Argumento:
Ambos fueron invitados en la boda de su hermano siendo padrinos, no se conocían hasta que estaban en frente del altar.
Basto esa mirada gélida que le dio ese rubio para poder admirar lo hermoso que es, pero también la duda que surgió en e...
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- ¿Verdad que lo conoces papá?
Sasuke miro a su pequeño.
- Lo conozco.
Los ojitos de Waki brillaron al escuchar que si conocía a su príncipe hermoso.
- ¿Lo invitaras a pasar navidad? – Sé quedó viendo a su padre para saber qué es lo que decía - ¿Lo invitaras?
Sasuke no sabía que responder, era imposible poder contactar con ese rubio, pero, debía hacerlo por el bien de su pequeño.
- Waki – Pellizcó sus mejillas – Puede que tenga trabajo, es un Omega ocupado.
- Papá, por favor.
Si, esos ojitos que le puso el pequeño Waki fue una debilidad para Uchiha pero debía de pensar antes de actuar ya que la relación que ha tenido con Naruto no es muy estable.
Y más por haberlo lastimado, dejo salir un suspiro no debía de apresurar las cosas.
- Solo puedo decirte que – Waki estaba expectante a lo que decía su padre – Lo intentaré.
Una sonrisa se formó en los labios del pequeño, no era un sí pero tan poco era un no.
- Bueno vamos a cenar no quiero que te mal pases.
Asentó entusiasta el pequeño Kawaki que tomo de la mano a su padre y salieron para el comedor, viendo Tekka que bajaban se apresuró para que los alimentos estuvieran en la mesa.
Al llegar.
- Ya puedes servir.
Tekka tranquilamente sirvió viendo de reojo al pequeño que su corte de cabello era sin duda muy peculiar era extraño que solo la parte de abajo fuera rubio y arriba negro el extraño color de sus ojos con una marca en la mejilla.
Sasuke tomo su copa para degustar el buen vino viendo que el pequeño tomaba el zumo de frutas.
Esa noche pensaría muy bien lo que debía de hacer en los próximos meses para poder persuadir a cierto rubio Omega.
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- ¡No puede ser! – Movía la cabeza de un lado a otro - Este es el último vestuario debes de poner algo de entusiasmo.
La voz de Kiba se escuchó fuerte, lo cual vio a Gaara para que se acomodara nuevamente para sacar las fotografías que faltaban para completar para la revista que saldría en esos días.
