SO FUCKIN' CUTE //KOOKV

25- I didn't want to lose you, but I did it

Taehyung se encontraba en casa de su abuela. Había pasado una semana desde que estaba allí, se sentía muy triste y de mal humor recordando las duras palabras de Jungkook.

—¿Te encuentras bien, Taetae? —preguntó su abuela viendo el estado de ánimo en el que se encontraba su nieto— Te ves decaído y casi no comes.

Taehyung miró a su abuela con un pequeño puchero en sus labios.

—¿Acaso es por ese muchacho? —dijo como si pudiera leer sus pensamientos.

No iba a mentirle a su abuela, quizá lo que necesitaba era que alguien le aconsejara.

—Sí, abu, es Jungkook —soltó triste.

Su abuela lo miró y tomó su mano, apretándola.

—¿Quieres hablar de eso?

Taehyung suspiró antes de responder.

—Me gusta mucho, abu, yo estoy enamorado de él y estoy seguro de que él siente lo mismo por mí, pero es demasiado terco y tonto para admitirlo —dijo enterrando su rostro en sus manos— Le confesé mis sentimientos y me rechazó, él prefirió a su novia antes que a mí, abandonando nuestra amistad de 5 años.

Las mejillas de Taehyung se estaban humedeciendo por las lágrimas.

—Luego yo lo besé y me comporté demasiado empalagoso con él —dijo omitiendo la parte del alcohol y las pastillas, obviamente— Él devolvió mis besos incluso después, no se opuso y se comportó tan lindo conmigo...pero está su novia.

Su abuela escuchaba cada palabra, buscando la mejor solución para el problema.

—Ella fue demasiado cruel, pero Jungkook no lo ve. Intenté alejarme, pero fui un desastre, me alejé de nuevo y creo que estoy peor. ¿Qué hago para que deje de doler?

—Taetae, Jungkook y tú han sido como hermanos toda la vida, es normal que para Jungkook sea extraño y no lo estoy defendiendo ni poniéndome de su lado —comenzó a decir su abuela— No son adolescentes ni mucho menos son niños y lo mejor que pueden hacer es hablar, afrontar el problema sin esquivarlo ni tratar de huir, eso solo lo empeorará.

—Es terco —soltó Taehyung.

—Habla con él, solo así acabarás con todas las dudas que tengas y lo más importante: sé honesto y no te dejes pisotear. Vales mucho, Taetae, Jungkook no es el único chico en el mundo.

Puede que no lo sea, pero es el único que yo quiero.

Golpes en la puerta dieron por terminada la conversación. Taehyung se levantó y fue abrir.

—Bebé, ¿podemos hablar?

Jungkook estaba parado en frente de él, se veía igual que Taehyung: triste y decaído, como si no hubiera dormido en días.

—¿Qué haces aquí? —preguntó Taehyung, sorprendido— ¿Cómo me encontraste?

—Eso no importa ahora. ¿Puedo pasar?

—No —soltó Taehyung a punto de cerrar la puerta, pero su abuela lo evitó y la abrió, invitando a Jungkook a pasar.

—Jungkook, cuánto tiempo —dijo la amable ancianita— Has crecido mucho, estás muy guapo.

Dicho eso, le guiñó el ojo a Taehyung, quien rodó sus ojos.

—La cena está casi lista, ¿por qué no te quedas a cenar?

Taehyung iba a protestar, pero Jungkook se adelantó a responder.

—Me encantaría, gracias, abu.

Jungkook sonrió sentándose en la mesa seguido de Taehyung, mientras que la abuela Sumi iba a la cocina a servir la cena.

—Deberías irte —dijo Taehyung con su mirada puesta en todo menos en Jungkook.

—Debería, pero no quiero. Taetae, tenemos que hablar.

Taehyung lo miró enojado, levantándose de la mesa.

—No tenemos nada de qué hablar. Te doy asco, Jungkook, tú mismo lo dijiste, así que vete con Eunha. Al final la escogiste a ella, ¿no?

Taehyung se alejó dirigiéndose a su habitación y dejando a Jungkook con las palabras en la boca.

—¿Necesitas un consejo? —habló la abuelita Sumi mirando a Jungkook.

Ella lo conocía desde que ambos chicos se hicieron amigos. Sumi sentía a Jungkook como otro nieto, le tenía mucho cariño y verlo triste y peleado con Taehyung le rompía el corazón.

—Solo quería decirle que lo amo y que me perdonara por haber sido tan idiota y no haberme dado cuenta antes —soltó Jungkook triste y enojado.

Sumi se acercó a él, acariciando su espalda. Jungkook estaba confundido, eso lo entendía, pero se había dado cuenta de su error y lo estaba admitiendo, ahora faltaba que Taehyung lo escuchara.

—Jungkook, te aprecio mucho, creo que eres una persona muy especial para mi nieto, ¿pero sabes qué pienso? Que debes dejas atrás todos tus miedos y dejar que las cosas pasen —aconsejó— Tú y Taetae se ven adorables juntos y se aman mutuamente, lo que tienes que hacer es decírselo sin miedo, sacar todo de aquí —Sumi señaló su corazón y le indicó con la mano que fuera a buscar a Taehyung.

Ellos no deberían estar peleados.

—Repara su corazón, Jungkook, Taehyung ha estado muy roto y solo necesita que seas sincero y no lo sigas lastimando con tus dudas de si esto está bien o no lo está. Se aman y eso es lo único que importa —Sumi sonrió y Jungkook no pudo evitar sonreír igual.

La abuela Sumi tiene razón. No tiene que tener miedo de lo que está bien y lo que está mal. Fueron amigos, fueron hermanos. ¿Qué tiene de malo que quiera ser algo más de Taehyung?

—Gracias, abu, no tendré miedo, seré honesto con mis sentimientos y prometo no ponerlos nunca más en duda. Ya todo está claro.

Y fue en busca de Taehyung.

No lo volvería a arruinar.