11. Una Fuerza Creciente

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Por primera vez en su vida  Haruchiyo Sanzu se preguntó si su hermana era una retrasada mental...O simplemente  era estúpida

Tenía que preocuparse de aquella duda existencial mientras observaba con incredulidad el actuar de su hermana con ese Omega

Era una mañana perfecta para el Beta mientras desayunaba en paz y tranquilidad  hasta  que llegó  su hermana prendida del Omega que pertenecía  a la ToMan y casi se atraganto con  su cereal de desayuno cuando por primera vez en su vida vió a Senju tomar los utensilios de cocina para preparar el desayuno con una confianza desbordante

Y mientras veía con incredulidad los movimientos  de su hermana quién trataba de demostrar su nulo conocimiento  en la cocina para deslumbrar al Omega, Sanzu pudo sentirse observado y lo odio

Porque en aquel preciso momento él  no portaba su mascarilla, y le desagradaba por completo que las personas vieran su rostro con aquellas cicatrices que tendría por el resto de su vida

-¡¿Qué mierda vez?!-Gruño Sanzu mientras observaba con fiereza a Takemichi todo su cuerpo en estado defensivo ante cualquier comentario hiriente

-¡Haru-ni no le hables así  a Takemitchy!-Gritó Senju enojada al instante mientras apuntaba con un cucharón a su hermano-Es un invitado, a los invitados se les trata bien-Advirtio mientras movía el utensilio de cocina de forma amenazante

-¡Él me estaba...-Decia Sanzu intentando explicar su arrebato del momento  a la salvaje de su hermana  más  pronto fue interumpido por Takemichi

-...Tú eres muy bonito. Sanzu-kun realmente pareces un ángel-Murmuro inconscientemente Takemichi sin tacto alguno provocando un silencio sepulcrar

Porque ambos hermanos estaban demasiado sorprendidos por las palabras del Omega

-¿Y-yo?-Pregunto  Sanzu mientras se señalaba asimismo incrédulo por la declaración del Omega

-¿E-él?-Murmuro Senju mientras señalaba a su hermano con cierta confusión, porque nadie nunca le había dicho algo remotamente agradable  a su hermano cuando le veían el rostro sin su mascarilla

Senju era muy consciente de que la sociedad veía  a su hermano como un adefesio como si aquella cicatriz fuera lo único que le definiera

-¿No lo creen así?-Pregunto  Takemichi con cierta confusión mientras ladeaba la cabeza ligeramente

Y no hubo respuesta del par de hermanos, porque por primera vez en su vida no supieron que decir

Sanzu se limitó a retomar su desayuno  porque entre más pronto se levantará del comedor podría huir de aquél par de ojos azules y Senju se concentró en evitar un incendio, su fuerte no era la cocina

Y Takemichi apenas lo iba a descubrir de primer mano...


Y Takemichi apenas lo iba a descubrir de primer mano

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Guerra Sin CuartelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora