メ4

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Volvieron a conducir , yuu miraba aquellas casas y todos esos edificios jamás podría saber en qué parte de la ciudad se encontraban ya que el no era de allí y menos sabía . Solo veía al rubio conducir

Le daba sueño el tener que estar tanto tiempo encerrado y temía que si preguntaba cuánto faltaba para llegar el otro le dijera algo. Mientras el mayor le miraba en silencio mostrando cansancio a través de su mirada , imaginaba que yuu no a tenido tiempo de descansar odiaba aquellos negocios dónde jugaban con la vida de las personas y es que si solo fueran adolecentes pero no , sabía que también habían niños — duerme un poco – le hablo cosa que le hizo sobre saltar en su lugar – aún falta por llegar

— ¿cuánto tiempo?

El rubio miro en su reloj ya era de madrugada y es que su casa quedaba en el sureste de la ciudad un lugar donde aparentemente todo era tranquilo y no tenía problemas con la policía — solo duérmete cuando lleguemos te llamaré

Simplemente asintió para acomodarse un poco en el asiento y en poco tiempo se quedo dormido, Mikaela le miraba dormir si que era lindo ahora se preguntaba si el haberle traído consigo era buena idea .

























Yuu estaba boca abierto al ver aquella casa frente a el , era realmente súper grande y se veía elegante, miro al rubio quien al ver aquellos ojos llenos de confusión y fascinación sonrió un poco — si es aquí donde vivo

— parece un castillo – exclamó

El simplemente suspiro , comenzó a caminar dentro y el le siguió solo que unos perros súper grandes con algo de naranja orejas puntiagudas y se veían súper bravos aparecieron se asustó obviamente los perros a los que estaba acostumbrado eran bien mansos otros no tanto pero estos se veían que si se acercaban te mataban con sus dientes filosos — tranquilo – miro al rubio quien se agachó para acariciar a los cinco caninos que se acercaron a ellos , estos con el parecían lindos cachorros mansos – no te aran daño no mientras esté contigo

— s-saben quien es su dueño eh jeje

— a los otros le dan miedo, no les gusta alimentarlos por qué son demasiados juguetones

— si por juguetones te refieres a que les intentan morder entonces creo que sí

— ¿eh? Pero si son mansos – el suspiro pesadamente okey , Mikaela no le agradaban los Omegas pero le gustaban esos perros aterradores – se llaman Rex , Zeus , colmillo, flama y Apolo – le explicó , miro a uno de los perros era más grande que los demás – rex es el líder de todo – menciono

El simplemente asintió, ya cuando el mayor despejó a sus perros le dijo que le siguiera a la casa , yuu estaba nervioso no sabía que es lo que iba a encontrar dentro y es que si el mayor tenía perros grandes que le garantizaba que no tenía una gran serpiente o un tigre viviendo dentro

Al entrar nada del otro mundo todo muy sofisticado y elegante , demasiado para su gusto , miro que habían muchos hombres de traje sentados en los sillones estos se levantaron para recibir al rubio — jefe bienvenido – exclamó un hombre de cabellos negros y ojos violetas.

Habia notado que todos eran alfas y betas ningún Omega , eso quería decir que el era el único Omega en medio de todos esos alfas! — y vino con una visita – exclamó otro igual peli negro pero de ojos rojos

— chicos les presento a Yūichirō Amane el estará con nosotros por un tiempo – les dijo a todos

Claro para el resto sería obvio que todos se mirarian a las caras ya sabían que su jefe no le gustaba los Omegas y que llevará uno les saco de lugar — Guren – llamo al de pelo violeta quien se acercó

— ¿si?

— ¿dónde está Shinya?– le pregunto

— el está limpiando el gimnasio – le comento este mientras miraba al Omega

— llámalo pídele que lleve a yuu a su nueva habitación pronto hablaré con el , y ve junto a René a mi oficina – termino de ordenar para marcharse dejando al pobre yuu en medio de todos ellos

— ven conmigo – hablo el de ojos morados mirando al de ojos verdes – te llevaré con Shinya para que te lleve a tu habitación

Solo asintió, y fue con el , ahora como que no le parecía mala idea volver a casa es decir allí sería la presa de todos esos Alfas , Mika no le iba a defender por siempre pero ahora que dijo que quería estar allí no podía retractarse

una coppia a prova di proiettile Donde viven las historias. Descúbrelo ahora