CALMA ANTES DE LA TORMENTA

246 24 8
                                    



JAKE

Ver como Hera lloraba mientras la abrazaba, era doloroso. Aun estaba procesando el hecho que Richard fuera el autor de todo esto. Pero eso lo hablaría con Hera después, lo importante era sacarla de este lugar y conseguir que se tranquilizase.

-Hera, debemos irnos, el FBI está aquí y dudo que Alan los detenga mucho, además no quiero exponerte a esto.

Hera tomo unos segundos en responderme, se aparto de mi lado y ya extrañaba ese contacto. Me maldije internamente no era momento de pensar en eso.

Cuando Hera se separó de mí y me dio la espalda, pude notar como disimuladamente se limpio sus lágrimas y volvió a mirarme con un rostro nuevo, notaba la determinación es su mirada.

-Hera: Hay que irnos, lo importante es que el FBI no nos vea, luego vere que hacer con Alan.

Noto como se abstiene a decir y expresar lo que realmente siente, ahora más que nunca veo que nos parecemos más de lo que creí, quiere encargarse de hacer las cosas por sí misma. Me entristece.

La veo y tomo su mano, le sonrió sin dientes.

-Lo haremos juntos Hera, como siempre ¿Qué te parece si vamos en mi auto?

Mira mi mano un poco sorprendida y se sonroja. ¿Pero por qué se sorprendió y se sonrojó acaso hice algo malo? ¿Fui muy impulsivo?

Creo que vio la preocupación en mi rostro, porque luego su mirada se encuentra con la mía y me regala una hermosa sonrisa. Creo que he descubierto una de mis cosas favoritas aparte de mi computadora claro, y es verla sonreír.

Debemos concentrarnos, así que corremos hacia donde escondí mi auto. Llegamos y noto que Hera quiere contener su risa.

- ¿Qué pasa? - pregunto

-Hera: Llevas al extremo el hecho de esconder algo ¿no? – Comienza a reír un poco y señala mi auto.

Volteo a ver mi auto y si recuerdo muy bien el momento cuando lo escondí, pensé que debía esconderlo muy bien para que el hombre sin cara no pudiese encontrarlo, pero creo que exageré un poco. Lo llene de hojas para que se camuflajeada como un arbusto, pero veo que no funciono muy bien. Rio un poco y entramos al auto.

- ¿Dónde estabas hospedándote? -Pregunto

-Hera: En un Motel a las afueras de Duskwood, no quería quedarme en el motel de la señora Walter, ya sabes, para que no me reconocieran.

-Entiendo, ¿te parece ir a ahí o prefieres ir donde estoy hospedándome? – Pregunto un poco inquieto no quiero que piensa mal de la situación.

Hera: Creo que sería mejor ir a donde te hospedas, el motel donde estoy yo está muy cerca de Duskwood y lo que nos conviene ahora es estar lo más lejos posible de Duskwood.

-Entonces vamos.

Emprendemos nuestro camino, ninguno de nosotros dice nada y a decir verdad el silencio entre nosotros no es incómodo, al contrario es demasiado cómodo. Ha decir verdad tengo muchas cosas que preguntarle y creo que ella también, pero quiero esperar cuando estemos en un mejor lugar. No me parece adecuado hablarlo en un auto.

Hera me saca de mis pensamientos cuando me pregunta algo.

-Hera: Quieres preguntarme muchas cosas ¿No es así?

Me sorprende que me haya hecho esa pregunta, ¿Acaso soy tan fácil de leer?

-Creo que ambos tenemos muchas preguntas, pero este no es lugar correcto para hablarlos, ¿no crees?

SECRETOS DUSKWOODDonde viven las historias. Descúbrelo ahora