Alai, ella es...

3

—Asthon

Me detuve en seco al oír mi nombre provenir de una femenina voz

Los ojos negros de Alai seguían fijos en los mios y me regalo una tímida sonrisa, la cual no fui capaz de corresponder

—¿Asthon Ranger?— volteo y veo a la persona que me llama

Maylen Boswell se acerca caminando tranquila por el pasillo, pude apreciar como su largo y rizado cabello rojo fuego se menea ligeramente por su andar, sus ojos grises me miraban fijamente, entre sus manos llevaba lo que parecía una tableta y de su hombro derecho colgaba su bolso. Se detuvo a un metro de distancia de mi y finalmente respondí

—Soy yo

—Oye Asthon, ¿Quería saber si estas libre esta semana?— no pude evitar que la sorpresa surcara mi rostro y al parecer ella lo notó ya que rapido prosiguió— Esque me tocó escribir el discurso de mi clase y el profesor me dijo que podía pedir ayuda a los demás chicos de otros cursos— explica algo tímida— y pensé que tú...ehh— subí una de mis cejas al ver cómo empezaba a dudar

—¿Te podría ayudar?

—Si, si no es mucha molestia

¿De verdad podría ayudarla cuando ni yo mismo puedo terminar el mio?

Pero si rechazo ayudarla, sería ser descortés y poco caballero con ella, y eso no le gustaría nada a mi madre

"Yo crié a un caballero, no a un patán"

Eso es lo que diría ella

—No es molestia Maylen, me complaceria ayudarte— una enorme sonrisa apareció en su boca dejando a la vista unos brackets con ligas rojas, que de cierta forma la hacían ver adorable

Sin siquiera esperarlo me abrazó durante unos segundos, y al separarse empezó a dar pequeños brincos en su lugar como una niña pequeña

—Muchas gracias Asthon — la sonrisa no desapareció en ningún momento de su rostro— ¿Te importaría que nos reunamos en tu casa?
Esque están remodelando la mía y nos estamos quedando en casa de mis tíos

—Por mi no hay problema— alzó los hombros restándole importancia— ¿Cuándo te gustaría que nos reunamos?

—Hoy si es posible, lo que sucede es que necesito muuucha ayuda

—Está bien, podemos irnos caminando si no te importa, mi casa queda a una cuadra de aquí— Maylen simplemente asiente con su cabeza y se posiciona a mi lado para empezar a caminar

Cuando volteo Alai ya no está, y en silencio salimos del instituto.

El camino a casa fue tranquilo, en un silencio para nada incómodo o almenos así lo sentía yo.
Por momentos sentía la mirada de Maylen y cuando yo le devolvía la mirada, ella volteaba veloz su cabeza hacia otro lado.

Decidí no darle importancia y simplemente seguí caminando en silencio a su lado.

Al llegar a casa, no veo el auto de mis padres por ningún lado, lo que significa que no están. Sin más, abrí la puerta y permito que Maylen pase primero y al momento de cruzar el umbral siento el sonido de la música provenir de la habitación de Johan

—Es el Neandertal de mi hermano— le explico al ver a la pelirroja mirando hacia la planta alta—descuida, él no nos molestará

Eso espero

Ella simplemente me sonrío

—Mi portátil está en mi habitación, si quieres puedo traerla aquí para que no te sientas incomoda y trabajamos en la sala