Muffin de Moras

123 17 2
                                    

(...)

Ahí estaba él, sentado frente a ella con visible emoción. Acomodaba su bajo preparándose para tocar una canción. Era común ver a Kotae con ese viejo bajo negro, lo amaba y era un experto tocándolo. Pero está vez sería diferente, pues la música no sería la protagonista.

Adelaida movía con emoción sus piernas, mientras esperaba sentada frente a él; observando cada pequeño movimiento con una mezcla de ilusión y admiración. Kotae afinó una última cuerda y sonrió.

-Está listo- afirmó y cerró los ojos. Abrió la boca y dejo salir aquella hermosa voz que tenía el chico, y que casi nadie conocía.

Kotae iba a cantarle una canción a Ada, pero no cualquier canción, sino su canción. Una que él había pasado días escribiendo para ella, su canción de heroína.

"𝑃𝑖𝑛𝑘 𝑏𝑢𝑡𝑡𝑒𝑟𝑓𝑙𝑖𝑒𝑠 𝑎𝑛𝑑 𝑛𝑜𝑤 𝑒𝑣𝑒𝑟𝑦𝑡ℎ𝑖𝑛𝑔 𝑛' 𝑒𝑣𝑒𝑟𝑦𝑜𝑛𝑒 𝑖𝑠 𝑠𝑎𝑣𝑒𝑑
𝐼 𝑤𝑜𝑛'𝑡 𝑏𝑎𝑐𝑘 𝑑𝑜𝑤𝑛, 𝐼'𝑚 𝑡ℎ𝑒 𝑏𝑢𝑡𝑡𝑒𝑟𝑓𝑙𝑦 ℎ𝑒𝑟𝑜 𝑦𝑎'𝑘𝑛𝑜𝑤
𝐼 𝑐𝑎𝑛 𝑚𝑎𝑛𝑖𝑓𝑒𝑠𝑡 𝑤ℎ𝑎𝑡𝑒𝑣𝑒𝑟 𝐼 𝑐𝑎𝑛 𝑡ℎ𝑖𝑛𝑘 𝑜𝑓
𝐼 𝑤𝑜𝑛'𝑡 𝑏𝑎𝑐𝑘 𝑑𝑜𝑤𝑛 ℎ𝑒𝑟𝑒'𝑠 𝑡ℎ𝑒 𝑏𝑢𝑡𝑡𝑒𝑟𝑓𝑙𝑦 ℎ𝑒𝑟𝑜 𝑦𝑎'𝑘𝑛𝑜𝑤"

(Esp: "Mariposas rosas y ahora todo y todos están a salvo,
No me voy a rendir, soy la heroína mariposa sabes?
Manifiesto todo en lo que pienso,
No voy a retroceder, soy la heroína mariposa sabes?")

Kotae tocaba cada nota a la perfección, y su voz era tan dulce como fuerte, tal y como él. Al menos ella lo veía así, con tanto cariño que no podía evitar llorar mientras escuchaba su canción.

Una última frase, una última nota y terminó la canción. El peliverde sostenía el instrumento como si hubiera terminado su concierto más importante.

-¿Te gustó?- preguntó a su mejor amiga y un siseó escapó de su boca.

-Claro que no- Ella negó con la cabeza y lo abrazó. -¡La ame!-

Kotae suspiró aliviado y correspondió el abrazo.

-Feliz cumpleaños Mariposa- dijo, sintiendo la paz de poder tener a su mejor amiga segura en sus brazos. -Te amo- susurró esto último esperando que no lo escuchará, pero si lo hizo.

La castaña solo sonrió en silencio y apretó el agarre, como respondiéndole "yo también". Ambos podían entenderse a la perfección, al fin y al cabo, eran como un hermano para el otro.

La risa de Kotae comenzó a hacerse distante y la escena se puso oscura y borrosa. Aún sentía el calor de su mejor amigo, en un abrazo, pero no como el de esa vez.

Kotae tosió mientras la abrazaba y sintió el sabor a metal escapar de su boca.

-Perdóname Mariposa- susurró mientras su cuerpo herido caía sobre el de ella. Finalmente, el nuevo Víper había perdido.

Ada tardó en reaccionar. Ya no estaba en el cuarto de Kotae escuchando la canción que le había compuesto como regalo. Estaba en medio de una guerra, poco después de descubrir que su mejor amigo la había traicionado y que el héroe que admiraba era un monstruo.

Pronto el ruido a su alrededor la hicieron despertar. Los tres grandes peleaban contra aquel Nomu, Burakku Mamba... Quién alguna vez fue Yūdoku Seikai.

-¡Adelaida!- aquella conocida voz le gritó -¡Vete, nosotros nos encargaremos!-

-¡Adelaida!- aquella conocida voz le gritó -¡Vete, nosotros nos encargaremos!-

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El rubio trataba de hacerla reaccionar mientras esquivaba un golpe. Pero no funcionó, solo hubo una voz que pudo encontrarla.

-Ada- exclamó con seriedad y fuerza la voz que amaba -¿Cuál es mi postre favorito?- preguntó el segundo de los tres grandes, el mismísimo Suneater. Y decidió levantar su voz con la pregunta más incoherente que pudo. Repitió -¿Cuál es mi postre favorito?-

Mirio y Nejire lo miraron sin entender la pregunta. Pero Ada lo hizo, ella sabía perfectamente lo que estaba diciendo.

Tamaki era una persona extraña, con un modo muy peculiar de ver el mundo y la vida. Al igual que Ada, que también tenía un modo algo extraño de ver el mundo.

Por alguna razón, la rareza de cada uno parecía complementar a la del otro. Entre ellos y su extraño modo de ser; habían logrado una conexión que parecía predestinada. Ada y Tamaki parecían tener un propio idioma que solo ellos comprendían, como dos almas gemelas que se habían entendido por eras.

-Muffin de moras- respondió Adelaida sin vacilar, recibiendo ella ahora las miradas confundidas de Mirio y Nejire. -Tu favorito es el muffin de moras-.

Ada lo recordó sin problemas, lo sabía a la perfección. El plan de Tamaki funcionaba, la mente de Ada se había despejado. Podía pensar con claridad nuevamente, podía usar su don.

Tamaki sonrió ligeramente mientras esquivaba un ataque.

-Vayanse- ordenó Tamaki -Mirio y yo nos encargaremos de esto- no la miraba, pero ella podía ver esa mirada de valentía en él- está vez puedes salvarlo- ambos sabían a qué se refería.

La heroína Ada afirmó en silencio, manifestó un trapo para detener la hemorragia de Kotae y se levantó. Esta vez lo salvaría.

-Confió en ti, Suneater- exclamó Ada con seguridad. Había vuelto a ser ella.

-Cuando esto termine,- respondió Amajiki -quiero probar otro de tus muffins de moras, yo...- se detuvo un segundo mientras manifestaba la coraza de un cangrejo en la mitad de su rostro -los amo-.

Ada lo miró en silencio, sabiendo perfectamente que había dicho, en su extraño y peculiar idioma. Sonrió una última vez y susurró.

-Y yo a ti- sabiendo en el fondo que él ya sabía su respuesta.

Ada y Nejire-chan salieron de ahí, en una carrera para salvar al traidor de la UA, al nuevo Víper, a Kotae...

Ada y Nejire-chan salieron de ahí, en una carrera para salvar al traidor de la UA, al nuevo Víper, a Kotae

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

(...)

🐙

BNHA_OC "La Mariposa y la Víbora"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora