hacerlo.
— Yo quisiera que usted... que tú... bueno...
— Vamos, pequeño, confía en mi. Puedes decirme lo que tengas que decir, sabré entender.
Pasaron unos cuantos segundos de silencio en los que Tsubasa solo miraba a su novio queriendo decirle algo con los ojos pero ser incapaz de hacerlo con su boca.
— ¿De qué otra manera gustas que te demuestre mi amor, chiquito?
— Quiero que me toques.
Y el mayor casi se ahoga con su propia saliva al escuchar tales palabras de su niño.
...
Pero claro, Wakabayashi estaba totalmente dispuesto a satisfacer y hacerle sentir ese amor que Tsubasa tanto pedía.
— ¡Mgh! ¡Genzo!
Gritaba el pequeño de ojos negros mientras que era embestido fuerte y bruscamente por su querido novio.
— ¿Te gusta, bebé? ¿Te gusta sentirme, uh?
Preguntaba descaradamente el pelinegro que yacía nalgueando las pompis desnudas de su lindo y sexy chico.
Así siguieron por 5 horas (se amaban mucho).
Y al final cayeron más que rendidos, aferrándose al cuerpo del otro, abrazados y finalizando con un beso tierno, sellando su amor y sabiendo que la luna era testigo de todo lo que había pasado esa noche.
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One shots - Captain Tsubasa.
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