18 de Junio [wenclair]

one chapter

Wednesday se encontraba sentada con sus manos tecleando en su máquina de escribir, pero por alguna razón no podía concentrarse, le faltaba algo.
Aquella estaba sintiendo la ausencia de la rubia

- Vamos, Dedos, dijo que regresaría en 1 hora, ya han pasado más de 4 horas y no puedo concentrarme

Dedos empezó a hacer señas intentando decirle "¿te preocupa?"

Wednesday frunció el ceño viendo lo qué Dedos intentaba decir
- ¿Qué estás diciendo?, ¿yo preocuparme por ella?, nunca, preferiría tener que vestir de colores antes que eso.

De pronto se escuchó una puerta abrirse, Wednesday miro de reojo y su mirada se dirigió a aquella rubia que estaba entrando, en cuanto entró aquella sala se inundó de la fragancia de vainilla que utilizaba en si misma.

- Llegas tarde, Sinclair- suspiré profundamente, mientras esperaba una respuesta de su parte

- Wella, perdóname- Exclamo la rubia juntando sus dos manos en forma de disculpa y con una cara de preocupación en su rostro-

-Ajax me pidió tener una cita hoy- Dijo la rubia cambiando rápidamente la expresión en su rostro a una que estallaba de alegría

Wednesday seguía escribiendo escuchando a la rubia, mientras en si, su corazón se sentía destrozado, sentía miles de tormentas en su ser.
- Me alegro por ti, Enid- Dijo con un frío tono- Es tarde ya, iré a dormir.
Se dirigió a su cama dejando que la rubia no respondiera lo que había dicho, no quería saber nada más de aquella cita, no le interesaba en lo más mínimo, ¿acaso era su psicóloga?.

El insomnio dominó en su ser, Wednesday estaba acostumbrada a este, pero esta vez se sentía diferente, este insomnio había sido causado por aquella rubia aunque le costaba admitirlo.

Wednesday se levantó de la cama, fue a su escritorio donde había dejado aquel celular que le había regalado Xavier, sus ojos se postraron directamente en la hora

[ 5:55]

- Joder- exclamó la azabache en silencio, no quería despertar a la rubia que se encontraba en un profundo sueño. En eso el celular de aquella sonó
una notificación había aparecido en la pantalla de bloqueo de esta.

-Tienes 1 mensaje sin abrir-
Ajax: Cariño, ¿todo está bien?, te fuiste sin despedirte y no supe en qué momento te habías marchado.

Wednesday leyó ese mensaje con confusión y enojo en si, ¿no se suponía que Ajax estaría cuidando de ella?. Ella siempre pensó en que Ajax no era el mejor partido para Enid, siempre la dejaba plantada, olvidaba sus aniversarios, incluso olvidó el propio cumpleaños de su novia.

Eso fue el colmo para Wednesday, se dejó llevar por la furia necesitaba pedirle una explicación a Enid de porque seguía aún ahí, ¿acaso era tonta?, ¿porqué no se alejaba?, miles de preguntas rodeaban en los pensamientos de aquella, hasta que por impulso levantó a Enid

Enid se levantó asustada, pensó que estaba pasando algo grave, encontró a Wednesday parada enfrente de ella con un enojo notorio en su rostro, esto a Enid le desconcertó completamente, ¿Porqué la azabache la había levantado a las 5:55 de la mañana?

- Tenemos que hablar, Enid- Exclamó con enojo en su voz aquella azabache.

- ¿De qué quieres hablar, Willa?- Con dificultad dijo entre bostezos Enid.

–¿Porqué no dejas al estupido de tu novio?- exclamó Wednesday casi gritando- ¿NO VES COMO TE TRATA?- Ella estaba furiosa, estaba lastimada, el enojo había traspasado la barrera de tranquilidad.

-Wella, cálmate, son las 5 de la madrugada, hay personas durmiendo aún- Exclamo la rubia intentado calmar a la chica que se encontraba consigo.

- Eres una tonta, Enid, créeme que lo eres, me prometiste que me entenderías, que estarías para mi, y sabes que gane?, gane solo la soledad de tu parte. Nunca pensé necesitar a una persona, pero dime
¿Quién estuvo ahí cuando te dejo en aquella cafetería a las 12 de noche sola y aún peor lloviendo?
¿Quien estuvo ahí cuando terminó contigo?
¿Quien estuvo ahí cuando tenían peleas?
¿DIME QUIEN ESTUVO AHÍ, ENID?- exclamó Wednesday con tono de tristeza y enojo

Enid no sabía formular las palabras en ese momento, jamás se había percatado que aquella siempre había estado a su lado, incluso en los días donde ni ella se podía mantener.

- Lo siento, Enid- suspiro la azabache mientras se dirigía a su escritorio, abrió el primer cajón de aquel y tomó varias cartas, las leyó por última vez antes de entregárselas a la rubia- Toma, he tomado la decisión de irme, quise decírtelo con anticipación pero cada que intentaba hablar contigo tenías compromisos con Ajax- Exclamo mientras guardaba todas sus pertenencias.

- Wednesday, no puedes hacerme esto, no puedes dejarme- su voz se empezaba a entrecortar, sus lágrimas empezaban a apreciarse en su rostro

Wednesday no quiso voltear a verla, no quería arrepentirse de la decisión que había tomado, sabía que si volteaba su mundo se vendría boca abajo con tan solo ver el mar de lágrimas de la rubia.
Termino de guardar sus cosas no se limitó a decir ninguna palabra, mientras que la rubia lloraba desconsoladamente y le suplicaba que se quedara

-Por favor, quédate solo esta noche, por favor- dijo intentado formular las palabras que salían de ella, estaba devastada, se arrepentía de si, ¿como es posible que haya dejado a la persona que más quería en este mundo sola?

-Cuídate, Enid- Dijo la azabache saliendo de aquella habitación.

En cuanto cerró la puerta de aquella habitación Enid se dejó caer derrumbada en la parte trasera llorando desconsoladamente y en la otra parte Wednesday derramando lágrimas.
Aquella rubia había ablandado su corazón, su ser, sus sentimientos y ella misma los había destruido.
Enid le había roto el corazón que ella misma construyó, había dejado ruinas en el, Wednesday se sentía tan estupida de haber confiado en alguien y que de nuevo la decepcionaran, no podía aguantar aquel dolor, quería escapar de todo, quería olvidarse de sí misma, quería estar sola.