La música sonaba algo lejana, los pasos de ambos chicos se dejaban escuchar en aquel cómodo silencio. Apenas y podían reconocer bien que canción era, pero tenía una perfecta melodía que incluso les daba ganas de bailar a ambos, por más tonto que sonara.
Minutos atrás habían salido del restaurante en el que habían cenado tan a gusto. Esa noche era de esas especiales que sentías al mundo en tus manos y te sentías muy bien acompañado.
La música siguió sonando.
A Samuel le entraron las ganas de bailar y una sonrisa tonta se fue formando lentamente en su rostro a medida que avanzaba junto con Guillermo a un lado.
Ya era tarde, las calles estaban prácticamente solas, de vez en cuando podían ver pasar a una persona que también se dirigía a su casa. Samuel pensó que la idea que tenía no era tan mala, nadie más vería las tonterías que estaba a punto de hacer.
Comenzó a moverse de un lado a otro, más o menos al ritmo de la música y soltó unas risitas que llamaron la atención de Guillermo.
—¿Pero qué haces? —A Guillermo enseguida se le contagió la sonrisa al ver las tonterías que su compañero hacía. Samuel no dijo nada, se fue al centro de la calle y abandonó la banqueta, comenzó a girar y a dar pasos gráciles, como si de un bailarín profesional se tratase.
—¡Estoy bailando, Willy, estoy bailando! —exclamó Samuel como niño pequeño, tanto él como Guillermo comenzaron a reírse. Era gracioso para ellos, se divertían con las cosas más simples y eso a ambos les encantaba.
Guillermo siguió caminando por la banqueta, observando como Samuel seguía "bailando" como todo un experto.
—Da gracias que ya no hay nadie más que te vea, chaval, mira que estás haciendo el tonto —se burló Guillermo.
Samuel soltó unas carcajadas y dejó de bailar para ver directamente a los ojos a Guillermo, ambos estaban sonriendo.
Tampoco era momento para pensar mucho. Era momento de dejarse llevar.
Samuel extendió la mano en dirección a Guillermo, una clara invitación de que tomara su mano y bailara e hiciera el tonto con él.
—Ven, Willy, vamos a bailar. Baila conmigo.
—¿Pero qué dices? —Guillermo se quedó con una cara de fliparlo todo, aun así, estiró la mano hasta la de Samuel no muy convencido de lo que le estaba diciendo.
Cuando por fin tocaron sus manos, Samuel jaló a Guillermo del brazo hasta tenerlo pegado a sí mismo, pasó el brazo por la cintura de Guillermo y ambos comenzaron a bailar de nuevo junto con algunas risas por las tonterías que luego hacían.
—No eres nada malo bailando —dijo Guillermo, Samuel le dedicó una preciosa sonrisa que lo hipnotizó por completo.
—Tu también bailas bien, pero no presumas, niño.
Guillermo asintió y apoyó su cabeza en el hombro de Samuel.
—Somos tontos.
—Tontísimos que somos. Pero esto se queda solamente entre tú y yo.
—Nuestro secreto.
Ambos volvieron a reír y siguieron bailando un rato más.
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Buah! Tenía muchas ganas de escribir esto desde hace muchísimo tiempo xD es algo cuqui y lindo, conserva la magia de ese "algo" especial que se se siente por una persona, o al menos esa es la idea principal que tuve al escribir esto 7u7♥
Como siempre, esto fue inspiración por uno de mis queridos mejores amigos que me llevó afuera al aire libre a hacer el tonto y terminamos bailando en medio de la calle sin sentido :v x3
A mi me gusta explicar el porqué de mis escritos, así tienen más significado y de alguna manera le doy sabor(? nwnEn fin...
A quien se tomó el tiempo de leer esto gracias :3
~Hakumi
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Baila Conmigo | Wigetta | Drabble
Fiksi PenggemarQue importa si no eres el mejor haciendolo. . Que importa si haces el tonto. . Lo que importa, es que lo hagas con alguien que valga la pena.