Second Love / Jenlisa

Prólogo

Jennie

"Oh, Ella, si quieres salir, por favor espera hasta que regrese tu papá", Insisto, sosteniendo mi barriga mientras golpea otra contracción de Braxton Hicks. Agarro la cómoda y trato de respirar a través de ella. Parece que vienen con más frecuencia.

Una vez que pasa, trato de terminar lo que vine a buscar. Taehyung está fuera, pero quiero que la guardería esté lista para que podamos disfrutar de las próximas semanas una vez que regrese. Camino por lo que será su habitación, poniendo algunos vestidos rosados más en los cajones. Taehyung y yo hemos peleado por la gran variedad de cosas rosadas que ahora están esparcidas por la casa; él las odia, yo las amo.

Insistió en que pintáramos su habitación de camuflaje. ¿Camuflaje marrón, verde y negro para una niña? No. Casi me pongo de parto con ese argumento. Llegué a casa y él y Kai lo estaban dibujando en las paredes. Lancé varios artículos para el hogar a Kai mientras lo echaba de la casa. Mi esposo descubrió poco después cuánto podía sufrir por mis manos. Puede que no sea un SEAL, pero tampoco te metas conmigo. Al final, gané con las paredes rosadas y la malla transparente alrededor de su cuna blanca.

"A papá le va a encantar esta habitación, Ella. No puedo esperar a ver su rostro cuando vea las lindas mariposas". Necesitando tomar otro descanso, me siento en la mecedora y me froto el estómago. Me tranquiliza saber que ella está ahí. Puedo protegerla, es mi trabajo. Me encanta estar embarazada y es un milagro que pudimos concebirla. Ya le dije a Taehyung que quiero probar con otro tan pronto como nazca. Cierro los ojos y me hundo, permitiendo que el mundo se desvanezca.

Me la imagino sosteniéndola en mis brazos, sentada aquí en esta silla, calmándola y besándola. Me imagino a Taehyung con ella dormida sobre su pecho mientras escucha los latidos de su corazón. Ella será dueña de su mundo y lo tendrá envuelto alrededor de su dedo.

Toc, toc, toc,

Oigo la puerta, pero tardo unos segundos en levantarme de la silla.

TOC, TOC, TOC.

Golpean más fuerte esta vez.

"Voy!" le grito a la puerta. Dios, dame un segundo.

Caminar hacia la puerta me toma un minuto ya que soy del tamaño de una ballena.

Abro la puerta y veo a Kai, el jefe y amigo cercano de Taehyung. Trabaja en Cole Security Forces con Taehyung y sirvió con él durante años. Su cabeza cuelga baja y cuando mira hacia arriba, sus ojos están llenos de tristeza.

"¿Qué ocurre?"

"Jen", se atraganta con la única sílaba de mi nombre. El que usa Taehyung. Definitivamente algo no está bien.

"¿Qué pasó?" Pregunto de nuevo cuando empiezo a temblar.

Las lágrimas llenan sus ojos y lo sé. Sé que mi vida nunca va a ser la misma. Sé que todo lo que siempre he temido está a punto de hacerse realidad porque Kai no llora. Kai no estaría en mi puerta si algo no estuviera muy, muy mal. "Es Taehyung".

Mi corazón deja de latir y el mundo en el que vivo deja de existir. "No lo hagas" le pido con lágrimas nublando mi visión y mi respiración acelerándose.

Esto no puede estar pasando.

"Por favor, no lo hagas, Kai. Por favor" le suplico de nuevo, porque una vez que lo dice... pero sé que es inútil. No importa porque no puede detenerlo. Ya pasó.

"Jennie, lo siento mucho".

Las temidas palabras que toda esposa militar teme. Solo que se suponía que no tenía que preocuparme más por esto. habíamos terminado. salimos Se suponía que nunca más temería esto.

Por favor, Dios, no me lo quites. ¡Por favor!

"Pero, estoy e-embarazada. Voy a tener un bebé" balbuceo como si eso de alguna manera hiciera que nada de esto fuera real. Dijo que volvería. Él dijo que él..." Me desvanezco cuando se vuelve difícil respirar. Mi mano vuela a mi boca para realidad porque Kai no llora. Kai no estaría en mi puerta si algo no estuviera muy, muy mal. "Es Taehyung".

Mi corazón deja de latir y el mundo en el que vivo deja de existir. "No lo hagas" le pido con lágrimas nublando mi visión y mi respiración acelerándose.

Esto no puede estar pasando.

"Fue un IED. Lo siento", dice Kai mientras sus ojos brillan con lágrimas contenidas.

Me caigo.

Pero él está ahí, acunándome en sus brazos. "Lo siento tanto".

"No. No no. Kai estás mintiendo" siseo, arrancándome de su abrazo.

"Ojalá lo fuera", dice mientras lucho por levantarme.

"Fue un error. Él está teniendo un bebé. ¡Dijo que era un simple entrar y salir!" Grito y lanzo mis manos contra su pecho. "¡Estás mintiendo!" Grito, aun sabiendo que no es mentira.

"Lo siento."

"¡Deja de decir que lo sientes!" Mi pena se convierte en odio. Lo odio. Odio a todos en este momento. Odio a Taehyung y a todos los que estaban alli. Odio esta casa y todo lo que hay en ella. Odio el aire que ya no respira. El odio me consume. El odio me asfixia. "¡Sal!" Grito y empujo contra su pecho. "¡Vete a la mierda de mi casa! Taehyung regresará en unos días y luego nos prepararemos para que nazca nuestra hija".

"Por favor", suplica Kai y me niego a mirarlo.

Esto no sucede porque Taehyung esté vivo.

Él no está muerto. ¿Cómo se atreve Kai a mentirme?

"Él estará de vuelta. Él no me dejaría. El lo prometió". Taehyung no me mentiría. Él nunca lo hace, Cuando se iba a las misiones, siempre se despedia como si fuera el último. Pero esta vez besó la punta de mi nariz y dijo "Ahora no tengas ese bebé hasta que yo regrese".

"¿Puedo llamar a alguien? ¿Tu mama?"

"No, no puedes llamar a nadie porque no está muerto! ¡Ve a buscarlo, Kai! Ve a buscar a mi esposo y tráelo a casa". Doy un paso atrás señalándolo con el dedo. "Todos ustedes lo prometieron. Él prometió." Me agarro el estómago mientras un dolor agudo irradia, pero no es nada comparado con la agonía que se sienta en mi pecho. Las lágrimas fluyen implacablemente mientras lucho contra su agarre. "Él prometió."

"Sé que lo hizo", dice Kai mientras sostiene mi cabeza contra su pecho.

"Él mintió."

Mi vida se ha ido.

Mi corazón está muerto.

Soy viuda a los veintisiete.

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Mañana subiré el primer capítulo.