Ella es capaz de causarte electricidad en tu piel con solo verla.
hacerte sentir que solo tiene ojos para ti.
¿que pasaría si la bruja más poderosa, está dañada?
¿cuánto puede dolerle la traición?
Aveces terminas confiando en quien menos pensabas.
y...
"....Oh, damn, never seen that color blue. Just think of the fun things we could do."
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🌒
La noche llegó a Nunca más, Ilena se la pasó decorando su mitad de cuarto, si bien sus gustos con la vampira eran muy similares, se diferenciaba bien que lado le pertenecia a quien. Ambas se conocieron, pero si bien Ilena era muy tajante y desconfiada al principio, Yoko sabia como manejar ese tipo de personalidad, logrando que se adaptara a ella.
Al parecer si bien ambas compartian el gusto por los clasicos del terror, los clasicos musicales del rock y gustos por los dulces acidos, tubieron un ligero choque por el peculiar refrigerador que la vampira tenia en donde ella mantenia su sangre. Yoko mantendria eso lejos de ella y la pelimorada le recompensaría con comida. trato justo para la dos.
Ahora Ilena estaba ordenando sus discos de vinilo y Yoko estaba recostada en su cama mientras le pasaba los discos.
-David Bowie, "The man who sold the world", un clasico chica.
La pelimorada le sonrie con diversión, la vampira estuvo asi con todos los discos, parecia niña en jugueteria.
la noche para la chica fue dificil, apenas pudo dormir, extrañaba su casa, su comodidad, pero se mentaliso que era un nuevo comienzo para ella, nuevas persona, otro hambiente, aprenderia cosas nuevas.
Un nuevo dia comenzaba para ella, Yoko la encaminó a su clase de esgrima, en la entrada se encontró con Merlina y su traje completamente negro, a la chica le gustaba mucho el estilo gotico de la Addams.
Las tres iban caminando de forma lenta hasta que Yoko se fue a posicionar a un lado de Enid, dejando a las dos adolecentes solas, ambas se quedaron analizando como todos se posicionaban para practicar.
Las dos se quedaron mirando una pareja en particular, uno de los dos fue derrotado facilmente por su contrincante.
- Entrenador, me hizo caer - se quejaba el alumno mientras se quitaba el casco dejando ver a un chico palido y de cabello castaño claro.
- Fue un golpe justo Rowan - le responde el entrenador.
- Si te quejaras menos y practicaras más, tal vez no serías tan malo -dice la chica que era su contrincante. Una morena de ojos celestes llamativos - En serio, ¿cuando tendré un oponente digno? ¿alguien más que quiera desafiarme?.
- Yo lo haré - dice Merlina.
Ilena la miró sorprendida, dandole su espada a la pelinegra.
