Capítulo 6

7 1 0
                                    

Ambos jóvenes se dirigieron a sus habitaciones junto con algunas bolsas de regalos que habían ganado en el parque.

Finn por otro lado se quedó en la sala. Aún no podía creer lo que había pasado. Su expresión había cambiado de una cara alegre a de miedo puro.

-Pude haber muerto, ahora de no ser por lo que dije estaría con un agujero en mi pecho - comenzó a repetir mientras lloraba de desesperación.

Él sabía muy bien que siempre se comportaba sincero y agradable, en cualquier situación, pero esto, no era nada como lo que se había enfrentado.

Lloraba en silencio para no alertar a los gemelos.

-Hey, ¿estás bien? - dijo una voz femenina.

Esa voz...

Finn podía reconocerla muy bien.

-Veo que estas mal - dijo Odette hincándose cerca de él.

-Odette, ¿Cómo entraste? - preguntó mirándola extrañado.

-El jardín no tenía seguro, creí que sería buena idea venir a visitar, no me preguntes como se dónde vives, pero primero, Sentémonos y Relajémonos.

Odette ayudó a Finn para sentarse en un sillón de la sala. Ella tomó dos cervezas del refrigerador de Finn y le ofreció una a este.

Él la tomó y comenzó a tomar de la lata.

El ambiente se había calmado, pero Finn seguía tembloroso.

-Bien, ya que estamos en calma, dime, ¿Qué pasó? - Odette tomó de la cerveza mirando a Finn el cual explicó todo acerca de lo acontecido con Yang.

Odette dejó salir un silbido mientras asentía.

-Es algo fuerte si te digo la verdad - dijo recargándose en sus rodillas jugueteando con la lata ya vacía.

-Mi forma de ser de alguna forma bloqueo el miedo y pude ayudarla y todavía sonreír y disfrutar del día, al llegar a aquí y esperar a que los chicos se fueran a sus habitaciones, el miedo me invadió que lo único que pude hacer fue llorar, lamento que me hayas visto así.

Finn parecía apenado al decir lo último.

-Tranquilo, sabes que estoy aquí para ayudarte, ¿Abrazo? - le preguntó estirando sus brazos.

Finn sonrió y abrazó a Odette. El cálido cuerpo de Odette era reconfortante, ambos se quedaron así durante un rato.

-Gracias Odette, era lo que necesitaba - dijo con un gran suspiro mientras se separaba de ella.

-Siempre estaré para ayudarte, ¿alguna vez fuiste a un psicólogo? No quiero decir que estés loco ni mucho menos, no me malentiendas, simplemente que, yo he comenzado a ver a uno, podría ayudarte - dijo mientras sacaba una tarjeta de presentación - dile que vas de mi parte ella podría hacerte un descuento.

Dijo con una risita.

Finn con tranquilidad tomó la tarjeta.

-podría intentar - dijo dándole una sonrisa a Odette.

-Me gustaría quedarme más tiempo, pero sé que necesitas tu espacio - dijo levantándose.

-No, no me molesta que estés aquí, de hecho, es reconfortante - la voz de Finn denotaba nerviosismo.

-Tranquilo, sé que otro día podremos tener una cita más decente - le dijo jugueteando con el cabello de Finn.

Un leve sonrojo se hizo presente en la cara de Finn mientras este se levantaba mostrando que Odette era igual de alta que él.

La vida ordinaria de FinnDonde viven las historias. Descúbrelo ahora