Un Beso Efímero©

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CAPÍTULO 02 |MIRADAS EN LA CAFETERÍA.

Cuando las primeras horas de clases finalizaron, una de las cafetería, que tiene diez mesas de diez puestos y sus paredes están pintadas de blanco, azul y un gris  muy claro. Se inundó, y no de agua, de algo mucho peor, adolescentes hambrientos.

Dereck y Milo después de pasar por sus almuerzos, con las bandejas de comida en sus manos, se adentraron en la cafetería en busca de Natalia y Dustin, sus otros amigos. Por error los ojos del chico se detuvieron en la mesa del centro de la cafetería, donde se encontraba Tristan acompañado de otros compañeros, estaba con una manzana en la boca y la mirada fija en… ¿En Dereck?, sí, definitivamente estaba mirando a Dereck, pero al ser descubierto por este, frunció el entrecejo levemente y giró la mirada hacia las demás personas que estaban en la mesa con él.

—¿Qué fue eso? —murmuró muy lento, notando esa escena, y preguntándose a sí mismo, pero alcanzado a escuchar por Milo.

—¿Qué fue que?

—Nada. —Fue la respuesta de Dereck para luego empezar a caminar hacia la mesa donde estaban sus amigos.

Natalia es de cabellera liza y negra, de ojos color marrón oscuro, su tez es morena, sus labios rosados y carnoso, tiene una personalidad muy extrovertida y una sonrisa muy confiada, a diferencia de Dustin, él es más cerrado e introvertido, su cabello es ondulado de color rojo cobrizo, sus ojos azules con una mezcla de gris, una nariz recta, un rostro pecoso en el cual la mayoría de veces mantiene una expresión de pocos amigos.

—¡Dereck, mi amor...! —chillo Natalia, levantándose con rapidez y aplastando a el mencionado en un abrazo no sin antes esperar a que este colocará la bandeja en la mesa.

—Necesito respirar, Nati —bromeó Dereck fingiendo asfixia, causando que Dustin y Milo se rieran.

—Respiraras luego —antes de soltarlo le dio otro apretón y así al fin se vio liberado de los brazos de Natalia. El  siguiente en sufrir los fuertes abrazos de ella fue Milo y así finalmente todos ya estaban sentados, Milo al lado de Dustin y en frente Dereck al lado de Natalia.

—¿Y mi abrazó? —le cuestionó Milo a Dustin estirando los brazos hacia él.

—Ni siquiera lo pienses —respondió Dustin, en forma de advertencia, sin siquiera mirarlo.

—No seas aguafiestas, Dustin —exclamó Natalia, riendo y bebiendo una Coca-Cola.

—No me gustan los abrazos y lo saben.

—¿Lo dejarás con los brazos estirados? —Ese fue Dereck que trataba de no morirse de la risa.

—¿Quién no abrazaría a esa cosita tierna? —inquirió Natalia, mientras el pelinegro fingía puchero.

—Okey. —Miró a Dereck y a Natalia con un odio fingido—. Me las pagarán —amenaza girándose un poco sobre el lugar para mirar a Milo que aún seguía con los brazos en la misma posición, se acercó y lo abrazó. Fue recibido por los suaves y cálidos brazos de Milo.

—Hueles a fresas. Eso me gusta. —Le susurró Milo muy bajito a él que estaba siendo abrazado, colocándolo ligeramente nervioso. Era cierto que siempre bromeaban así desde que se conocen pero, entre broma y broma los sentimientos se asoman.