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–¡DALE PATRICIA, TÚ PUEDES YO TE TENGO FE DALEEEE!– gritaba hyein de los angeles sentada desde las mesas de tenis con el teléfono en mano, apoyando a sus compañeras que jugaban basquetbol con los chamos del salón y unos de otra sección, hyein agitaba los brazos y el único amigo hombre que tenía la miraba con fastidio.

–deja la gritadera hyein de los angeles, me tienes aturdido.

–cállate diego, estoy apoyando a mis compañeras ¿no ves que tenemos que ser una promoción unida?

–que descarada eres, si eres la primerita en escribir por el grupo del guasap que la promoción es una mierda– bueno, cositas que pasan.

–detallitos– dijo agarrando el maso de cartas que tenía anteriormente en mano antes de empezar a gritar, viendo la carta de al frente y sonriendo con maldad para lanzar la carta que todo el mundo odia. –¡agárrate cuatro y uno de paso, rescata por bruja, bicho!

–maldita sea– exclamó arrecho el muchacho y tirando las cartas que tenía en mano, hyein riendo por eso. –ya no juego más contigo nojoda.

–pero no te piques mi amor vale, tú sabes que yo te quiero mucho y que eres mi panita más personal ¿verdad?– le decía mientras abrazaba al chamo con un solo brazo por los hombros y el mismo la miraba con cara de culo, finalmente riendo cuando hyein hizo una cara chistosa. –ahora dime qué me quieres o lloro.

–te quiero, luz caraballo– le respondió riendo y la chama se lanzó nuevamente a abrazarlo con fuerza mientras lo batuqueaba de aquí para allá y el chamo reía con ganas. –cuidado me aplastas una teta chica.

–ay si, cuidado don teton– le respondió soltando al muchacho mientras le metía un coñazo en el pecho, ahora los dos riendo con ganas mientras se metían coñazos en las piernas, amistad en base de arranques locos.

–¡HYEIN DE LOS ANGELEEES!– gritaba una chamita toda sudada caminando hacia los chamitos que dejaron de reír, la chama se acercó finalmente para apoyar una de sus manos en la rodilla del chamo y la otra en su propia rodilla tratando de agarrar aire. –¿estabas recorriendo todo el liceo o como es la vaina? llevo rato buscándote.

–que fue loca, yo estaba metida todo este tiempo acá ¿verdad, diego?– el chamo asintió y la otra chama solo suspiro entre arrechera y cansada.

–en esta verga todos son unas cuerdas de embusteros, de verdad... ¿tienen agua? tengo mucha sed por favor– pidió y el chamo le dió su pote, la caraja tomando de esa vaina como si nunca hubiera tomando agua en días naguará pobrecita. –gracias panita, eres un sol.

–¿para que me buscabas, emily? mi alma loca, toma que tienes toda la chemise bañada en sudor– le dijo dándole su suéter a la caraja que negaba pero hyein seguía insistiendo, verga es que esa chemise estaba fea para la foto oyó. –toma cabeza e' verga, tienes esa chemise sudada. 

–bueno ya que, gracias, mañana te la regreso– y la chama solo recibió un tranquila no hay peo por parte de los angeles. –ajá mira, que te vinieron a buscar.

–¿quien?

–que voy a estar sabiendo yo si me tenían en un corre corre por todo el mardiciento liceo– ah bueno hija. –anda vale.

–ya voooy– respondió con caliweba agarrando su morral y despidiéndose del chamo con beso en el cachete y un abrazo y bueno de la chama solo le dió unas palmaditas en el hombro. –chao emily, no me despido como es porque estás toda sudada, besos bebés cuídense ¡y me pasas todo lo que dieron en biología y castellano!

–¡ta bien, avísame cualquier cosa!– hyein solo le hizo una seña de okey con la mano y mando besos al aire al chamo que se los devolvía igualmente.

candela [newjeans & aespa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora