SIMPLEMENTE... UN DESAHOGO - 14/05/22

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Antes de todo esto, yo no era nada más que alguien perdido, un ser que intentaba surgir de las profundidades donde tantas circunstancias lo llevaron a caer, y el primer día del año, como si fuera el primer día de mí vida, volviste y no entiendo por qué sentí que habías vuelto, si siempre supe que estabas conmigo, e incluso en la lejanía, sentía ese interés y aunque iban meses sin que tuviéramos el mínimo contacto, apareciste y sin notarlo, 16 semanas después, aquí estoy, perdido otra vez... Sin un rumbo fijo, solo el que había trazado junto a ti y me pregunto una y dos mil veces:

—¿Cómo es posible sentir la ausencia de un ser que jamás estuvo a tu lado?

Y me doy cuenta que es inevitable echar de menos aquellas frases un día redactadas con el tibio calor del amor, y que luego de un intercambio de percepciones y personajes ficticios, se conviertan en sólo memorias, simples recuerdos destacados en una aplicación telefónica, que te demuestra al no aparecer una información y una fotografía, que jamás volverás a recibir esas palabras de la protagonista de tus sentimientos, porque en tu mente, ella posee uno nuevo.

Es jodido dejar de pensar en el futuro cuando te ves acorralado, solo (por donde lo veas), y aunque vivas en compañía, lamentablemente, así te sientes, triste y sin poder echarle la culpa a nadie, ya que todo es tu culpa. Tus amigos se alejan de ti porque están hartos de las malas vibras que das en sus vidas al estar siempre triste y melancólico, pierdes a la persona que te devolvió tu alma por miedos, y sin poder pensar en tu familia, ya que desde un inicio jamás han estado y ahora, donde más falta te hace un abrazo, quién te lo ofrece, ni siquiera posee carne en su superficie, está hecha de tela y por las noches almaneca pequeños fragmentos de tus sueños, mostrándote una realidad paralela donde eres feliz con todas esas personas que perdiste, ya que esa variante tuya, sí hizo las cosas bien, y sin más... Al despertar vuelves y te encuentras nuevamente solo, recuerdas aquella canción tatuada hoy en tu antebrazo, lloras, te maldices a ti mismo, das los buenos días aunque sabes que no te responderán e intentas seguir adelante en esta realidad, la cual, te recuerda con cada pequeño minuto que transcurre, que todo lo que estás viviendo, no es nada más ni menos, que el principio de una vida llena de soledad, desgracias y arrepentimientos. 

PER L'AMORE DELLA MIA VITA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora