[+18]┊𝖨 𝖼𝗁𝖺𝗇𝗀𝖾 𝖿𝗈𝗋 𝖸✦𝖴

𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 7.

Estaban pasando demasiadas cosas por su cabeza, Felix estaba entre ellas, pero no quería decir cómo se sentía con respecto a ese tema, a no ser...

— Tú también tienes algo que decir, habla ahora — Christopher soltó después de un tiempo.

Hyunjin solo suspiró, entre sus tres amigos Christopher era el más consciente y confiable, entonces podría pedirle un consejo o simplemente dejar que Christopher lo escuchara y ya.

— Es sobre Felix... Hay algo en él, su pasado... Siento que pasó por algo realmente fuerte, soy un hijo de puta, pero no tanto...

— ¿Felix te dijo eso?

— Lo hizo, le pedí que me contara, pude ver el dolor en sus ojos, entonces me dijo que algún día me lo contará, pero eso será después, cuando lo haya superado del todo... Es una mierda todo, odio las jodidas apuestas de MinHo — suspiró.

Christopher se mantuvo en silencio, analizando todo, luego asintió.

— Puedes mandar a la mierda a MinHo y a su jodida apuesta. Sí, admito que también estuve de acuerdo en que la hicieras, pero al menos entre ustedes tres soy el que tiene más consciencia y sabe que algunas cosas están mal. Desde que eligieron a Felix se los hice saber, nadie me hizo caso y por tus pelotas aceptaste esa mierda. Hyunjin, ya no necesitas mala reputación, ya la tienes y es peor a la de todos nosotros, si lo haces por eso, olvídalo, ya todos en la escuela te temen.

— No puedo perder ante MinHo, lo sabes, y mi reputación no me importa, todos me tienen miedo y eso me gusta, así lo hago por ello. Es solo que MinHo sé que no metió a mi cabeza, jugando con todo hasta que logró la forma de que aceptara.

— Pero también lo haces por el dinero y por la prima de MinHo ¿No es así? — Christopher, rio irónico.— Prefieres joder a un chico inocente que ha pasado por cosas horribles anteriormente solo para tener dinero y un culo a tu lado, sí, se me olvida que hablo con Hwang Hyunjin...

Hyunjin no dijo nada más, no terminaba la apuesta, por eso, de hecho, desde que comenzó su plan, aquellos "trofeos" Quedaron atrás, ni siquiera se acordaba de ello, simplemente no...

...

Felix salió del aula, era el último como siempre. El profesor le agradeció con una sonrisa, dejándolo ir. Le sonrió, agitando su manita en el aire para pronto alejarse del aula.

Como todos los días ayudó a limpiar el pizarrón, incluso ayudó a su profesor a calificar las tareas de algunos de sus compañeros, así al día siguiente el profesor podría entregar las libretas con todo ya calificado.

Felix dobló por un pasillo, ahora le tocaba bajar las escaleras para salir de la escuela. Esta era muy grande, contaba con dos pisos y en algunas clases tenían que cambiar de aulas, en esta ocasión su clase de arte había sido en el segundo piso, en el taller de arte, donde primero estudiaban un poco de la historia del arte para luego pintar o dibujar. En esa ocasión solo había sido de teoría, el maestro les dejó una pequeña tarea y por eso Felix lo ayudó.

Terminó de bajar el último escalón, dando un pequeño salto al bajar, tal vez era un poco infantil de su parte, pero le divertía sentirse así de libre y feliz. Siguió caminando, pero una mano en su boca lo había detenido, alguien lo sujeto de su cintura, tirando de él hasta la pequeña bodega de limpieza.

Felix intentó zafarse, pero le era imposible, el otro chico era más fuerte que él. La puerta se cerró con fuerza para él ser empujado. Todo estaba oscuro, no podía ver a la otra persona, pero ese aroma lo conocía.

— Déjame salir, Ki-bum — demandó con molestia y puños apretados.

— No hasta que me escuches.

Ki-bum encendió la lámpara del lugar. Felix lo miró con molestia, tenía miedo, pero quería escapar, odiaba los lugares pequeños.

— Tengo que decirte algo de Hwang.

— No quiero escucharte, deja de interponerte entre Hyunjin y yo. Tú y yo no somos nada, perdón por lo que diré, pero nunca seremos nada, no tienes derecho para hacerme esto.

Ki-bum lo miraba con un labio atrapado por sus dientes, parecía molesto y triste a la vez.

— ¡Esto es importante! Estás siendo engañado — gritó.

Felix se quedó en silencio, mirando a los ojos de Ki-bum, los de Felix se aguaron sin dejar de mirar los del otro. Este sonrió un poco, al fin Felix entendía.

— No puedo creerlo... — dijo con voz dolida. Una de las manos del contrario llegó hasta su rostro.

Ki-bum se acercó, bajando su tono de voz, intentando abrazarlo para consolarlo, pero Felix lo empujó lejos.

— No puedo creer que seas así — lo miró con ojos rojos. — Eres una persona horrible, no puedo creer que inventes estas cosas, sé que odias a Hyunjin, pero ¿Decir que me está engañando? No somos novios, somos amigos, no puedes decir estas cosas como si nada.

— Es verdad Felix, Hyunjin te está engañando, yo los escuché, estaban hablando de Changbin, luego de Minho y por último de ti, también mencionaron a una prima de... — no terminó de hablar.

Felix lo había empujado con todas sus fuerzas, Ki-bum retrocedió hasta caer de espaldas, abriendo la puerta con fuerza, casi rompiéndola. Felix tomó su mochila que se había caído de su hombro, miró una última vez al chico para alejarse de ahí a pasos rápidos.

Corrió por el pasillo hacia la salida, sus ojos estaban nuevamente inundados en lágrimas, cegando su vista. Intentó parar de correr ante la sombra que se formó en su opaca vista, pero era tarde, había caído, llevándose a la otra persona al suelo con él.

— Felix.

Su voz pasó como una corriente eléctrica por todo su cuerpo. Hyunjin lo tomaba de su cintura, Felix estaba encima de él llorando en su pecho en cuanto escuchó su nombre salir de los labios de Hyunjin. El rubio buscó un espacio en el cuello de Hyunjin para enterrar su rostro ahí y llorar sin importarle que estaban en medio del pasillo, ambos en el piso.

— Los ayudaré —otra voz sonó a sus espaldas.

Felix pronto sintió como unas manos grandes y fuertes lo tomaban de sus brazos, ayudándolo a él y a Hyunjin a levantar. El rubio no se soltó de Hyunjin por ningún momento.

— Tranquilo, ambos están bien, ya no llores — el chico volvió a hablar. — Ve a casa Christopher, yo me haré cargo de Felix.

El moreno asintió para el pálido, alejándose del lugar. Seguramente MinHo y Changbin lo estaban esperando fuera de la escuela.

Felix de a poco salió de su escondite, mirando el rostro del mayor con ojitos empañados en lágrimas. Hyunjin suspiró un poco, llevando una de sus manos a sus ojos, limpiando estos con cuidado, haciendo al menor suspirar un poco más tranquilo.

Capitulo 8 | 4 de febrero.