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CLARA

-Hola mi peque, ¿como estas? ¿Vamos a la calle?- le dije a mi perro llamado Chop

Admito que le puse Chop por el perro de Franklin en el GTA y porque es un Rottweiler.
Le puse la correa y el collar, es buena hora, 7:30AM, no creo que haga falta ponerle bozal.

-Vamos, Chop vamos- le dije para que saliera de la puerta al pasillo de mi piso.
Llevo viviendo en Barcelona unos meses ya que estoy estudiando, y pues me he traído a mi precioso perro porque es un amor, va a cumplir un año dentro de poco por eso es que es muy juguetón y la gente lo confunde con agresividad, le tengo que poner a veces bozal por eso lo de antes, y porque es un PPP.

En cuanto salgo del portal principal empiezo a estornudar, después de un rato me lloran los ojos y me está costando respirar, ya cansada intento volver a casa, de camino encuentro a un chico.

-Por favor- le digo mientras el perro me tira hacia él viendo mi situación.

-No, lo siento no puedo hacerme fotos llego tarde- dijo él mientras andaba más rápido.

Me paro en seco y pongo las palmas de mis manos en mis rodillas, el perro no para de ladrar haciendo que el chico se gire.

-Oye, ¿estás bien?- Dice viniendo hacía mi

-No, puedes llamar a emergencias siento que me falta aire- le digo con complicaciones. Ahora mismo no se quien es pero gracias por darte la vuelta. Le doy mi móvil tras contestar le.

-Vale, un momento- dice mientras pulsa el teclado del móvil en modo emergencia

Tras el amenazar unas cuantas veces porque no se daban prisa aparecieron.

-Gracias por llamar- Dice un técnico de emergencias de la ambulancia- por cierto el perro no nos lo podemos llevar, lo siento- escuche como decían eso a malas penas.

Espero que Chop este en buenas manos.

No Hay Mal Que Por Bien No Venga- Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora