『••✎••』❦ Capitulo I ❦『••✎••』

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❦Kaeya Alberich❦
[Bien,bien aquí me encontraba yo nuevamente huyendo en lo que mis piernas me daban para correr un poco más,ya exhaustas del esfuerzo ejercido,siendo sinceros tenía mis malditas razones para estar en esta quejumbrosa situación...me negaba de manera rotunda el tomar de una misión en mis manos,si podrían llamarme vago como se les plazca en sus pensamientos y deseos pero no subiría a esa maldita montaña congelada,no cuando toda la maldita sede rechazó aquella misión y ahora nuevamente,bingo al maldito capitán le tocaba el tomarla estaba enteramente harto de lidiar con los pesares y encargos ajenos ahora podía entender un poco de lo que sentía Aether quizá también Lumine...lo mejor era dejar de divagar como loco poeta en una noche de luna llena y darme prisa a tomar un buen escondite antes de que Jean diese con mi pobre ser.]

— Mis pasos podían claramente resonar en los extensos pasillos desolados.. Justo hoy que conveniente jajaja,reía entre dientes para ocultar cuan evidente era esto un maldito plan para hacerme ir, mi rostro por un momento pareció dejar aquella sombría oscuridad que le cubría en cuanto encontró la esquina que doblaba a una serie de habitaciones esenciales para escapar cuando lo ameritaba la situación.. Situación como hoy, [¡Bingo!.] llegué a pensar, apresurando mi andar haciendo que mis zapatillas casi derrapasen por el piso perfectamente pulido...bueno mi buena suerte hoy era como la de Bennett vaya mierda de ironía que al dar la vuelta cara a cara me encontraría con la persona de la cual justamente huía como prófugo de la justicia....—

—; Jean...un placer verte..

[...]—; Ya habíamos hablado de esto en muchas reuniones anteriores,no entiendo como aún sigues cometiendo las mismas equivocaciones.

—; Ahhh..., bien lo admito lo siento me atrapaste sería ya inevitable y bastante lamentable el tratar de huir en esta situación,pero ¿en verdad debo de ir?.

[....]—; Ya lo habíamos hablado Kaeya...es un encargo simple sabes que la mayoría confiamos en ti para ello, Espina Dragón no es para cualquier caballero después de todo..

[Claro..confiar y una mierda Jean,ambos sabemos que era la última opción de una bola de cobardes que se hacen llamar caballeros.]

—; Claro... Jajaja es siempre un placer el cooperar por el bien de la capital y el hacerle honores a mi título como capitán de los Caballeros Favonius.

[....]—; Sabía que podíamos contar con tu ayuda,es en verdad un alivio el que aceptaras esta misión.

— No dos palabras... Ni con suerte podría decir una que mediamos después de aquello donde fui tomado de la muñeca por la fémina que posteriormente me llevaría arrastras cual tapete que lavas y llevas de regreso a tu habitación pero esta vez no era habitación era su oficina misma en la cual recibí una charla enormemente larga de porque era nuevamente un alivio hiciera el trabajo ajeno y cuanta mierda más se pueda pronunciar...,siendo sinceros ¿entendí algo?,nah la verdad es que no tampoco dediqué mi tiempo a escucharle bien escuché aquello que quería “entrega esto al alquimista Albedo y te retiras por el resto del día”,[bueno podía verle el lado positivo a esto tenía día libre.]—

[Bien... Bien Kaeya,llegas al teletransport vas allá, entregas esto y te vas... Te vas...día libre....¡día libre!].

— Me regocijé pensando lo último que mejoró mi humor,haciéndome casi arrebatar de manera violenta la caja encomendada de las manos ajenas y obtener a cambio una mirada perpleja llena de confusión que sencillamente no me apetecía aclarar estaba más ocupado tomando rápidamente un abrigo para dirigirme a la salida correteando como un niño pequeño nuevamente que obtenía una buena noticia, no estaba demasiado ocupado ahora en no chocar con nadie si se metían en mi transitar bueno espero tuviesen la paciencia de levantarse al caer sobre su maldito trasero,bajar y bajar escalones de verdad estaba por hacerlo al modo animal subirme por paredes y bajar por ellas.. Pero no, mierda no tenía esos privilegios por una imagen que mantener unas cuantas pisadas más hasta sentir el pasto rozar mis botas llegaría al teletransport más cercano de la sede Favonius,me permití al fin tomar un dichoso descanso que mi cuerpo agradecía mayoritariamente mis pulmones que se hinchaban del aire que jalaba con bocanadas desesperadas hacia ellos pero sin olvidar también a mis pobres piernas que tambaleaban con leves espasmos ante el esfuerzo ejercido,¿entrenamiento?,¿gimnasio?,¿qué es eso?, solamente necesito subir y bajar esas escaleras todos los días... Jajaja, reí un poco de alivio obteniendo a cambio miradas juzgadoras de los presentes vaya actitud de mierda se cargan inclusive para llamarse habitantes de la ciudad nombrada “la ciudad de la libertad”, me encogí de hombros vamos hombre si les daba importancia menos horas de mi día libre tendría, rápidamente activé el teletransport para dirigirme a aquel sitio rezando casi con los dedos cruzados no sufriera aquellas típicas náuseas. —

❦[De las mil veces en que te amé.]❦ [Kaeya x Albedo]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora