I'm Vanny

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En un gran edificio se escuchaba en fuerte sonido del metal temblando con mucha fuerza, siendo golpeado entre si.

Los fuertes sonidos podían escucharse desde fuera lo que alertaba a todas las personas que pasaban por ese lugar, temiendo de lo que ese gran edificio estuviera ocultando.

Un edificio que a primera vista podría tratarse de un gran hotel con muchos pasillos, habitaciones, incluyendo personas. Pero ese edificio estaba casi vacio por el completo.

Por sus pasillos no había más que restos metálicos como si una caja se hubiera roto dejando un desastre por todo el piso, las escaleras estaban en buenas condiciones, pero la mayoría del lugar se encuentra sucio.

Parece que no habían vivido nadie, que no había nadie mas que los ruidos del metal golpeándose a si mismo de una estruendosa, pero el metal no solo resonaba sin ninguna razón.

En una de las habitaciones del gran edificio se encontraba un señor de barba blanca mal cortada, que se la rascaba mirando los resultados de sus ecuaciones en una gran computadora. Todo dentro de un cuarto diseñado para dividir a dos tipos diferentes de personas.

Los experimentos y los Especímenes.

El señor solo tomaba la taza de café caliente servida en una de sus tazas favoritas que dice "El mejor padre del mundo" con el mango algo dañado y con rastro de haberse roto en algún punto, pero con el suficiente pegamento cualquier cosa puede volver a su antigua gloria.

Pero sin olvidar las marcas del daño que recibió, la gran computadora solo mostraba números que solo tenían sentido en la mente del señor que los juntaba en una perfecta ecuación dándole resultados que solo provocan que golpe la mesa con enojo.

No eran los datos que necesitaba, sin embargo, del otro lado el espécimen continuo moviéndose.

Temblando, tirado sin fuerzas para moverse, pegado al suelo por el peso de su cuerpo y la gravedad.

¿Quién era este espécimen que era de vital importancia para el hombre que enojado solo tomo otro sorbo de su café?

El espécimen no era algo orgánico, pero sus ojos, parecían tener alguna clase de conciencia que pedía a gritos dejar de ser tratado como lo era, pues el señor continuo presionando el botón de su lado de la sala.

Botón que responde a una serie de comandos que le envían a la computadora de su lado, mostrando un resultado que enciende aquellos largos cables que conectaban con el cuerpo del espécimen.

Un cuerpo metálico, que le costaba moverse.

Un cuerpo de robot, más especifico el de un animatronico que podrías encontrar en aquellos restaurantes temáticos antiguos.

No se trataba de alguna mascota antigua, no tenía una forma definida, decir que parecía algo humano también seria un error, lo único en esa masa de metal con brazos y piernas eran sus ojos. Unos ojos que podía leer tu alma provocándote un gran escalofrió llevándote al valle de lo inquietante.

El señor solo necesitaba obtener unos datos que expulsaría este cuerpo sin forma alguna, pero la mayor verdad era que este animatronico trataba de moverse en respuesta de las señales que enviaba el señor.

Pero frustrado continuaban en ese fuerte ciclo.

Ciclo que comenzaba a llevarlo al borde la locura, provocando que se levantara enojado y pateara la silla donde observaba al animatronico.

El estaba seguro que podía ser posible, pero no sabia como.

Estaba nadando en un gran océano de incógnita y las preguntas comenzaba a ahogarlo mientras entraban en sus pulmones.

Gregory en Five Nights in Anime ( Five Nights in Anime x Security Breach)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora