Orbit [Bajoterra AU]

3

—No puedo creer que nadie me crea —Murmuro el Shane mientras jugaba con una pelota dentro de su habitacion, rebotandola contra la pared más cercana a donde estaba. Si no fuera por su reloj, no se habría dado cuenta que ya era bastante tarde. El chico estaba sentado en un puff cerca de la ventana.

Observo el exterior, la luz del sol era engañosa referente al tiempo y las dos lunas ya se asomaban dando a lugar a lo que seria la noche. Algo que no paraba de amar de aquel lugar era que gracias a la ausencia de grandes ciudades la luz de las estrellas adornando el cielo era algo que casi ya no se veia en la tierra. Aunque tambien admitia que la oscuridad que podia abordar el planeta era ciertamente aterrador.

Escucho la puerta abrirse, Kord entro en su habitación— ¿Todo bien amigo?

—Si te refieres a perderte la diversion de explorar un planeta del cual se tiene poco conocimiento a pesar de estar casi 16 años estudiandolo, si, estoy muy bien confinado en esta habitación lejos de la diversión.

—Sabes que Junjie se toma muy en serio la seguridad de todos a la hora de explorar, no puedes ignorar ese hecho.

—Nunca dije que le llevo la contraria a la desición de Junjie, lo entiendo, sólo me molesta que me tomen de mentiroso.

—Eli sabes que es difícil que te creamos ¿no? —Recordó Kord el gran disparate que dijo el Shane ante su equipo.

—¡Te digo que la vi! ¡Ella estaba ahí observandonos y cuando me vio, huyó! —Insistió nuevamente en el tema levantandose de golpe— Me gustaría saber a dónde se fue —Agrego en un murmuro.

—¿"Ella"? ¿Ahora es un ella? ¿Cómo sabes eso?

—Algo me dice que lo es.

—Lo siento Eli, pero ahora a mi también me cuesta creerte.

Kord se dispuso a darse la vuelta para retirarse, Eli se volvió a recostar de mala gana en su puff y retomó aquel juego que tenia con su pelota, el de mayor tamaño ya en el marco de la puerta, volvió a hablar— Hay un traje listo si quieres salir. Si tanto quieres demostrar lo que viste, tómalo. Pero conste que esto no lo supiste de mi.

Tras decir aquello, se retiro, Eli sin dirigirle la mirada en algún momento al gran hombre azul, sonrió y se levantó de su cama.

En teoría, era más de las 2 de la mañana, casi todos en la estación estaban durmiendo y sólo quedaban los guardias de turno. Eli conocía bien las rutas y puntos de vigilancia, por ende no se le dificultó llegar al sitio que le había comentado Kord. Rápidamente se lo puso y tomó un sable de plasma junto a una pistola del mismo material, por último se aseguro de llevar su cámara, si al menos se iba a meter en problemas por esto, iba a llevar pruebas. Abrió las compuertas y salió en dirección donde anteriormente había visto a la supuesta alien.

No podía tomar algún vehículo, asi que se dispuso a ir a pie, el oxígeno era suficiente para explorar en una radio de no más de 20 kilometros sin correr algún riesgo. Ni bien llego al lugar logro localizar sus propias huellas, se dirigió al lugar donde vio la criatura, pero para su sorpresa no logro ver alguna huella o señal de la presencia de esta. Regreso al cráter buscando alguna otra señal pero tampoco logro ver algo.

—¿Será verdad que no vi nada? —Se pregunto a si mismo al no lograr ver alguna pista— no, estoy seguro que la vi, debe haber alguna prueba por algún lado, una pisada o una marca.

Siguió buscando a sus alrededores, adentrándose cada vez más en el punto muerto, pero mientras más estaba en el lugar sentía como alguien le miraba, por no querer ahuyentar aquella precencia siguió en su busqueda, pero reduciendo su campo de exploración. Entre unas rocas logró ver una luz, pensó en un principio que podría tratarse de algún reflejo de su traje o alguna estrella, pero conforme se fue acercando descubrio que aquella luz provenia del mismo lugar.

Entre las rocas consiguió una especie de aro similar a una pulsera pero igual de delgado que un arete, era blanco pero irradiaba una luz fuscia, casi violeta.

—Que curioso —Murmuro, recordó ver algo similar cuando vio a la supuesta alien, de hecho el brillo fue lo que permitio verla en primer lugar. Debido a la ausencia de gravedad el aro flotaba en la mano del Shane permitiendo juguetear con el, divirtiendolo en el proceso.

Miro a su alrededor, según sus ojos él estaba solo, pero su instinto decía que no.

—¿Es tuyo, no? —Le hablo a la nada, esperando alguna respuesta— No te haré daño, sólo quiero conocerte ¿Dejaras que yo mismo te lo devuelva?

No sabia si realmente alguien le escuchara, a fin de cuentas, en el espacio no hay sonido y su voz sólo podía oírla el mismo dentro de su casco. Sin embargo, sintió como alguien estaba detrás de él, pero no se movio, su corazón empezo a latir por la adrenalina, trato de mantenerse lo más calmado posible.

—¿Puedo verte? —Finalmente habló el chico tras unos segundos de completo silencio, aquel ser pareció alejarse unos centímetros al percibir movimiento, pero no se retiro, Eli no supo si captar aquello como un si o un no.

Lentamente se volteo y finalmente la vio, aunque en parte se asombro, otra parte se decepciono al no ver exactamente a aquel ser, más si un traje bastante liviano, el casco/máscara que usaba evitaba que viera su rostro, aunque un par de coletas capto su atención, una de las coletas tenia un aro similar al que tenia en su mano mientras que la otra no.

La criatura le extendió su mano, ahora que la analizaba mejor lucia muy humana, 5 dedos logro contar, descartó la opción de que fuera otra astronauta ya que no estaba tocando el piso. Eli se quedó paralizado unos momentos hasta que pudo extender su mano con el aro para devolverselo. La alien lo tomó y sin apartar su mirada del astronauta colocó el aro en su coleta, dispuesta a marcharse, aunque vaciló. Era la primera vez que estaba tan cerca de aquellos seres con trajes blancos estúpidamente complejos y auscentes de algo que conociera o hiciese familiar.

Eli quiso hablar pero cuando la vio retroceder se alarmo— ¡Espera! ¡No te vayas —Pidio el chico, pero sólo logro asustarla más.

La alien a paso veloz se retiro, pero Eli no quería perderla nuevamente ¡olvido tomarle una foto! Su única evidencia se estaba yendo a gran velocidad lejos de él, otra vez.

Volvió a seguirla, esta vez tratando de no perderla, observo como sus zapatos permitian obtenener más velocidad conforme avanzaba, Eli tomo su pistola y salto dándose la vuelta disparando tras de él, el retroseso del arma le dio a favor el poder avanzar con más facilidad.

Bueno, demasiada facilidad.

Si bien su idea fue correcta, no pensó que la fuerza del disparo lo mandara directo sobre la alien, ambos por el impacto fueron llevados hacia un crater y se adentraron en él cayendo en una especie de túnel.

Ambos cayeron unos instantes hasta que hicieron suelo rodando por este hasta que se separaron, el chico freno contra una gran roca y su casco sufrió una fisura, alarmando al chico.

—Oh no, no, no, no —Murmuraba el chico sentandose de golpe mientras observaba la grieta, con miedo a asfixiarse. Pero cuando alzo su brazo noto que la pantalla de su antebrazo no indicaba alguna fuga de oxigeno, de hecho marcaba que en el ambiente era seguro respirar. Noto que en suelo donde estaba no era una roca árida, sino algo que podría asegurar que era césped. A medida que se movía salía una pequeña estela azul, similar al polen si es que podemos seguir haciendo aquella comparación de lo extraño con lo natural.

Alzo su mirada, no podia creer lo que veía.

—...Un mundo bajo nuestros pies.