Las ultimas semanas del año fueron realmente extrañas. Pasaron cosas en Hogwarts, pero Eliza no podía saber con seguridad si su situación estaba relacionado con eso.
No podía saber nada, realmente, porque aunque sus pies se movían llevandola por el mismo piso que todos caminan y su cuerpo interactuaba con el plano universal usual, su conciencia parecía estar flotando en el vacio. Le era dificil concentrarse en las conversaciones, y en las sensaciones. Su cuerpo y su conciencia parecían estar desconectados la mayoría del tiempo. Nada parecía tener sentido, no sentido real por lo menos. Estudias para tener buenas notas, pero, ¿qué pasa después? ¿De que sirve tener buenas notas si no tienes ninguna visión a futuro?
No ayudaba en lo absoluto lo sola que estaba. Sus compañeras de pieza ya no eran sus amigas por alguna razón, no recordaba totalmente cual y no tenía a nadie más.
El año siguiente fue raro. Siguieron pasando cosas en el colegio y siguió estando sola. Murió mucha gente. Todo pasaba y de alguna forma nada la traía realmente de vuelta a la tierra, la guerra fue solo el ruido predominante nublando sus oídos durante un tiempo hasta que se acabo, y entonces sus oídos solo volvieron a nublarse con vacíos y silencios. El año siguiente a la guerra volvió al colegio para recuperar las clases perdidas. Por primera vez sintió su pie subiendo y bajando contra el piso cuando durante una clase una chica la llamó por su nombre.
—¿Eliza?
Se volteó a verla.
Sus oídos estaban despejados ahora, pero de todas formas se hizo el silencio por unos segundos. Casi podía escuchar sus neuronas trasmitiendo información entre ellas, procesando, intentando decifrar quien acababa de hablarle y porque le parecía conocida. Fueron solo algunos segundos, que la otra chica espero con sorprendente paciencia. Algunos segundos tienden a ser mucha espera en una conversación que se supone debería ser dinamica. Tal vez después de casi dos años había perido la practica de escuchar y hablar... y ser una persona real.
—¿Hermione?
Fue como despertar de una larga ensoñación semi consciente.
Mas cerca de final de año un día choco contra alguien en el pasillo.
—Mira por donde andas pedazo de idio- Eliza...
No estaba segura de donde la conocía, pero la conocía—. Pansy- perdón, voy a fijarme mas de ahora en adelante.
Empezó a encontrarse más y más con Pansy, quien parecía muy interesada en saber sobre su vida amorosa. Le preguntó inumerables veces por su "novio", cuyo nombre se rehusaba a pronunciar y cuya existencia Eliza ignoraba.
Durante ese año hubieron muchas fiestas, la guerra realmente hace a la gente apreciar estar vivo día a día. Las fiestas en general terminaban divididas en dos ambientes drasticamente distintos. La guerra realmente te hace notar lo fragil que es la vida, y la muerte de tantos amigos y familiares definitivamente puede generar nostalgica adicción a los distintos alivios pasajeros.
Hermione en general no estaba interesada, y fue la única amiga que Eliza tuvo por un tiempo, así que no fue hasta finales de año, cuando conoció a Pansy, que asistió por primera vez a una de estas fiestas.
Después de andar sonambula por tanto tiempo la idea de tomar y perder cierto nivel de conciencia no le parecía tan atractiva como a Pansy, que eventualmente llegó a estar suficientemente inhibida para intetar besarle.
—¿Qué haces?— pregunta Eliza, alejandose un poco, confundida y tal vez demasiado sobria para esa interacción.
—Creí que tu y el imbecil de Malfoy habían terminado.
—¿Terminado?— Eliza le sonrie algo confundida—. No se quien inventó ese rumor pero no conozco a "Malfoy" así que lo que sea que te dijeron es mentira.
—¿No conoces a Malfoy?— pregunta Pansy burlandose.
—¿No? No creo.
—Eliza, ¿no crees que es tiempo de aceptarlo y decidir seguir adelante? Negarlo no va a llevarte a ningún lado.
—Pansy, llevas preguntandome por esta persona meses ya, no se que más quieres que te diga. No se quien es. No se quien invento este nuevo rumor, pero la gente dice muchas cosas de mi y nunca he tenido novio siquiera.
—¿Nunca has tenido novio, Eliza?— insiste con una risa.
—Tal vez... ya has tomado suficiente.
Eliza responde con tal seriedad y genuina confusión que Pansy decide no insistir más. En ese momento Pansy dejó de preguntar; si Eliza estaba en tal nivel de negación sobre su relación con el imbécil de Malfoy que fingía no haber salido nunca con él, ni siquiera conocerlo, quien era ella para forzar recuerdos amargos y de poca relevancia.
Cuando hablaba con Pansy o Hermione eran de los pocos momentos en que no estaba en piloto automatico.
El tiempo siguió pasando, eventualmente conoció a un chico rubio que desnublaba sus oídos, o así fue por los primeros meses, y un tiempo después Pansy y Hermione se encontraban trabajando juntas en la misma habitación, ayudando a Eliza a prepararse para su matrimonio. Aún se llevaban horriblemente, y lo hacían notar parandose a lados opuestos de Eliza.
—Eliza— Hermiome empieza, pero esta vez sus amigas no eran suficiente para quebrantar su sonambulismo—. Aún hay tiempo para retractarse. No tienes que casarte con él, podemos irnos ahora, las tres.
—Sorprendentemente estoy de acuerdo con Granger. Vamos Eliza, mereces algo mejor.
—Esto es lo mejor... para mi.
Sus palabras le sonaron ajenas mientras el ruido blanco, el ruido de estatica de un televisor que no funciona, volvía a ocupar su cabeza.
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Cápitulo medio aburrido pero principalmente es contexto.