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-¿Seguro que estás bien? -Willy miró a su compañero, algo preocupado-.

-Sí, sí, te lo juro que estoy bien, ya sabes.

No se quedó del todo tranquilo, ya tenía que irse al trabajo, pero Quackity nuevamente se despertó gracias a una pesadilla y sentía una preocupación similar a la de aquel día donde le vio tener la primera. Lo peor de todo es que le dejaba en casa totalmente solo, sin nadie con quien comunicarse, sus únicas distracciones eran la limpieza o ver la televisión.

-Vale. -Liberó un largo suspiro-. No te quedes aquí todo el día, ve y pasea por el pueblo, piensa en cosas bonitas, o algo.

Quackity soltó una pequeña risa, aunque no le proporcionaba los mejores consejos del mundo, se notaba que se preocupaba por él y eso era suficiente.

-Claro, seguro que saldré más tarde o a ver qué chingados hago, pero nomás fue un mal sueño, tú tranquilo. -Dijo de lo más relajado-.

-De acuerdo, Quackity. Entonces cuídate eh. Nos vemos en la tarde.

Le dio un breve e inesperado abrazo al pelinegro, dejándole sin palabras. Tan rápido como aquél abrazo terminó, se retiró del hogar en camino a hacer presencia en su trabajo.

"¿Me abrazó? ..."

Se quedó perdido, mirando la puerta por la que Willy atravesó. Inevitablemente, una pequeña sonrisa apareció en sus labios.

-Bueno, ni modo, a trabajar... Pinche madre, hoy hay que lavar ropa. -Se lamentó tan rápido como se dio cuenta-.

Como todas las mañanas, se puso manos a la obra para ganarse, o conservar, su lugar en la casa de su amigo.


 -¡Por fin! -Exclamó con una alegría mezclada con cansancio-

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-¡Por fin! -Exclamó con una alegría mezclada con cansancio-.

Soltó un suspiro de alivio al darse cuenta que ya había finalmente colgado la última prenda limpia en el tendedero. Todo lo demás en la casa ya estaba limpio. Se estiró ahí mismo, sintiendo una agradable brisa fresca al aire libre.

"Bueno, ya acabé de limpiar todo este desmadre. ¿Y ahora?"

Llevó la mirada en dirección a dónde se encontraba el centro del pueblo, a pesar de que no lo podía ver con claridad desde la casa de Willy. Sus ideas solamente le arrojaban a emprender camino a ese lugar, pues explorar más allá de lo que ya conoce podría terminar un poco peligroso, no le gustaría meterse al bosque y terminar perdido con quién sabe qué tipo de criaturas, solamente de pensarlo le erizaba la piel del miedo.

No lo pensó mucho y se preparó para irse, y solo bastó caminar alrededor de 10 minutos para escuchar una voz desconocida gritar su nombre, que se acercaba rápidamente a él, estaba confundido.

-¿Quackity? ... ¡Quackity! ¡Hey!

Logró encontrar de quién venía aquella voz que se escuchaba tan amable. Un hombre se acercaba a él, poseía unos brillantes ojos morados , pero para ser sinceros, tal vez su altura y cuerpo resaltaban más.

"Ay, cabrón, ¿Me va a asaltar?" Se lamentó cuando ya lo tenía de frente.

-Este... Señor, ¿Cómo es que sabe mi nombre? -Cuestionó, algo temeroso-.

-¿Cómo no lo voy a saber? Willy, mi mejor amigo me lo ha contado... Él me ha dicho que recientemente adoptó a un muchacho. -Soltó una risita, bromeando con él-.

Vaya que Willy era popular por aquí, después de todo era un policía, un jefe. Ahora se encontró con quién parecía ser su mejor amigo, y no podía mentir, le parecía alguien verdaderamente agradable en tan pocos segundos, es como si tuviera una gran magia.

-¿Oh? ¿Eres el mejor amigo de Willy? No me había contado sobre ti, perdón. ¿Cuál es tu nombre?

El hombre hizo cara de indignado.

-¿¡No te contó sobre mí!? Hablaré con Willy. -Soltó una risa-. Perdón si te asusté, soy Samuel, un gusto.

Una amable sonrisa no desaparecía de los labios del mayor, realmente le ofrecía confianza.

-Un gusto Samuel. Pues, ya te sabes mi nombre así que no tengo nada más que decir. -Nerviosamente se rio también-.

-Nada se me escapa, eh. ¡Pero bueno! Estaba en camino a ir de caza y justamente te encontré, ¿No quieres venir?

Quackity no había tenido la mejor de las experiencias en su pesca, no quería imaginarse en la caza, ese hombre tenía cuerpo de pelear contra osos, así que prefería no ir a estorbar.

-Eeesssteee... ¡No, no, gracias! La neta es que ya tenía yo unas cosas que hacer, entonces... Estoy ocupado. Pero igual gracias. -Buscó una excusa-.

-Oh, ¿En verdad? -Una cara triste apareció en él-. Bueno... ¿Y a dónde vas?

Tenía que pensar en la excusa perfecta, miró a su alrededor por unos pocos segundos, hasta que el foco en su cabeza le iluminó.

-¡Voy a ir a visitar a un amigo! Sí, quedamos en vernos ahorita, entonces ya voy un poquito tarde.

-¿Un amigo! ¡Ooh! ¿Ya tienes amigos tan rápido? Me alegra tanto. ¿Y quién es?

Quackity tragó saliva, ¿Qué era esto? ¿Un interrogatorio?

-Ehh, ¡Ya sabes! Con... Con Luzu. -Parpadeó un par de veces, esperando que se lo creyera-.

Samuel hizo una cara de asombro, como si eso no fuese posible.

-¿Luzu? ¿En verdad?... ¿Ahora eres amigo de Luzu? -Se calló por unos segundos-. ¡Aaaay, qué bueeeno!

Sonrió muy felizmente, y se lanzó a abrazar al pelinegro, por alguna razón que no entendía Quackity, eran grandes noticias que fuese amigo de Luzu, aunque por el momento, no lo eran exactamente. Nuevamente, el de ojos morados añadió.

-La verdad es que Luzu ya no suele convivir ni siquiera con nosotros, se queda en casa solo. ¡Pero qué bueno que has llegado tú! Seguro que le agradas muchísimo.

Se separaron de aquel abrazo, el mexicano le miraba medio confundido.

-Sí, nos llevamos muy bien.

-¡Trata muy bien a Luzu! ¿Okay?

Con una incómoda sonrisa él asintió, sin saber que su pequeña mentira le causaría un problemita a continuación. Ambos giraron su cabeza de inmediato a un costado, de dónde provenían unos pasos acercándose a ellos.

-¿Habéis dicho mi nombre? -Luzu estaba ahí parado, mirándolos-.

-¿¡Luzu!? -Quackity se sobresaltó, en ese momento sabía que la había cagado-. ... ¿Qué haces aquí?

-¡Luzu! ¡Qué milagro verte! -Samuel se lanzó a abrazarlo, aunque no hubo gran respuesta por parte del castaño-. ¡Qué bueno que has llegado! ¿Viniste a buscar a Quackity? Te distraje mucho a pesar de que tenías que irte, lo lamento.

Se disculpó con él, mientras que Luzu los miraba con una expresión confundida, estaba claramente buscando una explicación.

-¿Cómo?... Pasa que yo andaba por aquí y escuché que mencionaron mi nombre. Samuel se separó de él-.

Quackity paseaba su mirada entre los dos chicos, estaba claramente nervioso, por lo que, antes de que alguno de ellos pudieran decir algo, él lo hizo primero.

-¡Sí! Es que estábamos hablando de... ¡De que ya nos íbamos! -Se puso a un lado de Luzu-. Nos tenemos que ir Samuel, ¡Suerte en tu caza!

-Oh, sí, ya no les quitaré más tiempo. Os veré luego, ¡Diviértanse, muchachos! -Sacudió su mano y se fue, dejando a un Luzu realmente confundido-.

Quackity permaneció mirando como aquél hombre se iba, finalmente sintiendo que podía relajarse, solo un poco, pues aún tenía explicaciones que darle a aquél confundido a su lado. No quería decir que le había usado como excusa para salvarse de ir a cazar, así que continúo con su mentira.

Se quedaron en un silencio incómodo, hasta sentir como Luzu le dirigió la mirada, él también lo hizo.

-Este... ¡Ah! Es que estaba a punto de ir a visitarte a tu casa. Sí estás libre, ¿Verdad? -Hizo su mejor intento para parecer que todo estaba bien-.

-¿A mí casa?... -Le parecía poco creíble, no terminaba de comprenderlo-.

-¡Sí, obvio! Pues yo quería ir a visitarte porque me pareciste muy buen pedo, Luzu.

En realidad, no le había conocido muy bien pues solo fueron unos pocos minutos donde intercambiaron algunas palabras, y Quackity estaba tan consciente de eso, pero era una buena oportunidad para conocer al castaño, aprovechando el problema en el que casi se metía.

-Asumiré que es bueno lo que me dijiste. -Dijo después de reírse-. Pues vaya, mi casa no es un lugar muy interesante, ¿No te gustaría ir a otro lugar mejor?

Luzu le sugirió con toda la amabilidad, al contrario le siguió gustando el plan.

-Claro, pero es que... yo sigo sin conocer bien el pueblo.

-No te preocupes, yo te llevo a un lugar muy bonito, Quackity. -Le sonrió, y con un gesto de su cabeza le hizo entender que debía seguirlo-.

-¡Órale! ¿A poco tú sí conoces muy bien por aquí? -Comenzó a caminar a un lado suyo-.

-Claro, pues yo nací y he vivido toda mi vida aquí. Sería ridículo que no conociera Karmaland.

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⏰ Última actualización: Jan 05, 2023 ⏰

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Stabbed By My Lover | LuckityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora