CAPITULO 10

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NARRA SEVERUS

¡¿porque mierda nadie me dijo que el parto dolía tanto?!

Llevo tres putas horas con estos dolores, estoy sudando a montones y lo primero que me dice el maldito medimago es "cálmate" ¿Que me calme? ¡Que me calme! ¡Una mierda!.

Juro que si alguien me dice que me calme los mataré, estoy mi maldito cuarto. Está lleno de personas porque a los malditos de mis amigos no quieren dejarme solo o por lo menos eso dicen porque Lucius está desmayado en el suelo siendo atendido por las enfermeras, Barty se está burlando y está comiendo frente de mi sabiendo que no puedo comer nada por el parto. Regulus es el único aquí a mi lado dándome la mano sin importar si lo insulto o lo apretó, me dice frases que me motivan.

¿Porque no me enamore de él en vez de enamorarme del chucho de su hermano?.

Digo, si me pongo a pensar, Reg es más atento, más delicado, responsable, bueno con los niños y muy fuerte.

Ah pero no, a mi Omega le gusta sufrir por ese imbécil que nunca me ha querido y probablemente nunca me quiera.

Para las que se preguntan ¿Dónde está Harry y el abuelo? Bueno ellos están en el primer piso pues según el abuelo no quiere que yo le quiebre su mano o lo maldiga cómo lo estoy haciendo con Regulus en estos momentos. Además que a Harry aún es muy pequeño para entender lo que en realidad pasa.

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18 JODIDAS HORAS DE PARTO!!!!!
Quiero llorar pero estoy cansado para eso, las horas más dolorosas de mi vida. Horas dónde el maldito de Lucius se desmayaba cada que el medimago decía que ya casi salían porque si, tuve a mis hijas naturalmente y si que me dolió, Barty se quedó dormido pensando en como despertar a Lucius con alguna broma.

Dolía como el infierno y el que el medimago me diga que si no pujaba mis hijas morirían ahogadas me daba terror, lo único que me tenía cuerdo era como Regulus me daba ánimos.

- No puedo, me duele y casi no puedo respirar -mi voz sonó tan quebrada que todos me miraron con lástima-

-Claro que si puedes, eres el hombre más fuerte que he conocido, seras una gran madre. Tu puedes con esto y mucho más sevy. No te rindas ahora, no falta mucho -aprieta su mano tratando de darle animos a su mejor amigo-

Por esas palabras pude seguir pujando con los últimos alientos que tenía.

A las 2:15 nació Stella Marie Prince, una regordeta bebé de cabellos rubios cenizos, con excelentes pulmones pues sus llantos eran muy fuertes y aunque quería cargarla aún me falta otra bebé por parir.

A las 2: 55 nació Selene Mckenna Prince, una regordeta bebé de cabellos rubios cenizos que a comparación de su hermana solo lloro cuando nació y a los segundos se calmo.

Eran hermosas, demasiado y yo estaba feliz. Todo el esfuerzo fue recompensado cuando las tuve en mis brazos, son tan pequeñas y delicadas que me da hasta miedo tocarlas pero fue la mejor sensación del mundo; Reg el cual estaba a mi lado lloraba en silencio al verlas, se que mi Omega interior es muy sobre protector pero solo lo ignore y le ofrecí cargarlas lo cual acepto de inmediato, después de todo el me apoyo desde un inicio.

La escena era demasiado bonita que solo quería enfrascar la y guardarla, pero es paz fue interrumpida por mi abuelo y Harry los cuales entraban despacio.

-Mami!!-corre hacia su madre-

-hola mi amor -digo susurrando pues no quiero que las bebés lloren-

-mis hermanitas? -dice viendo casi con adoración a las bebés en los brazos se Regulus-

-Asi es campeón, son tus hermanitas ¿Las quieres ver? -dice Regulus al ver la emoción de Harry-

Mi pequeño solo asiente repetidas veces y se acerca.

-son hermosas papá, prometo cuidarlas y quererlas siempre!!-dice besando la frente de cada una-

Esto es demasiado para nuestros cochinos corazones, solo puedo decir que ahora mi felicidad está completa con mi hermosa familia.

Bienvenidas Stella y Selene a esta familia de locos.

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Ahhh que emoción ya nacieron las gemelas!!!!

- Espero que les haya gustado!!

Stefana D.S

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