𝐊𝐎𝐎𝐊𝐌𝐈𝐍| 《Park Jimin es el hijo de un chofer que ha pasado toda su vida perdidamente enamorado de Junghyun, el hijo menor de la rica familia Jeon y un apuesto playboy, que nunca se ha fijado en él. Después de tres años en París, cuando Jimin...
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Jimin
En la parte trasera de la mansión, la luz del patio estaba encendida y resplandeciente, sangrando en la oscuridad de la noche.
La amplia escalera de granito conducía a una sala de estar semicerrada, un largo espacio rectangular que albergaba una serie de tumbonas y plantas en pie, y una mesa de billar, junto con una hermosa vista de los establos colina abajo.
Allá arriba, la puerta mosquitera estaba abierta, como esperando pacientemente a que alguien entrara.
Jimin miró adentro y allí estaba, inclinado sobre la mesa de billar para intentar un tiro de esquina.
Con un aire de particular indiferencia, una bola roja atravesó la mesa de terciopelo y se hundió en el bolsillo superior izquierdo con un chasquido agudo. Junghyun era bueno en todo lo que hacía y se entregaba por completo a las cosas que le importaban.
Si tan solo le importaran un poco más las cosas que importaban.
"Tan fácil como siempre", se rió Jimin.
Junghyun levantó la vista de la mesa de repente, encontrándose con su mirada. Esa encantadora sonrisa iluminó su rostro.
Jimin se inclinó en la entrada, mirando exactamente a Junghyun que había sido el objeto de su fantasía durante la mayor parte de su vida: vistiendo una camiseta blanca suelta y un par de pantalones negros, con su cabello ondulado desordenado. Incluso así, Jimin lo había encontrado tan deslumbrante como cuando vestía sus característicos trajes personalizados.
Junghyun rió entre dientes, enderezándose. Ojos chispeantes. "Eh, estoy un poco oxidado".
Jimin sonrió. "Hola."
"Hola, Jimin-ah".
"¿Cómo te sientes?" preguntó, entrando en el solárium y aterrizando en el lado opuesto de la mesa de billar, trazando una mano sobre la superficie pulida.
"Estupendo. Curación rápida.”
"¿Estás seguro de que deberías estar caminando?"
"Dr. Jeong dice que me hará bien estar de pie por un tiempo. Los puntos salen el jueves. Junghyun sonrió con descaro, apoyándose en su palo de billar. “Taehyung dijo que fuiste con mi hermano a un desfile de modas”.
"No", se rió Jimin. “Solo para cenar. Indio. Nos sentamos en el suelo. Jungkook-ssi lo sudó, en su mayoría. Estaba seguro de que empezarían a cobrarnos por el agua del grifo”.
Junghyun soltó una carcajada. "Apuesto a que te ha estado ladrando los promedios del mercado de valores todo el día, ¿eh?" Levantó una ceja juguetona. "Bueno, todavía no puedo comer en el piso, pero estaré en buena forma para sacar a mi hermano de tu cabello en unos días".
Jimin tarareó, un poco más evasivo de lo que pretendía.
Junghyun lo tomó como un estímulo. "He estado pensando en ti." Caminó alrededor de la mesa, deteniéndose a un pie de distancia de Jimin. Apoyó una cadera contra la sólida mesa.
