Capítulo 9: Existe la magia

76 33 3
                                    


Pov Carlos
Ya fuera de la biblioteca, salgo camino a la casa de Sharon y por suerte logro entrar fácil mente. Esta casa, es muy extraña, veo montañas de libros al igual que un salón grande vacío y un sin número de objetos antigüos.
Dejo de recorrer todo el lugar y comienzo con mi búsqueda de pistas de lo que sea que me pueda ayudar con el paradero de Sofía.
(…)
No se con sinceridad que hora es pero ya está oscureciendo y no he encontrado nada útil. Sé que es hora de irme pues no hay que ser genio ni detective para saber que pronto llegará.
Busco entre algunos de los libros y ví una carta con destino a Grecia. No sé si estará relacionada con Sofía pero decido intentar abrirla.
¿A caso es un familiar?
Al momento de escuchar el sonido de la puerta abriéndose me alarmo  dejo la carta donde, supongo que estaba, corrí a esconderme pero escuché la voz de la dueña del lugar.
—Sé que estas ahí… Carlos, así que, puedes salir— dice con el tono de voz alto para que la escuche.
¿Cómo lo supo?
—Niño, sal de dónde estés,  no me obligues a sacarte— habla nuevamente algo irritada— veo que eres alguien leal debido a tu lazo tan fuerte con Sofía. Puedes ayudarme además, en definitiva no eres enemigo.
Quedé confundido con sus palabras y consideré quedarme dónde estaba hasta que dijo: —Sé donde se encuentra Sofía.
Solo ahí salí de un salto y la mire. Sabía que tenía algo que ver.
—¿Dónde está mi amiga? ¿La secuestraste? — ella ignoro mis palabras y paso a sentarse.
—No seas infantil, tu amiga está en problemas — eso me asustó.
—¿Qué le pasa?— pregunté de inmediato.
—¿Crees en la magia?
Me parece absurda su pregunta pero no dudo en responder.
—¿Existe la magia?
—Claro que existe— responde como si fuese obvio —. Siéntate— me pide amablemente — ¿quieres té o algo? la historia es un poco larga y complicada.
Esto me inspira mucha desconfianza pero pienso seguirle el juego hasta ver dónde llegará— Té, por favor.
Luego de darme una taza de té caliente procedió a hablar.
—Debes saber, que la magia existe  desde hace miles de años en este mundo, como en otros…
Todo me fue contado hasta que me habló sobre un libro el cuál transportó a Sofía a otro mundo.
Yo no podía creerlo, mi amiga, en un libro.
También me explico, sobre los guardianes y su trabajo en este mundo, el cuál consiste en evitar que otros se apoderen de magia antigua y destruyan el mundo que conocemos acto seguido me hizo una pregunta:— ¿Quieres, tú, ser un guardián?
—Claro, mierda…por su puesto que sí.
Pensé que no servía para nada, que no haría nada especial pero, al parecer ese no es mi destino.
Me hizo hacer un juramento y de repente sentí un ardor en mi antebrazo derecho.
¿Qué coño?
Apareció un tatuaje negro en forma de un hermoso dragón.
Ahora eres uno de  nosotros, debes aprender a luchar. Vivirás para defender la magia y su equilibrio a lo que solo asentí frenéticamente gustoso.
Ponte al día aquí está todo sobre nosotros más tarde te enseñaré unas cuantas cosas pero ahora ya me tengo que ir, quedas en tu casa.
Pov Sharon
Quizás fue algo apresurado reclutar a este chico pero, no tengo opción ya están cerca, puedo sentirlo además él pasó la barrera en mi casa así que no era una amenaza, aún no doy con el paradero de Josefin tenía entendido que está en Grecia pero, le he mandado cartas y no responde.
Pov Desconocida
Decido ir yo misma a la casa de mi vieja amiga, Sharon y mi sorpresa es que no la encuentro a ella sino a un apuesto joven al cual le pregunto por ella.
—No tarda en llegar.
La idea de que posiblemente sea un reclutado por ella ronda en mi cabeza y se confirma cuando me percato de su tatuaje.
—¿Qué edad tienes?— se ve algo tenso por lo que evado la  pregunta— bueno, eso no importa. Puedo ver que eres nuevo en la orden.
Se da cuenta de que ví su marca por lo que la tapa  disimuladamente con su manga.
—Tranquilo, yo también soy una de las buenas— le muestro mi marca que baja por mi pecho hasta mi antebrazo— ¿Qué tal si nos  divertimos antes de que llegue nuestra amiga?
Me quito la chaqueta que llevo y lanzo un pequeño hechizo para que el chico tenga un ligero subidón de hormonas, lo cual no funciona.
—¿Qué pasa? ¿estoy perdiendo el toque?— digo en voz alta.
A lo que otra voz familiar responde mi pregunta.
—Nada de eso Josefin, el es gay— aclara— Mierda, que desperdicio— digo con decepción pero el se arma de valor y me enseña su dedo medio.
—Púdrete — solo me río.
—Tranquilo, no tengo nada en contra de tus gustos— volteo a ver a la mujer que en realidad si tiene mucho que explicar—. ¡Hola, Hola! Querida Sharon, cómo verás, estoy aquí porque recibí tus cartas pero, no podía responder así que aquí me tienes.
Pov Sharon.
—Tenemos problemas— me apresuro a decir —, una chica entro en el libro— Josefin se queda con la boca abierta.
—¿Cómo carajos permitiste eso?— pregunta exaltada.
—Sabes que todo el que lee ese libro si tiene deseos fuertes de vivir esa historia puede entrar en el.
—Esa es una maldita mentira inventada por seres que querían crear caos para que todos intentaran leer ese libro y así encontrarlo más rápido.
» Ese libro solo pueden entrar seres mágicos muy pero muy poderosos te lo resumo Sharon es más fácil sacar un demonio de ese libro a que una persona pueda entrar— sin duda puedo decir que ví una pizca de miedo en sus ojos—. La orden da el libro a una de sus mejores guardianas y no le dice la verdad.
»Si esa chica entro ahí, es más poderosa que cualquier mago si así lo desea, de lo contrario solo será una humana más.
Carlos lanza un grito ahogado.
—¿Dónde está el libro?— finaliza por fin.
—Aún está en esa biblioteca donde lo hechicé.
—Vamos por el, debemos movernos. Esto es más grave de lo que pensé, si los cazadores se apoderan de él y logran sacar a la chica del libro esto acabo ¿el chico sabe pelear?— no me respondió a eso —. Lanzare un hechizo que te ayudara con eso— indicó al chico — para que en tu mente puedas realizar combates y puedas aprender más  rápido.
—Súper— dice con una sonrisa.
—Niño, que no te maten en tus peleas mentales o morirás en la realidad.
—¿Qué? ¿Y si muero?
Se escucha el rechinar de unas llantas afuera del edificio a lo que rápidamente me asomó por la ventana y veo cuatro hombres salir de un coche negro.
—Hay que salir de aquí— dice Josefin.
Yo asiento.
—Vamos por las  escaleras— Digo en un susurro.
Salimos rápido y con cautela los tres pero en las escaleras ya nos esperaban dos de esos tipos a los cuales Josefin dejó paralizados por unos segundos mientras pasábamos a su lado.
Subimos a mi coche y  vamos directamente hacia la biblioteca.
Una vez allí fuimos por el libro Josefin hizo otro hechizo y casi un pasillo entero de libros se convirtió en un maletín.
Carlos hace un sonido de sorpresa— Que guay eso es la magia pero… ¿Y ahora que? A
—Grecia.

Espero les esté gustando la historia dejen sus comentarios y digan que tal les parece. Gracias.

El libro de elfos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora