Jeongin se despertó a las siete de la mañana de ese mismo día y se sorprendió por un momento al ver a Hyunjin durmiendo al otro lado de la cama, con las mantas pateadas a sus pies.
Se levantó de la cama y rápidamente se las arregló para salir de la habitación y volver a la suya, para que Yuna no encontrara su lugar en la cama vacío al despertar.
Todo lo que ocurrió hace unas horas con Hyunjin pasó por su mente mientras se acostaba en la cama y esperaba a que ella despertara.
Jeongin entonces se dió cuenta de que era su cumpleaños y que mañana era Navidad. Eso lo hizo sentirse mejor sobre toda esta situación.
Yuna se despertó alrededor de las nueve, y todo el mundo tenía que irse al mediodía. Cuando vió a Hyunjin en la recepción, el chico mayor le envió un guiño descarado y todo lo que Jeongin pudo hacer fue girar la cabeza.
Había sido la mejor noche que Jeongin había tenido nunca, y las imágenes de la misma seguían corriendo por su cabeza.
Él y su familia cenaron en Nochebuena como de costumbre, y sus hermanos menores se fueron a la cama emocionados por el día siguiente. Jeongin sabía que probablemente recibiría mucho dinero por Navidad, ya que ya le habían dado su coche.
Jeongin tuvo razón, porque a la mañana siguiente encontró un sobre con su nombre debajo del árbol, junto a otra bolsa llena de dulces Belgian. No le sorprendió ver una nueva tarjeta de crédito de American Express Centurion en la bolsa. También había un pequeño papel con el PIN y otros detalles.
Agradeció a sus padres y su padre le hizo saber que recibiría treinta mil dólares en su tarjeta todos los meses, para que pudiera ahorrar para el futuro. Jeongin tenía todo planeado de todas formas; conseguiría una casa en Londres, luego una casa de playa en la Isla Canvey, donde colocaría el yate con el que siempre soñó.
Empezó a nevar esa tarde y no paró hasta dos días después, cuando Seungmin lo llamó para avisarle que saldrían a almorzar.
Jeongin dió una excusa a sus padres, diciéndoles que iría a casa de Yuna por unas horas. Se vistió con una camiseta azul Lacoste, un par de jeans y su chaqueta de cuero de Burberry. Decidió ir con las Converse, ya que no pudo encontrar sus botas.
Se reunieron en un restaurante de comida china en el centro comercial y normalmente Jeongin habría detestado ese lugar, pero ya se había acostumbrado. Todos los del grupo estaban allí, y Felix se unió también, con Chaeyoung. Así que pasaron de ser seis a ser ocho personas, y Jeongin no tuvo problema con eso porque ambos eran divertidos y estaban enamorados. Debería haber echado de menos a Yuna, él en serio tuvo que haberlo hecho, pero no lo hizo.
"¿Qué haremos para Año Nuevo?" Changbin preguntó después de que ordenaran su almuerzo.
Jeongin estaba sentado entre Changbin y Jisung, justo enfrente de Hyunjin, y era la primera vez que probaba comida china.
"Fiesta en tu casa, ¿verdad?" Minho le preguntó y Changbin se encogió de hombros.
"Si a ustedes les parece bien"
"Es lo que hacemos cada año, Changbin" Hyunjin dijo y a todos les pareció bien la idea de hacer la fiesta de Año Nuevo en casa de Changbin.
Jeongin solía ir a Times Square con su familia en su jet privado. Así que por mucho que prefiriera pasar el último día del año en casa de Changbin (¿de dónde vino eso?), sabía que no había manera de escapar de su viaje a América.
"¿Necesitas que traiga algo de hierba?" Preguntó Hyunjin mientras la camarera le servía agua en el vaso. Ella le hizo una mueca pero Hyunjin ni siquiera pareció darse cuenta.