Demasiado salvaje.
Es una bestia.
Muy violento.
Omega defectuoso.
Shidou se había acostumbrado a escuchar estas palabras con más frecuencia de lo que el resto creía. Los tontos siempre hablaban a sus espaldas sin preocuparse por el volumen de sus voces, como si no supieran que él escuchaba perfectamente cada palabra que salía de sus bocas.
Cuando era pequeño, los chicos y chicas de su edad lo perseguían, alegando que se convertiría en un gran y fuerte alfa debido al leve aroma almizclado que emanaba de él. Su actitud violenta era vista como una parte de su instinto alfa y rara vez lo recriminaban por ello. Todo cambió cuando tenía quince años. Cuando se presentó como un omega de todas las cosas. Él había resultado ser un omega y todo fue diferente.
La mayoría de omegas en la sociedad eran pequeñas mierdas suaves que eran mimados desde la cuna y formados para encontrar un buen alfa que les permitiera seguir viviendo su vida acomodada. Aunque las cosas ya habían cambiado un poco y los omegas podían tener puestos más importantes en la sociedad, eso no significaba que la mentalidad de todos se mantuviera al ritmo de estos avances.
Los alfas seguían viendo a los omegas como una pareja para procrear y los omegas seguían prefiriendo una vida de lujos antes que esforzarse el doble para avanzar en la sociedad. La discriminación seguía siendo un problema que nadie intentaba detener.
Shidou comenzó a recibir más y más quejas sobre su comportamiento 'poco digno' de un omega. Decían que sus actitudes violentas y su comportamiento impulsivo le impedirían encontrar una pareja en el futuro. Obviamente, él se burló de todos los comentarios.
No iba a escuchar lo que decían. Si la sociedad no iba a aceptar que no era un omega convencional, entonces él no tenía por qué escuchar lo que decían.
Ya sabía que no era como los otros omegas. Mientras otro omega prefería hacer pilates, Shidou entrenaba desde el amanecer, corriendo afuera mientras escuchaba sus canciones favoritas. Luego hacía sus rutinas de entrenamiento, formando una capa de músculos que quitaban incluso más de su 'encanto omega'.
Los omegas generalmente odiaban la sensación del sudor en sus cuerpos, siempre prefiriendo estar aseados y bañados en aromas dulces y empalagosos. A Shidou le gustaba el aroma de su sudor, lo percibía como el fruto de su arduo trabajo. Incluso si otros detestaban eso.
A veces, salía por las tardes luego de la escuela para jugar con algunos tipos al futbol callejero. A los omegas les gustaba más ir a un café o a un centro comercial, pero no a él. Le había gustado el sentimiento de vencer a sus oponentes sin ayuda de nadie, solo confiando en su cuerpo entrenado para sobrepasar a los betas y a los tontos alfas.
Fue increíble, el fútbol era una salida para Shidou de esa tonta sociedad. Los tipos aquí ignoraban su casta a favor de obtener un buen compañero de juego para aplastar a los oponentes, y eso era estupendo.
Un día aburrido como cualquier otro, llegó a su casa después de un buen juego y encontró a su madre haciendo la cena, la mujer le dijo que había un sobre en la mesa que estaba destinado a él.
Ese fue el comienzo de todo.
Blue Lock era un lugar divertido al inicio, al maldito bastardo que los había encerrado aquí parecía importarle un pedo los segundos géneros de todos, solo quería crear al delantero perfecto. Aun así, había proporcionado algunos parches de olor para los que se sentían incómodos entre tantos aromas. También había algunas habitaciones especiales si algún omega entraba en su calor o si la rutina de un alfa golpeaba. Por supuesto, esto solo si decidían no tomar los supresores entregados.
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Then you came, and I didn't let go || RyuSae
FanficSiempre le trataron como a un bicho raro, era un omega, pero ¿qué parte de él lo parecía? No era delicado ni suave, todo lo contrario, era explosivo y casi salvaje, un omega defectuoso, era lo que todos decían de él. ABO Omega Shidou Ryusei/Alpha It...